Quantcast

Internacional

Quitarle el turbante a los clérigos, la nueva fórmula para protestar de los jóvenes iraníes

El modus operandi ya es viral en las redes sociales: un joven, chico o chica, se acerca por detrás a un clérigo y con la mano le da un golpe al turbante con el que se cubre la cabeza hasta que cae al suelo

Nueva fórmula de protesta en Irán/ Europa Press
Nueva fórmula de protesta en Irán/ Europa Press

Los jóvenes iraníes han improvisado diversas formas de protestar en Irán, desde mujeres que caminan sin velo a gritos desde las ventanas pasando por canciones protesta, y en los últimos días se ha impuesto una nuevo método: quitarle el turbante a los clérigos.

El modus operandi ya es viral en las redes sociales: un joven, chico o chica, se acerca por detrás a un clérigo y con la mano le da un golpe al turbante con el que se cubre la cabeza hasta que cae al suelo, muchas veces entre las risas de los presentes.

Y por supuesto se graba en vídeo para después compartirlo en Twitter, Instagram o Telegram, campos de batalla tan importantes como las calles del país.

Irán vive protestas desde la muerte el 16 de septiembre de la joven Mahsa Amini tras ser detenida tres días antes por la Policía de la moral por llevar mal puesto el velo islámico, unas movilizaciones en las que se pide el fin de la República Islámica.

Las protestas están protagonizadas sobre todo por jóvenes y mujeres al grito de "¡Mujer, vida, libertad!" que lanzan consignas contra el Gobierno y queman velos, uno de los símbolos de la República Islámica y algo impensable hasta hace poco tiempo.

También era impensable que los jóvenes les quitasen los turbantes a los religiosos, una forma de protestar que muestra el rechazo a los clérigos de la República Islámica fundada por el ayatolá Ruholá Jomeiní en 1979.

El mensaje, sin embargo, no parece llegar a las altas esferas iraníes, que continúan señalando a Estados Unidos como el culpable de las protestas y parecen cerradas en banda a la posibilidad de que el descontento de la población sea real.

Esa es la postura que defienden una y otra vez el líder supremo de Irán, Ali Jameneí, la máxima autoridad del país, y el presidente de Irán, Ebrahim Raisí, ambos clérigos.

Las protestas están siendo reprimidas fuertemente por las fuerzas de seguridad y según la ONG Iran Human Rights, con sede en Oslo, al menos 108 personas han muerto y unas 12.000 han sido detenidas.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.

  • L
    Lenora

    ¡Qué valientes! ojalá puedan llegar a derrocar a un régimen tan represivo y (esos sí que sí) y tan asque.rosamente machista. Irene Montero, aprende un poco lo que es luchar de verdad por las libertades de todos, especialmente de las mujeres. Pero qué estoy diciendo, qué va a aprender semejante fu.la.na, creo que estoy desvariando.