La revelación de cientos de documentos internos del Ministerio de Defensa o del CNI, entre otros, por parte del extitular de este departamento, José Bono, ha suscitado sospechas en el Congreso de los Diputados, desde donde se exigen explicaciones al Gobierno de Pedro Sánchez sobre los filtros en torno a estos archivos y las razones que sustentan su publicación en la hemeroteca de la Fundación Pablo Iglesias, vinculada al PSOE. Entre ellos figuran papeles relacionados con el accidente del Yak-42, el 11-M o la retirada de las tropas de Irak tras la victoria electoral de José Luis Rodríguez Zapatero.
La ofensiva parlamentaria llega desde filas del Partido Popular. Los diputados Rafael Hernando y Carlos Rojas han registrado hasta siete iniciativas en el Congreso de los Diputados con preguntas dirigidas al Gobierno sobre la publicación de los documentos internos a los que tuvo acceso José Bono durante su dirección al frente del Ministerio de Defensa, así como de otras cuestiones políticas nacionales.
Entre esos asuntos, como adelantó Vozpópuli, está la publicación de informes militares relacionados con la tragedia del Yak-42, en la que murieron 62 militares españoles al regresar a España desde Afganistán. Estos documentos habían generado una polémica anterior, cuando María Dolores de Cospedal, tras llegar al Ministerio de Defensa, exigió a José Bono que informase de qué documentos poseía en su archivo personal.
Las cartas en poder de José Bono
Bono, ministro de Defensa con José Luis Rodríguez Zapatero entre 2004 y 2006, también publicó cartas del entonces Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el general Félix Sanz Roldán, a la postre director del CNI, relacionadas con la posible permeabilidad de las Fuerzas Armadas ante discursos como el del teniente general José Mena en la Pascua de 2006, en plena negociación por el Estatuto de Cataluña, cuando éste recordó que los militares tenían la obligación de garantizar la unidad e integridad de España.
Asimismo, José Bono cedió a la Fundación Pablo Iglesias las tensas misivas que se intercambiaron José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero, tras la reciente victoria electoral del líder socialista, sobre la retirada de las tropas españolas de Irak. También entregó documentos internos del CNI relacionados con las pesquisas del 11-M, en las que se recogían los recelos de los servicios de inteligencia españoles en torno a las actuaciones de la Guardia Civil y de la Policía Nacional.
El PP exige ahora explicaciones no sólo sobre cómo terminaron todos estos documentos en el archivo personal de José Bono; también sobre los posibles filtros aplicados en su posterior cesión a la hemeroteca de la Fundación Pablo Iglesias, que rinde homenaje al fundador del PSOE y de la Unión General de Trabajadores (UGT).
Según la información facilitada desde la propia fundación, la exministra socialista María Luisa Carcedo preside su patronato, con Francisco Martín Aguirre -actual delegado del Gobierno de Madrid- como secretario. Otros dirigentes socialistas o sindicalistas figuran en la lista de patronos de la fundación: Félix Bolaños, Carmen Calvo, Santos Cerdán, Beatriz Corredor, Hana Jalloul, César Luena, Reyes Maroto, María Jesús Montero, Rafael Simancas, Cándido Méndez, Cristina Narbona, José Félix Tezanos e incluso el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Las iniciativas parlamentarias
Los diputados del PP aseveran en su iniciativa parlamentaria que el exministro de Defensa José Bono “donó en enero de 2022” a la Fundación Pablo Iglesias “decenas de miles de documentos que habría obtenido en virtud de los distintos cargos públicos que habría ostentado”: “Gran parte de esa documentación conocida por él mismo y entregada a la fundación sería materia reservada o clasificada”.
En este sentido, el PP interpela al Gobierno si “es conocedor de la documentación escaneada por el ministro José Bono en su etapa como ministro de Defensa” y si, en caso afirmativo, “puede concretarla”. También pregunta si puede detallar los “informes del CNI” que han sido “donados” por el exministro de Defensa a la Fundación Pablo Iglesias.
“¿Cuál era el sistema y grado de protección de esa información”, preguntan los diputados populares. “¿Qué medidas piensa adoptar el gobierno para recuperar esa información que en algún caso debería ser clasificada como secreta, o confidencial?”. Otra iniciativa parlamentaria se centra en “si el exministro sustrajo algún tipo de documento clasificado o reservado y que aún obre en su poder”.
Por último, requieren información al Gobierno sobre si existe algún acuerdo en el Consejo de Ministros “en el que se haya procedido a desclasificar los documentos sustraídos por el Sr. Bono del Ministerio de Defensa”: “¿Cómo es posible que el exministro de Defensa posea copias de las cartas de dos expresidentes del Gobierno?”, interrogan, en relación con las misivas que se intercambiaron Aznar y Zapatero. “¿Tuvo permiso de esos presidentes para acceder y dar publicidad a las mismas?”.
