Navalni, el último resquicio de la esperanza rusa: la resistencia democrática estalla por su "héroe"

Terremoto en Rusia a un mes de que se celebren las elecciones Presidenciales, que tendrán lugar el próximo 17 de marzo, si bien Putin es el candidato indiscutible. Este viernes ha fallecido de forma abrupta en prisión el principal oponente al régimen totalitario de Putin, Alekséi Navalni, que estaba encarcelado desde 2021 tras su regreso a Moscú. Previamente había estado recuperándose en Alemania por haber sido envenenado. Recientemente había sido trasladado de cárcel a Siberia. Navalni era el principal rostro de la oposición y héroe de los rusos prodemócratas, especialmente jóvenes, desde que encabezó las protestas en 2017 en contra de la "corrupción" política en el país. Muchos de los jóvenes que partieron con él en ese momento, ahora exiliados en países como Georgia y que conforman el movimiento democrático "Vesna", explican a Vozpópuli el impacto de su muerte, que es un aparente asesinato.

"Acabamos de recibir la noticia del Gobierno, sin embargo, aún no ha habido confirmación oficial del equipo de Navalni, así que estamos esperando. En caso de que esta información lo confirme, es dolorosamente obvio que Alexei fue asesinado directamente o murió a causa de las consecuencias de la tortura. Todos estamos en shock y con incredulidad en este momento. La verdad es que nadie sabe cuál es el plan de Putin y si está relacionado con las Presidenciales de marzo o con otras cosas que puedan suceder en un futuro próximo, ya que la información es muy limitada por el momento. Una cosa que puedo decir con seguridad es que Alexei Navalni fue (y esperemos que siga siendo) un héroe y que la forma en que fue tratado por el régimen es un crimen abominable", explican.

A lo largo del día de hoy han empezado las manifestaciones en homenaje al político disidente del régimen de Putin. Algunos rusos han llevado flores, desafiando a las autoridades, a los monumentos de víctimas de represión política. En algunos casos se han dado escenas de tensión con policías acordonando dichos monumentos. En países de todo el mundo hay decenas de personas llevando carteles, fotos y flores a las embajadas rusas para rendir homenaje a Navalni.

La información sobre su muerte sigue siendo contradictoria. El Servicio Penitenciario Federal ha explicado que Navalni murió en la zona aislada de Kharp, en Yamal-Nenets, sin embargo sus abogados aún no han confirmado la noticia. Su abogada ha expresado que le visitó el pasado 14 de febrero y que se encontraba bien. Según la información del Servicio Penitenciario, el opositor enfermó durante un paseo y se llamó a una ambulancia, cuando llegaron los médicos no pudieron hacer nada por su vida. Según informa el medio oficial RT, la causa de la muerte habría sido un coágulo de sangre. El jueves, el líder encarcelado había participado en audiencias ante el tribunal de Kvrovsky y también se conectó por videoconferencia a dos audiencias del Tribunal Regional.

Opositores al Kremlin como el exoligarca Mijaíl Jodorkovsky ya están pidiendo a la población que acuda a las Presidenciales y pongan en la papeleta el nombre de Navalni. Activistas rusos a favor de los derechos humanos, deportistas y referentes de la cultura ya están apuntando a una muerte injusta y dictaminada por Putin. La activista Eva Merkacheva ha explicado que la muerte de Navalni podría deberse al hecho de que fue enviado a una celda de castigo hasta 27 veces durante su encarcelamiento.

Reacciones de la UE

La presidenta de la Comisión Europea ha afirmado que se encuentra "profundamente consternad y entristecida por la noticia de la muerte de Alexéi Navalni. Putin no teme más que la disidencia de su propio pueblo. Un sombrío recordatorio de lo que son Putin y su régimen. Unámonos en la lucha por la libertad y la seguridad de quienes se atreven a oponerse a la autocracia”. Por su parte, el presidente de Alemania Olaf Scholz ha expresado que se trata de una muerte "terrible" y que es "una señal de cómo Rusia ha cambiado".

“Aún no hay una confirmación definitiva, pero partimos del hecho de que es muy probable que Navalni haya muerto en una prisión rusa. Esto es muy deprimente para nosotros. Lo conocí en Berlín cuando estaba siendo tratado en Alemania por las consecuencias de un envenenamiento y hablé con él sobre la valentía que requería su decisión de regresar a Rusia. Ahora lo pagó con su vida. Sabemos muy bien qué tipo de régimen es este. Cualquiera que critique, que defienda la democracia, debería temer por su vida y su seguridad. Entonces estamos en shock. Nuestros pensamientos están con su esposa, sus hijos, sus amigos, sus seguidores. Eso es simplemente terrible. Y ésta es una señal de cómo ha cambiado Rusia. Lamentablemente, este proceso comenzó hace mucho tiempo, hace tiempo que se alejó de la democracia, ya no es democracia”.