Macarena Olona abandonó Vox hace ya siete meses, pero sus comentarios personales a través de las redes sociales no dejan de armar revuelo. Sobre todo, entre sus antiguos simpatizantes y compañeros de filas. Mientras el que fuera su partido ha solicitado al Juzgado de Instrucción número cuatro de Santa Cruz de Tenerife que decrete la prisión provisional para el exdiputado del PSOE Juan Bernardo Fuentes Curbero -conocido popularmente como 'tito Berni'- por el conocido como caso Mediador, la abogada del Estado parece llamar a la calma. Al menos en lo que afecta al resto de parlamentarios que compartieron cenas con este último. Un posicionamiento que se alinea más con el adoptado por Ferraz. Por otro lado, sus últimos 'dardos' a Ferrovial, constructora que ha decidido trasladar su sede a Países Bajos, coinciden directamente con los de Ione Belarra y otros dirigentes de Unidas Podemos, algo que ha despertado numerosas críticas hacia la alta funcionaria.
En declaraciones a Vozpópuli, esta última defiende que "es muy fácil utilizar políticamente el dolor y la rabia de los españoles con un escándalo que mezcla diputados, cocaína, prostitutas y presunto dinero público". "Eso afecta al 'tito Berni', que ya no está en el Congreso de los Diputados. Lo inmoral, para mí, es que se ha mezclado públicamente ese escándalo con otros diputados que, hasta la fecha, sólo consta que habrían cenado con el intermediario. Y les llaman también puteros y cocainómanos. Y les queman en la hoguera pública", denuncia la exdiputada por Granada.
Olona denuncia una "cacería pública"
"Yo exijo y demuestro ejemplaridad pública, pero siempre intento actuar con justicia. Y es injusto, sea el partido que sea, que se haga esa cacería pública sin pruebas y negando los afectados su implicación más allá de una cena", sostiene. Y añade que ni siquiera tiene que preguntar a algunos de sus ex compañeros dirigentes para saber que comparten su misma opinión: "La diferencia es que yo ahora soy libre y no tengo que pensar en cálculos electorales cada vez que expreso mi opinión".
Además, Olona invita a todos los diputados a contar dónde cenaron la noche de la moción de censura celebrada en octubre de 2020, cuando Madrid estaba en estado de alarma: "Que cuenten todos los diputados, del resto de partidos, si cenaron en sus casas al acabar la moción. Yo si cené en mi casa. No incumplí ninguna limitación que se había impuesto a los españoles durante los estados de alarma. Que contesten el resto donde estaban esa noche de octubre de 2020 cenando".
Que cuenten todos los diputados, del resto de partidos, si cenaron en sus casas al acabar la moción. Yo si cené en mi casa"
La ex secretaria general del Grupo Parlamentario Vox en el Congreso no ha dudado en apoyar los distintos mensajes publicados en las últimas horas por parte de varios diputados socialistas a los que se ha relacionado con las prácticas del 'tito Berni' y que defienden su inocencia.
Precisamente, fuentes socialistas ya han asegurado que, ante las informaciones aparecidas en diferentes soportes en las que se señalan a algunos de sus diputados y diputadas, el Grupo Parlamentario Socialista está ya asistiéndoles en los procedimientos judiciales que cada uno de ellos están iniciando en estos momentos "contra quienes les vinculan con hechos que en absoluto se han producido".
"Patriotismo de bolsillo" de Ferrovial
Sin embargo, su 'capote' a los parlamentarios socialistas no ha sido lo único que ha despertado inquietud entre algunos de sus antiguos seguidores. También lo han hecho sus críticas a Ferrovial y a su presidente. "Del Pino, presidente de Ferrovial, es la tercera mayor fortuna de España. Gracias a las obras públicas pagadas con los impuestos de los españoles. Su cuenta de resultados no le parece suficiente. Y decide abandonar España para pagar menos impuestos. Patriotismo de bolsillo", ha lanzado Olona en la misma línea que algunos dirigentes de Unidas Podemos como Ione Belarra.
No obstante, con respecto a la llamada a boicotear a Ferrovial sin contratos públicos realizada por el portavoz de la formación morada en el Congreso, Pablo Echenique, Olona lo tiene claro: "Es ilegal". "Esa medida es ilegal. No ya solo por nuestro derecho interno, sino porque es una limitación a las libertades de circulación que impone la Unión Europea. Que Ferrovial se marche es legal. Pero es patriotismo de bandera. Y merece reproche social", zanja.