Plan detox para después de las vacaciones: esto es lo que deberías comer para sentirte más ligero

El plan detox está en la mente de muchos estos días con la vuelta de las vacaciones y el regreso a la rutina. Seguro que durante el verano hemos dejado a un lado la alimentación saludable y nos hemos saltado a la ligera alguna comida equilibrada con los aperitivos en la playa, las noches largas y los horarios poco ordenados. Además, son muchos los que habrán dejado a un lado también el ejercicio físico y es el momento de recuperar los buenos hábitos. 

Tras los días de descanso, toca volver a la alimentación saludable y es un buen momento para hacer un plan detox que nos ayude a limpiar nuestro organismo de los excesos que hayamos podido cometer en vacaciones. No hablamos solo de adelgazar (aquí es mejor que acudas a un nutricionista que te asesore sobre la dieta que debes seguir si lo que quieres es perder peso), sino de liberar el organismo de toxinas, sentirnos más ligeros y con más energía de cara a la llegada inminente del otoño.

Por eso, es la hora de dejar atrás los alimentos procesados, el alcohol y el azúcar y retomar buenos hábitos incluyendo frutas, verduras, hortalizas y proteínas en tu alimentación diaria. Hacer un plan detox para limpiar el organismo después de vacaciones puede ayudarnos a que nuestro metabolismo funcione correctamente y así no sentirnos pesados después de comer. Además, ten en cuenta que un exceso de toxinas nos puede llevar a la generación de alergias, intolerancias e incluso patologías inflamatorias, entre otras cosas.

Tips para el plan detox

Conviene destacar que este método es recomendable después de épocas de excesos, como el verano o el fin de año. Ahora ¿Cómo hacer el plan detox? Es simple, pero debemos seguir las siguientes indicaciones:

• Apuesta por una dieta hipocalórica. Esto significa consumir menos calorías de las que necesitas, pero eso sí, la alimentación debe ser saludable y equilibrada siempre. Toma muchos líquidos, alimentos que tengan un alto contenido en fibra y que sean bajos en grasas. Hay que tener ojo y no restringir el consumo de proteínas ni de ácidos grasos esenciales, vegetales y sustancias ricas en taurinas. 

• Bebe mucha agua. Puedes añadir al consumo habitual de agua, alguna infusión. Cuando el organismo está en los niveles óptimos de hidratación es más fácil adelgazar. Las toxinas se eliminan con más facilidad y nos aporta las dosis necesarias de minerales. 
• Hazlo unos 10 días. Todo depende del grado de excesos que hayamos tenido en cuanto a alimentación durante las vacaciones de verano, pero no hay que pasar los 20 días del plan detox. 
• No restrinjas alimentos. Cuidarse un poquito no significa quitar alimentos saludables de tu dieta diaria. Apuesta por una dieta equilibrada, variada y compensada. Toma fibra y alimentos como brócoli, alcachofa y rúcula para completar tus platos. 
• La importancia del ejercicio físico. Como siempre decimos, la dieta detox está bien pero hay que moverse. La combinación de una dieta equilibrada y ejercicio físico te hará sentir menos hinchado y con mucha más energía. Además, reducirás el estrés de la vuelta a la rutina e incluso dormirás mejor. Haz un par de días ejercicios de fuerza y combínalo con otros entrenamientos cardiovasculares. Lo ideal es hacer cuatro días de ejercicio a la semana. Recuerda que descansar también es clave para tu organismo y tus músculos.
• Haz cinco comidas. Vuelve a la rutina de hacer cinco comidas para no llegar a las principales con un hambre atroz que te haga comer más de lo que necesitas realmente. A media mañana y a media tarde apuesta por snacks saludables con crudités de verduras, un yogur ligero o una pieza de fruta.
• Planifica el menú semanal. Si tienes que comer en la oficina de tupper, el domingo organiza toda la semana de comidas. Déjate preparados los tuppers e incluye siempre verduras, algo de hidrato y algo de proteína. Así evitarás caer en la tentación de comer algo rápido y menos saludable.

Alimentos del plan detox

Lo principal es seguir una dieta equilibrada en la que tomemos alimentos que nos den la suficiente energía para afrontar el día a día y que nos hagan sentir más ligeros. Entre los alimentos que deberíamos incluir en nuestra alimentación durante el plan detox se encuentran:

• El brócoli, coliflor o coles de bruselas. Hazlos al vapor o al horno, nada de rebozados o con salsas como la bechamel.
• Alcachofas. Es un alimento rico en fibra y con mucha agua. Puedes hacerlas cocidas con un chorrito de aceite de oliva o añadir un huevo a la plancha (no frito).
• Avena. Es perfecta para estos días del plan detox. Puedes tomarla para desayunar en forma de copos de avena integral y añadir leche desnatada, de avena o yogur ligero.
• Boniato. Para la guarnición es ideal si lo haces en forma de palitos y al horno. Será un aperitivo además muy crujiente y sabroso.
• Huevos. Tiene mucha proteína y además un poder saciante clave en estas dietas detox. Lo puedes añadir a casi cualquier plato, ya sea una ensalada, una crema de verduras o a la plancha con algo de pasta o arroz integral (y sin salsas).
• Fruta y verdura. Apuesta por frutas de temporada y refrescantes. Las naranjas son muy recomendables y mejor siempre naturales que en forma de zumo. Igual con las verduras, mejor la verdes (judías verdes, brócoli…).
• Espárragos. Son un buen plato para tomar solos o como acompañamiento a alguna carne o pescado.
• Semillas y especias. Añade a tu desayuno o ensaladas algunas semillas de lino o incluso un toque de canela. También el jengibre es ideal para dar sabor a tus platos.
• Legumbres. Inclúyelas un par de veces a la semana ya sea en forma de guiso (evita añadir ingredientes como el chorizo o la morcilla). Mejor lentejas que alubias por su alto contenido en hierro también.
• Lácteos. Tómalos en su versión desnatada, yogures light o quesos blandos, mejor que los más curados para tu plan detox.

Alimentos que deberíamos evitar en la medida de lo posible:

• Azúcar o alimentos que contengan azúcar. Puedes usar edulcorantes naturales como la miel para dar un toque dulce por ejemplo a tu desayuno.
• Mantequilla o mermelada. 
• Embutidos grasos. 
• Fritos.
• Alcohol.
• Alimentos ultraprocesados.
• Refrescos o bebidas azucaradas.