No me creo el discurso de quienes afirman que lo que está pasando con el PP en Extremadura, en Valencia o en Aragón es la consecuencia del oportunismo de un partido que no tiene ningún problema en predicar en Extremadura lo contrario de lo que pontifica en Valencia. Parece que lo importante para ese partido es conquistar los gobiernos sin importar decir en un territorio lo contrario de lo que dice en otro. Da la impresión de que hacen uso del refrán ese que dice “ande yo caliente, ríase la gente”.
Si se pretendiera que en cada territorio se hiciera exactamente la misma política que marque el Gobierno del Estado para ese viaje no se necesitarían alforjas
Siempre he defendido –y he practicado- que los llamados barones y baronesas, es decir los presidentes autonómicos o candidatos a presidir gobiernos autonómicos, no son los delegados de sus partidos o del Gobierno central en cada Comunidad Autónoma. Hace tiempo que existen los delegados del Gobierno que son los representantes del Gobierno Central y cuya política no puede separarse ni un milímetro de la política del Gobierno al que representan. No debe, por tanto, resultar extraño que los presidentes autonómicos o los candidatos a presidentes mantengan su propia política, porque cada territorio es distinto y diferente. Si se pretendiera que en cada territorio se hiciera exactamente la misma política que marque el Gobierno del Estado o los órganos de dirección que acompañan al líder del partido, para ese viaje no se necesitarían alforjas.
La dirección socialista puede llegar a acuerdos con Bildu o con ERC y, simultáneamente, defender en algunas Comunidades Autónomas la unidad de España
Desde esa diversidad podría deducirse que el PP no tiene una política de Estado que sea reconocible en cualquier parte, cualquieras que sean los socios que acompañen a los candidatos a presidentes autonómicos o a los que ya los son. De lo contrario no sería concebible que ese partido les cuente a los extremeños una historia que es contraria a la que les cuenta a los valencianos.
Esa misma situación se ha producido en el PSOE desde su último Congreso Federal. Los acuerdos con partidos que desprecian la Constitución y desean romper la unidad de España chocan contra la mayoría de los candidatos a presidentes o con los presidentes de ese partido que negocian su investidura o resultarán electos en sus respectivas Comunidades Autónomas. La dirección socialista puede llegar a acuerdos con Bildu o con Podemos o con Esquerra Republicana de Cataluña y simultáneamente defender en algunas Comunidades Autónomas la unidad de España o la imposibilidad legal de realizar un referéndum de autodeterminación.
Visto lo que se está viendo en el proceso postelectoral e independientemente de los resultados que se obtengan por PSOE y por PP en sus políticas de pactos, lo que me resulta alarmante es que da la sensación de que ni uno ni otro tienen definido, consolidado y amarrado un modelo de Estado que coincida milimétricamente con la Constitución, lo cual no deja de ser una desgracia para una país como el nuestro.
Definir un modelo claro e inequívoco es mucho más importante que quiénes van a gobernar en los diferentes territorios que conforman España. Si los dos modelos estuvieran bien definidos, nadie albergaría la menor duda de qué pactos serían posibles y cuáles, no.
Se podría estimular el voto si se supiera con antelación la política de acuerdos de aquellas fuerzas que se presentan a las elecciones
Puesto que en nuestro sistema electoral no existe la segunda vuelta, resultaría exigible que tanto PSOE como PP se comprometieran públicamente a despejar cualquier duda sobre sus pactos postelectorales. Eliminar la posibilidad de que, tras las elecciones del 23-J, ambas formaciones políticas acuerden pactos con la extrema izquierda y con la extrema derecha serviría para que los electores tuviéramos la seguridad de que nuestro voto no se va a utilizar para alimentar los extremos del espectro político. Los españoles necesitamos que, de nuevo, PSOE y PP ocupen la centralidad que garantiza la estabilidad de España.
La fecha elegida para dirimir le hegemonía parlamentaria no es la más aconsejable si lo que se desea es que nuestro sistema democrático se fortalezca con una alta participación en el próximo 23 de Julio. Si a esa eventualidad se le suma la desconfianza por la falta de claridad en la política de pactos postelectorales, nada se puede hacer respecto a la fecha elegida por quien tiene la facultad de convocar. Se podría estimular el voto si se supiera con antelación la política de acuerdos de aquellas fuerzas que se presentan a las elecciones. Yo apuesto por fortalecer al PSOE para que no tenga necesidad de competir y posteriormente pactar con sus extremos. Estoy seguro de que otros españoles querrán fortalecer al PP para que ese partido no se vea obligado a acuerdos con sus extremos. En eso estamos millones de ciudadanos y en eso deberían estar esas dos formaciones políticas que conforman el centro izquierda y el centro derecha.
Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.
sr Ibarra posible mente no sea la mejor candidata para su tierra pero ustedes no han conseguido ni llevar un autobús y eso que han gobernaos con todos los gobiernos lo mejor es que estén una temporada larga en el banquillo
Nada en esta perorata tiene ya sentido a estas alturas. A Ibarra y a otros veteranos del PSOE que claman - no sin razón - que lo de Sánchez es el acabose hay que contestarles exactamente lo que dijo Mafalda: "Y... No, es tan sólo el continuose del empezose de ustedes..." Me explico: el verdadero problema del PSOE, a mi juicio, es haber EJERCIDO muy poco de socialdemocracia real: un poco de reformismo (siempre que no supusiera problemas y nadie espantara a los caballos), un mucho de demagogia populista, grandes dosis de clientelismo en zonas rurales... En fin: todo menos lo que anunció Guerra en el 82: que no se trataba tanto de socialismo como que de que España funcionara. Por eso lo votamos tantos en su día. Pero lo que nunca hizo el PSOE - NUNCA - fue cambiar DE VERDAD el tejido productivo, dignificar las instituciones - Ay, la Justicia -, mejorar el rendimiento del sector público . ay, la Universidad, ay, la educación, ay, la investigación, ay sí LA SANIDAD... -. Aunque el PSOE a todo le lavó la cara, nada de lo esencial por lo que fue votado con tanto entusiasmo fue reformado con un mínimo de firmeza; ni de visión a largo plazo. Voy a poner sólo un ejemplo, que sólo en apariencia es menor. Consideremos el caso del AGUA: ¿Qué hizo el PSOE en el entorno de Doñana durante sus largos años de poder ABSOLUTO, provincial, autonómico y nacional? Yo lo diré: NADA. o peor: LA VISTA GORDA. Cada uno podrá recordar muchos más ejemplos de esta... llamémosle política. Todo ese "dolce far niente", facilitado durante muchos momentos por la falta de un adversario competente, erosiona el prestigio del más pintado; lo cual es combatido, en un partido con un aparato tan grande como el PSOE, con más demagogia y con más clientelismo. Juntándose, eso sí, con toda clase de malas compañías, claro está. Estas tácticas alcanzan su máximo con Sánchez, cuya estrategia ha terminado siendo la de exterminar a sus adversarios vista la imposibilidad de mejorar EN NADA a su propio partido, fiándolo todo a ser el menos malo de los candidatos posibles (Hoy NADA en su propia propaganda habla de ser siquiera primera fuerza, sólo de seguir en el poder pactando CON QUIEN SEA). La idea era, en la práctica, cargarse la oposición; y casi acaba consiguiéndolo. Lo cual hubiera sido muy malo para el sistema, porque una filosofía conservadora MODERNA es esencial en toda democracia. Pero al final, creo que lo que va a conseguir es lo contrario: cargarse al PSOE; lo cual tampoco es buena noticia, porque una filosofía reformista y socialdemócrata MODERNA tampoco deja de hacer falta. En fin: Sánchez tiene que irse por el bien de España; pero entre su PSOE y el anterior nos dejan un legado de odio, de extremismo, de incompetencia y de BARBARIE con el que vamos a estar entretenidos. Demasiado entretenidos, creo yo. Mientras tanto, a mí el señor Ibarra me suena como los falangistas de mi juventud, que al cabo de cuarenta años de franquismo hablaban de que, en realidad, su revolución social estaba "pendiente"... Pues vaya.
"que tanto PSOE como PP se comprometieran públicamente a despejar cualquier duda sobre sus pactos postelectorales"
Bueno, Sánchez se comprometió públicamente a muchas cosas de ese tipo antes de las anteriores elecciones , algunas veces repitiéndolo múltiples veces en pantalla.
Ya sabemos para qué sirvió.
sr.Ibarra el especialista en todo lo que escribe en su articulo es precisamente su
PSOE,muchas mentiras en cualquier comunidad que este gobernando su partido
o estuviera anteriormente,no tienen empacho en mentir una vez tras otra,eso al final cansa y el solo se derrota,si vuelve a ganar Sanchez pensare que no somos tan maduros y si desmemoriados
Aunque no le guste España ya no es solo PP y Psoe, hay personas a las que no nos gustan ninguno de los dos, el Psoe me parece horrible porque en vez de aclarar lo que vd. pide, saber cuales son sus pactos postelectorales, engaña y jura y perjura que nunca pactará con bilduetarras y va y lo hace. Y al PP, siempre pendiente de lo que digan de ellos los que nunca le votarán, acomplejados y queriendo parece progres para que la izquierda feroz no les llame fascistas, tampoco me gusta. Con el Psoe pactará esa entelequia que es Sumar y toda la hez que ha gobernado con ellos en esta legislatura, y con el PP irá VOX, que está siendo groseramente tratado, ni son xenófobos, quieren una inmigración ordenada, ni son contra la mujer, denominan de otra forma, pura cuestión semjantica el maltrato, pero que no quiere hacer la Guerra de los Rose como la asilvestrada menestra Montero, ni sueltan violadores y pederastas, ni son los demonios que esta izquierda que se cree la única con derecho a gobernar, los pinta. ¡, Sánchez un auténtico desastre, la derecha como es mi caso, hemos esperado sin quemar un contenedor ni incendiar la calle, a que llegue la hora de votar democráticamente, espero que el castigo sea de antología.
Todo su escrito es una farsa, trilerismo político para "apostar" por re-votar a Pedro Sánchez. Usted quiere que juguemos a la "ruleta rusa" con nuestro voto. Votar al PSOE es votar a la ETA. Votar al PSOE es apoyar al acreditado embustero y enemigo de España, Pedro Sánchez. Votar al PSOE es votar a los golpistas Catalanes. Votar al PSOE es beneficiar a miles de violadores y pederastas. La democracia española no solo necesita que el PSOE pierda, necesita que lo haga por "goleada". No puede ser que tanta maldad traída por el PSOE se dilucide un una derrota honrosa.
A ver, Sr. Ibarra, hoy pretende hacernos comulgar con la idea de que PP y PSOE no deberían pactar con partidos radicales que están contra la Constitución, y, en este respecto, iguala Ud. a Podemos, a ERC, a JxC, a Bildu con VOX. No cuela, Sr. Ibarra. Los primeros claramente quieren cargarse el sistema de convivencia diseñado en la Constitución, incluso dando golpes de Estado, mientras que VOX siempre ha sido respetuoso con el cumplimiento de las leyes y de la Constitución. Lo que ha hecho el PSOE de Pedro Sánchez ha sido indultar a los delincuentes juzgados y condenados para obtener su apoyo, además de eliminar del código penal el delito por el que fueron condenados, también para seguir contando con su apoyo, cosa que el PP nunca haría. No es en absoluto comparable (como Ud. pretende) la política de pactos de PSOE y de PP. Quienes demonizan a VOX sin aportar hechos ciertos y argumentos objetivos, racionales y contundentes demuestran su alto grado de sectarismo. Desgraciadamente no es Ud. el único que lo hace.
Juan Carlos, tu partido y el PP se han cargado con sus corruptelas la democracia y la libertad de España y de sus ciudadanos.
"Los españoles necesitamos que, de nuevo, PSOE y PP ocupen la centralidad que garantiza la estabilidad de España. "
¿La centralidad? ¿Qué es para usted la centralidad? ¿Cuándo ha sido usted del centro? ¿Otra vez el bipartidismo?
Afortunadamente los españoles nos libramos de políticos como usted. Esperemos que no vuelvan.