En España, como en todas partes, hay leyes que persisten un poco por inercia. Son reglamentos, normas, o arreglos institucionales que quizás tenían sentido en el momento en que fueron aprobadas décadas atrás, pero que ahora no hacen más que incordiar.

Golpe de efecto de los Cosmen. La compañía de transportes británica National Express, de la que los empresarios asturianos controlan cerca de un 18%, acaba de adjudicarse dos contratos para la explotación de sendas vías férreas en la región de Westfalia, una de las más pobladas de Alemania. La concesión, por un periodo de 15 años, podría reportar a National Express unos ingresos próximos a los 1.600 millones de euros.