Sánchez ‘aparca’ el Falcon en campaña: sólo 5 viajes del Gobierno para evitar el desgaste electoral

El Falcon se ha convertido en uno de los argumentarios de la presente campaña electoral, hasta el punto de que el Partido Popular ha instalado una ‘réplica’ en Madrid de libre acceso para criticar el uso de Pedro Sánchez de las aeronaves VIP del Estado: la oposición ha reprochado en numerosas ocasiones al presidente del Gobierno lo que considera un empleo “abusivo” de estos medios militares. Por eso, el Ejecutivo ha reducido al mínimo este recurso en campaña electoral, lejos de aquellas escenas en las que Sánchez lo utilizaba para asistir a mítines del PSOE. Una maniobra destinada a evitar un desgaste político en vísperas de los comicios del próximo domingo.

La estrategia contrasta con las de anteriores llamadas a las urnas, especialmente en el ámbito municipal y autonómico. Sonadas fueron las intervenciones de Pedro Sánchez en mítines del PSOE en diferentes localidades españolas, a las que se desplazó a bordo de los Falcon del Ejército del Aire. Para justificar estos traslados, Moncloa ajustó actos de segundo nivel –visitas a empresas o a organismos públicos- a los que Sánchez acudía en calidad de presidente del Gobierno en las mismas localidades en las que se celebraban los actos políticos. Todavía fue más polémico cuando viajó en Falcon a Barcelona para acudir a un concierto de Serrat.

Y ahora, en vísperas de las próximas elecciones generales, la decisión tomada por el entorno de Sánchez es diametralmente opuesta: evitar en la medida de lo posible el uso de los cinco Falcon de los que dispone el Estado. No en vano, uno de los eslóganes empleados por el Partido Popular afirma que “es el momento de bajar a Pedro del Falcon”. Así, el equipo que asesora al candidato socialista opta por evitar su imagen a bordo de estos aviones militares.

Los vuelos de los Falcon

Las aplicaciones de rastreo de vuelo reflejan los últimos vuelos efectuados por los Falcon. Desde que comenzó la campaña electoral, el pasado 7 de julio, estas aeronaves militares apenas han despegado 11 ocasiones al servicio del Gobierno, incluyendo trayectos de ida y vuelta, correspondientes a cinco viajes, según los datos recogidos por la plataforma Falcon Despega.

Cada uno de los aviones atiende a un código alfanumérico dentro de su denominación interna del Ejército del Aire, desde el T.18-1 hasta el T.18-5. Así, el T.18-1 y el T.18-2 no han registrado ninguna actividad al servicio del Gobierno en la presente campaña electoral. Sí que lo ha hecho el T.18-3, con un vuelo desde Madrid hasta Cataluña y, desde ahí, a Bruselas; dos trayectos que tuvieron lugar el 16 de julio. Con el desplazamiento de vuelta desde Bélgica –dos días después, el 18 de julio-, suma tres vuelos a disposición del Ejecutivo, correspondientes a un solo viaje.

Por su parte, el T.18-4 ha volado desde Madrid hasta Bruselas, ida y vuelta, los días 13 y 14 de julio. También se registra un desplazamiento de ida y vuelta a Canarias en una única jornada, el 17 de julio –la ministra Margarita Robles se trasladó a las islas para visitas a instalaciones militares-. Dos viajes en campaña.

Miembros del Gobierno también se han desplazado a Bélgica a bordo del T.18-5, con trayecto de ida y vuelta el 13 de julio. Este avión Falcon fue igualmente elegido para trasladar a mandatarios del Ejecutivo y de la Casa Real al Reino Unido el pasado 16 de julio, coincidiendo con la final de tenis de Wimbledon en la que el español Carlos Alcaraz se proclamó campeón ante Novak Djokovic. Otros dos viajes en el mismo periodo de tiempo.

En total, once desplazamientos a bordo de tres de los cinco Falcon del Estado durante la campaña electoral, atendiendo a cinco viajes diferentes. Ninguno de ellos relacionados en esta ocasión con mítines electorales. El resto de maniobras de estas aeronaves militares desde el pasado 7 de julio corresponden al traslado de autoridades militares o a vuelos de mantenimiento.

Operado por el 45 Grupo de Fuerzas Aéreas del Ejército del Aire y del Espacio, estos aviones, con una autonomía de vuelo de ocho horas e incorporados a su flota desde 1988, tiene como misión principal el traslado de autoridades VIP y de ayuda humanitaria: “Es utilizado principalmente para vuelos transoceánicos”, detalla el Ejército del Aire en su página web oficial.