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Sociedad

Las matemáticas se vuelven un juego de niños: el método Smartick planta cara al desastre de PISA

El método de aprendizaje que propone Smartick se basa en la eficacia del esfuerzo concentrado y sólo requiere 15 minutos de práctica diaria.

A España se le resisten las matemáticas. El último informe PISA del que se tienen datos (2009) reveló que los estudiantes españoles de 15 años estaban 12 puntos por debajo de la media de los países de la OCDE en matemáticas y en ciencias. Y lo que es más grave aún, el informe PIAAC que se realiza a personas de entre 16 y 65 años reveló que el 31% de la población adulta española no sabe interpretar el gráfico de la factura de la luz o comparar los precios de hoteles. Pese a todo, España necesita matemáticos:

Actualmente, el 40% de los ofertas de trabajo que se registran en Estados Unidos se producen en la industria digital y la Comisión Europea estima que para 2015 habrá un déficit de 700.000 profesionales en el mundo tecnológico. Esta reflexión, unida a los desastrosos resultados educativos, impulsó la creación de Smartick, una plataforma online de enseñanza de matemáticas que se ha propuesto cambiar las tornas y plantar cara al informe PISA.

"Nos dimos cuenta de que los malos resultados de los alumnos españoles en matemáticas y comprensión lectora requerían encontrar un nuevo enfoque didáctico. Gracias a las nuevas tecnologías, la educación está viviendo una revolución digital que hace que las editoriales ya no sean los únicos jugadores", explica Daniel González de Vega, cofundador de Smartick. "Hemos intentado combinar la funcionalidad y el atractivo de la tecnología online con los métodos de enseñanza tradicionales", matiza.

La plataforma se beneficia, además, de las habilidades tecnológicas de estos jóvenes 'nativos digitales'. Y es que, independientemente del nivel sociocultutal, el 95,2% de los niños entre 10 y 15 años utiliza ordenadores y el 91,8% sabe acceder a internet, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Un método eficaz que despierta el interés del alumno

"El niño se motiva porque por primera vez es capaz de resolver los problemas matemáticos"

Los pilares del método Smartick son la evaluación en tiempo real, la capacidad de adaptar el ritmo y la dificultad de los ejercicios a la capacidad del alumno, la disciplina diaria y los beneficios de la práctica por tareas. Todo ello, mediante el empleo de un ordenador o tableta durante 15 minutos al día.

La plataforma fue desarrollada por matemáticos, ingenieros y economistas de INSEAD y la Universidad Autónoma de Madrid, y se ha basado en un proceso algorítmico que, en función de lo que haga el alumno en cada ejercicio, adapta el programa de enseñanza a su rendimiento. Responde así a la teoría de Norman Crowder, que defiende que el programa es el que se debe adaptar al alumno y no el alumno al programa, como en los cuadernillos.

Smartick se inspira en las experiencias en Harvard en los años 60 del Profesor Skinner, que demostró que proporcionar información inmediata al alumno sobre sus propios aciertos y errores aumentaba notablemente la eficacia de la enseñanza. Tambien se pone en práctica el principio de que con esfuerzos concentrados en un periodo corto de tiempo (15 minutos en este caso) se obtienen mejores resultados que en largas sesiones de ejercicios. 

El padre o tutor, por su parte, cuenta con una herramienta que permite un seguimiento detallado del aprendizaje del alumno y facilita una interacción tutor-alumno eficiente y productiva.

Las matemáticas como generador de autoestima

Aunque la plataforma se concentra en la enseñanza de matemáticas, los beneficios colaterales que produce en el alumno van desde un aumento de su capacidad de atención, de su comprensión lectora (a través de los problemas que propone) hasta una mejora en su autoestima.

Smartick permite atender la diversidad de alumnos sin fomentar la segregación y la estigmatización

"El niño que utiliza Smartick se motiva porque por primera vez es capaz de resolver los problemas. Esto provoca una respuesta positiva que tira de su nivel hacia arriba y mejora su rendimiento", afirma Daniel González, que destaca que esa capacidad de adaptación es su gran ventaja a la hora de aplicarlo a clases de colegios. "En una clase de primaria hay una polarización total de habilidades, lo cual provoca que los más retrasados entren en una espiral de baja autoestima".

Smartick permite atender la diversidad de alumnos sin fomentar la segregación y la estigmatización que lleva aparejada. "Es una forma única y barata de personalizar la enseñanza del alumno, algo que un profeso no puede conseguir sin ayuda", afirma el fundador.

Éxito del programa piloto

Con el fin de poner a prueba la plataforma con alumnos reales de Primaria, Smartick puso en marcha el curso pasado una prueba piloto con tres colegios públicos de la Comunidad de Madrid. Probaron la herramienta alumnos de entre seis y 12 años con resultados “extraordinarios”, según los expertos educativos.

“Se trata de una herramienta de primera categoría para los profesores, ya que se permite monitorizar los datos y que las muestras recogidas estén muy granuladas. Cada niño trabaja al máximo de sus posibilidades, lo cual repercute en su motivación”, asegura Marisol Moreno, directora del Colegio Público Rosa de Luxemburgo (Aravaca), uno de los centros que repite este curso.

“Como colegio nos sentimos privilegiados por participar en este proyecto de la Comunidad de Madrid. Los resultados están siendo muy positivos, hasta el punto de que hay niños de 2º o 3º de Primaria que están alcanzando el nivel de alumnos de 5º”, asegura la directora, que destaca la importancia de que los niños se manejen con las nuevas tecnologías.

Smartick también permite a los padres contratar sus servicios para que los niños trabajen desde casa. Existe la posibilidad de hacer una prueba gratuita durante 15 días.

https://youtube.com/watch?v=lHW8c2xxATQ

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