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Economía

Sindicatos y empresarios no negociarán la subida salarial de 2017 hasta después del verano

El presidente de la CEOE, Juan Rosell

Los agentes sociales firmaron en junio de 2015 el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva para los años 2015, 2016 y 2017 tras meses de dura negociación, pero no ataron todos los cabos. Acordaron una subida salarial del 1% para 2015 y del 1,5% para 2016 y no concretaron la cifra de 2017 con la idea de ser más precisos y ajustarse más a la realidad económica del país cuando se acercara la fecha.

Lo que no imaginaron en aquel momento es que España seguiría a estas alturas del año con un Gobierno en funciones y muy cerca de la celebración de unas nuevas elecciones que no llegarán hasta el mes de junio, lo que hace prácticamente imposible que se forme un nuevo Ejecutivo antes del verano.

En este contexto, los empresarios prefieren esperar a septiembre para empezar a hablar de cifras, según ha podido saber Vozpópuli. Para ellos, después de verano será mejor momento porque habrá más información sobre la evolución económica del primer semestre y se conocerán con exactitud las previsiones para 2017.

Los empresarios creen que septiembre será mejor momento porque tendrán más información sobre la evolución económica

El acuerdo vigente dice que para determinar el aumento salarial de 2017 hay que esperar a la publicación del cuadro macroeconómico, que se conocerá este mismo mes. Actualmente, el Gobierno espera que el PIB crezca un 3% en 2017, pero es posible que revise esa cifra a finales de abril cuando actualice el Programa de Estabilidad y publique el Plan Nacional de Reformas.

Según el texto que firmaron en junio de 2015, los agentes sociales tendrían tres meses desde la publicación del cuadro para concretar dicho aumento salarial, aunque los empresarios prefieren esperar un poco más, al menos hasta septiembre, para tener más datos económicos.

Se podrán modular los incrementos

En cualquier caso, el acuerdo vigente dice que los negociadores deberán tener en cuenta las circunstancias específicas de su ámbito para fijar las condiciones salariales del año que viene, de tal manera que los porcentajes de incremento se podrán modular en cada sector o empresa dentro de los límites derivados del incremento de la productividad y del empleo.

Habrá que tener en cuenta las condiciones específicas de cada sector y cada empresa

El objetivo de poder modular esta cifra es que el incremento salarial resultante permita a los sectores y a las empresas, en particular a las abiertas a la competencia internacional, mantener su posición actual y no verse perjudicadas respecto a sus competidores.

Además, en los convenios de empresa también podrán tenerse en cuenta otros elementos para determinar incrementos adicionales, siempre que se establezcan a base de indicadores cuantificados, medibles y conocidos por las dos partes negociadoras. Estos aumentos retributivos, según el texto, se dedicarán preferentemente a retribuciones de carácter variable.

Primer acuerdo salarial para Pepe Álvarez

El presidente de la CEOE, Juan Rosell, el de Cepyme, Antonio Garamendi, y el secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, ya negociaron el último acuerdo de negociación colectiva. En cambio, para el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, será una de sus primeras grandes batallas, después de haber sido elegido para sustituir a Cándido Méndez el pasado mes de marzo.

De hecho, los agentes sociales aún no se han hecho la nueva foto oficial, aunque sí han empezado a mantener contactos por teléfono. Uno de los primeros objetivos que se ha fijado Álvarez es intentar conseguir el apoyo de CC.OO. y de los empresarios para pedir la recuperación del contrato de relevo, tal y como ha ocurrido en el sector de la automoción. 

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