El posado de Carmen Thyssen con sus hijas mellizas, la entrevista de Edmundo Arrocet tras la muerte de María Teresa Campos, la escapada de Gabriela Guillén, embarazada de seis meses, y la reaparición de la infanta Cristina en la boda del hijo de Borja Prado, presidente de Mediaset, son algunas de las noticias de corazón de las portadas de las revistas de hoy miércoles

¿Tenemos que preocuparnos por Borja Thyssen? Tan rico él, o eso nos parece. Va cargado de  viajes, y de vacaciones, o esa impresión da. Y sin embargo, el dinero puede llevarle a pasarlo mal. Después de oír a su madre, Tita Cervera, nos asaltan las dudas.

La historia del hijo de Tita Cervera no ha convencido a la Fiscalía que le pide dos años y el pago de 1,2 millones de euros por defraudar a Hacienda al considerar que no declaró 1,4 millones de euros que percibió en exclusivas, alegando que vivía en Andorra, algo que han comprobado que no es cierto. Ya tenía otra causa abierta por el mismo caso lo que dificulta llegar a un acuerdo para no ingresar en prisión.

La familia Thyssen acarrea problemas con Hacienda desde hace tiempo, lo que les llevó a vender su mansión de Suiza a comienzos de 2015 por 60 millones de euros. Ahora, a fin de evitar nuevos incidentes y pagar menos impuestos, Borja se trasladará a vivir a Andorra.

A la cuarta va la vencida. Borja Thyssen y Blanca cuesta son, por fin, padres de una niña. La pequeña, nacida este domingo por la tarde en la clínica Ruber Internacional de Madrid, ya ha recibido la visita de su abuela Tita y al parecer se llamará Kala.

Blanca Cuesta debe de ser la mujer más feliz de España. Vive de rentas que no son suyas, el dinero llama a su puerta sin tener ni que moverse, pasa los veranos en Ibiza y los inviernos en una mansión y ha conseguido lo que muchos desearían: darle en toda la cara a su suegra. Hoy, la venganza de Blanca, un plato que se sirve bien frío.