Los tiempos en que se votaba siempre al mismo partido han acabado. Son momentos de gran incertidumbre, en los que el bolsillo del españolito de a pie se nota más y más vacío cada día y en el que los miedos crecen de manera vertiginosa. En este escenario nos encontramos ante las elecciones andaluzas. La gente quiere soluciones son de sentido común. Nadie se pregunta qué votaba Sir Alexander Fleming a la hora de tomar penicilina contra una infección. Se toma porque es útil y punto.
Por eso la Andalucía de aquel PSOE de pañuelo con cuatro nudos y botijo, peonadas falsas, subvención a los amiguetes, beautiful people marbellí, mariscadas y aires de superioridad en los congresos federales, se ha diluido como un azucarillo en el café. Cierto es que ha sido preciso una pandemia con la consecuente crisis, especialmente en el sector turístico, y la torpeza acumulada de las medidas económicas sanchistas – me niego a calificarlas de política – para que muchos votantes del PSOE hayan entendido que dos y dos son cuatro.
Tengo para mí que la bonhomía del candidato Moreno Bonilla, ha tenido también un enorme peso. La gestión de la Junta ha sido todo lo buena que ha podido, contando con las zancadillas monclovitas que ha tenido que sufrir. Añadamos, porque es justo, que Ciudadanos ha sido de una enorme eficacia, pero los naranjas llevan el pecado de haberse querido arrimar, perdón por el juego de palabras, a Sánchez y la gente no lo acepta en una formación que se reclamaba en las antípodas del chavismo caudillista que representa el gobierno actual.
Tenemos a un PP que está en situación de absorber buena parte del electorado socialista. No olvidemos que las elecciones siempre se deciden en el centro
Tenemos a un PP que está en situación de absorber buena parte del electorado socialista. No olvidemos que las elecciones siempre se deciden en el centro. Y el partido que Feijóo ha decidido impulsar una pátina socialdemócrata que bien puede atraer a determinados votantes huérfanos del socialismo felipista. Pero que no olviden los populares que cometerían un error de bulto si obviasen a Vox.
Hubo quien los definió como unos militantes del PP con una mala tarde. Y no es eso. Vox propone una batería de medidas que fácilmente aceptables, medidas transversales como la supresión de las administraciones improductivas o el cierre de los chiringuitos que parasitan alrededor de partidos e instituciones. Tienen el don de hablar claro, de no esconder sus intenciones y de llamar al pan, pan y al vino, vino. Decía Abascal el otro día en una entrevista que si llegase al gobierno de España lo primero que haría sería derogar todo lo que la izquierda ha legislado desde los tiempos de Zapatero. "En los primeros quince minutos", aseguraba el líder verde.
Moreno Bonilla no puede cerrar los ojos ante un partido que va a incrementar su presencia en el parlamento andaluz de manera brutal, que es la tercera fuerza en el congreso delos diputados, que es una formación con la que gobierna en Castilla y León y que, le guste o no, está ahí para no marcharse. Frases como que podría repetir elecciones no ayudan al cambio iniciado en Andalucía que debe proseguir para bien de esa región, así como para el de España. Porque Feijóo, Moreno y todo el PP pueden irse a dormir pero, cuando despierten, Vox seguirá ahí. Ayuso lo sabe muy bien. Como sabe que su éxito en Madrid se debe a que no pocos votantes socialistas la han votado a ella y no a Gabilondo. Ese es el asunto.
Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.
Prácticamente en cada elección suelo votar distinto, todo depende del ámbito geográfico, las personas y los programas. En la próximas andaluzas (yo soy andaluz), voy a votar a Juanma Moreno. Creo que ha sido un tipo honrado, que lo ha hecho bien, con tranquilidad y eficacia.
Dicho lo cual no me importaría, es mas me gustaría, que formara gobierno de coalición con VOX. No le acepto a la izquierda que critique esta formula cuando ellos lo han hecho con comunistas bolivarianos, herederos de la ETA, golpistas catalanes y demás especímenes, que tanto está perjudicando a España y los españoles. Dicho gobierno de coalición podria ser sumamente constructivo al moderarse mutuamente los aspectos mas socializantes del PP y los mas radicales de VOX.
De la derechita cobarde me espero cualquier tropelía...
Es que lo que dicen ser la izquierda, ni lo es ni se le espera. Y lo que dicen ser la extrema derecha, son bastante más cercanos a la ciudadanía y a sus problemas que Don Antonio el honesto y sus amigos.
Pues eso!...
Nada nuevo bajo el Sol
En toda Europa los partidos de la socialdemocracia (los equivalentes a PPSOE) se hunden y desaparecen dejando sitio a formaciones mas "creativas", desde berluscones en Italia a partidos tildados de "extrema derecha" por los comunistas y socialistas de palacio .
Es demasiado simple: las clases medias nacidas en la posguerra se estan disolviendo en un magma de neoproletariado subvencionado mientras millones de inmigrantes pasan a la cola de las ayudas publicas "para pagarnos las pensiones".
La generacion de riqueza y de trabajo se ha ido a Asia y nos hemos acostumbrado a comprar basura de dos usos en Shein porque no nos da para mas.
No nos extrañemos que incluso los socialdemocratas suecos ya hablen de cortar la inmigracion a su pais a causa del enorme destrozo de la convivencia en muchas ciudades suecas.
Justo el mismo discurso de Vox en España pero alli pronunciado por la izquierda feten.
Esto ya no da para mucho mas a pesar de la Open Society Fundation y sus millones.
Es el problema Miquel.
Cuando alguien escucha a un líder del PP y se lo cree, aunque sea un poquito.
El JuanMa NO CUMPLIÓ LO ACORDADO CON VOX para que votasen su investidura. Miquel lo llama bonhomía, yo lo llamo estafa.
De Cs poco se puede decir. Esa "gestión eficaz" se resume en "efecto llamada" a la inmigración ilegal, acogimiento masivo de MENAS y aplicación sumarísima de las leyes de género. Lo de pomelo lo tienen bien ganado.
Y reconocer la deriva izquierdista del PP sin que salten las alarmas ya es de traca. Todo por los votos. Bueno, realmente el PP lleva desde M.Rajoy aplicando políticas de izquierdas, bien está que se apoye en electores de esa ideología.
Prepáresen que ya se adivina pacto PP-PSOE para evitar que Vox entre en la Junta ¿Aceptan apuestas?.
No sé, no sé. Un pacto del PP con la PSOE de Sánchez para obviar a Vox impulsaría a innumerables votantes del PP a priori fijos, a votar a Vox en la primera oportunidad.
Que se tenga que soportar que saquen a pasear bajo palio al Solemne Cobarde es una cosa, pero esto otro sería excesivo.
Magnífica reflexión...mal haría el PP si después del 19J olvida a VOX y se deja llevar por la izquierda...