Publicado: 05/09/2022 11:10
Desde principios del siglo XX, existe un vínculo especial entre la ciudad de Barcelona y la Maison Cartier; concretamente desde que su fundador, Louis Cartier participó en la Exposición Internacional de 1929 exhibiendo un asombroso collar realizado con diamantes pertenecientes al Aga Khan. En 1996, la Maison abrió su primera boutique en la Ciudad Condal y en 2014, se trasladó a su actual emplazamiento situado en el número 82 del Paseo de Gracia. Tras meses de obras de renovación, esta emblemática localización reabre sus puertas exhibiendo un concepto de boutique que rinde homenaje a la cultura de la ciudad a través de un diálogo entre los artesanos locales y el ADN de la Maison. Cuenta con 450 metros cuadrados en una sola planta, integrando espacios con claras referencias al estilo modernista de Gaudí y el espíritu cosmopolita de Barcelona.
La nueva fachada acristalada inunda la estancia de luz natural y su interior lo protagonizan formas orgánicas y geométricas, una paleta de colores pastel, así como elegantes vidrieras y mosaicos inspirados en la naturaleza y en el universo de Gaudí. La boutique cuenta con un jardín interior de estética mediterránea que incluye una cúpula con vidriera inspirada en los invernaderos del parque de la Ciutadella y en la arquitectura del Palau de la Música. Estas vidrieras han sido creadas por el artesano barcelonés de adopción, Jorge Aragone, que ha participado en la restauración de importantes edificios modernistas en Barcelona como la Casa Batlló y la Casa Lleó i Morera. Cartier ha trabajado con colaboradores locales para la concepción del diseño de esta nueva boutique como el estudio de arquitectura G4 Group.
La artista del mosaico Lívia Garreta ha sido la encargada de crear los suelos de la boutique. Experta en restauraciones y creaciones de mosaicos artísticos, ha participado en la recuperación de importantes edificios modernistas de la ciudad como el Mercat de la Boquería o el Hospital de Sant Pau. Para el pavimento ha utilizado diferentes materiales y técnicas tradicionales como el vidrio y el trencadís, con el fin de iluminar las diferentes estancias de la tienda, a través de varias tonalidades de piedras dispuestas en formas onduladas que hacen referencia a la fluidez del mar. La nueva boutique alberga las colecciones de joyería, relojería y accesorios de la Maison, entre ellas, Love, Trinity, Juste un Clou, Ballon Bleu, Tank o Panthère de Cartier.
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