El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, mantiene invariada la postura de España respecto al respaldo económico a la entidad de la ONU bajo sospecha por haber colaborado con Hamás en los ataques contra Israel del pasado 7 de octubre. De hecho, ha anunciado que el Gobierno aportará 3,5 millones de euros a la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) para que pueda mantener sus actividades a corto plazo tras la retirada de financiación por varios países donantes.
Ante la Comisión de Cooperación Internacional del Congreso de los Diputados, Albares ha insistido en que se trata de una "organización indispensable" (de hecho, España ha efectuado amplias aportaciones al organismo) y por ello el Gobierno movilizará una partida urgente de 3,5 millones de euros, de la que ya informó el viernes al comisario general de la UNRWA, Philippe Lazzarini.
El ministro ha incidido en la "situación desesperada" que hay en Gaza y ha alertado del riesgo de que "en pocas semanas" se tengan que paralizar las actividades de UNRWA ante la falta de fondos, al tiempo que ha resaltado que esta agencia de la ONU apoya a 6 millones de refugiados palestinos, de los tres de cada cuatro están fuera de Palestina.
Su "trabajo es más necesario que nunca"
Así las cosas, ha pedido a los diputados de todos los partidos políticos que durante el debate previsto respalden "un gran acuerdo para apoyar a UNRWA" cuyo trabajo, ha defendido, "es más necesario que nunca".
Igualmente, ha reconocido preocupación por las alegaciones de una docena de trabajadores de esta agencia participaron en los ataques de Hamás contra Israel del pasado 7 de octubre y ha destacado que tanto la UNRWA como la ONU hayan iniciado de forma inmediata una investigación.
Desde que trascendió la implicación de miembros de la UNRWA en los ataques de Hamás, han sido numerosos los países que cortado el grifo de la financiación al organismo, entre ellos Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Italia y Alemania.
