Nuevo frente para Marlaska: las peticiones de asilo se duplican en 2023 y Barajas se acerca al límite

Hacinados en colchones instalados en el suelo, sin las más mínimas condiciones de salubridad, higiene e intimidad y con escasez de comida, así viven alrededor de 250 solicitantes de protección internacional en el Aeropuerto de Barajas. El incremento exponencial de solicitudes de asilo registradas en los últimos meses ha provocado una situación de sobreocupación en las terminales T1 y T4 de Madrid.

Según un informe policial presentado ante el Juzgado de Instrucción Número 1 de Madrid, la incapacidad del Ministerio de Interior de agilizar el proceso de admisión o inadmisión de este tipo de solicitudes ha propiciado que las salas dedicadas a los solicitantes de protección internacional se hayan convertido en estancias incapaces de albergar, de manera eficaz, a decenas de inmigrantes que esperan entrar en España.

La Jefatura Superior de la Policía de Madrid señala en su último informe que han tenido que habilitarse las salas dedicadas a los inadmitidos para hacer frente a una oleada que les ha dejado sin medios y sin capacidad de actuación. El texto remitido al juzgado detalla que "el incremento de solicitudes en frontera ha sido exponencial, pasando de 767 peticionarios de asilo en el año 2022 a 1.357 en el año 2023 (periodo agosto-noviembre)".

En tan solo cuatro meses las cifras casi duplican a las registradas en todo el año anterior, lo que supone un reto para la Policía que trabaja en el Puesto Fronterizo del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid y que necesita "medidas urgentes" del Ministerio del Interior y de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras. Este viernes, los Juzgados de Instrucción Número 20, 19 y 20 han acordado solicitar al Ministerio "cuantas medidas resulten precisas" para poner fin a esta situación a fin de salvaguardar derechos estas personas, entre los que se encuentran 19 menores de edad y "familias cuya intimidad se está viendo vulnerada".

La respuesta unánime de los magistrados llega como respuesta a una queja emitida por la coordinadora Estatal del Servicio Jurídico CEAR. Tras la visita girada a la sala de inadmitidos del aeropuerto de Madrid por los jueces de control, "ha quedado constatado el estado de hacinamiento existente en las Terminales T1 y T4 del mismo y el uso indebido" de dichas instalaciones.

El informe de la fuerza policial de frontera detalla que, en estos momentos, en la Terminal 1 conviven 166 solicitantes de asilo, 17 de ellos menores de edad y 3 inadmitidos, mientras que la capacidad de las salas habilitadas es para 44 personas en la sala de asilo y de 28 personas en la de inadmitidos. En la Terminal 4 la situación no es mucho mejor, existen 75 solicitantes de asilo, entre ellos dos menores, cuando la capacidad de las estancias es para 34 personas en la primera sale y 50 personas en la de inadmitidos.

El CEP pide "medidas urgentes" en Barajas

Esta misma semana, la Confederación Española de Policía (CEP) ha trasladado lo complicado de esta situación límite al Ministerio de Fernando Grande-Marlaska con la esperanza de que se les faciliten medios para este supuesto. Advierten que el 60% de las peticiones viene de personas con documentación keniata lo que les hace sospechar que detrás hay una organización criminal que se dedica a la trata de personas.

Según detallan desde el sindicato, los viajeros se acogen a la figura jurídica prevista para quienes sufren "persecución por motivos de raza, religión, nacionalidad, género u orientación sexual", entre otros motivos. Los agentes de la Policía Nacional destinados en el Puesto Fronterizo tienen una doble labor; por un lado, realizar entrevistas previstas en la norma para estas solicitudes y, por otro, tareas relacionadas con la custodia de esas salas.

El CEP propone que AENA habilite espacios adicionales en las T1 y T4 del aeropuerto de Barajas para ayudar en las gestiones de los agentes con las debidas garantías. Y, de este modo, evitar contagios de enfermedades o insectos, frenar incidentes de orden público y dignificar las condiciones en las que se aloja a esos solicitantes.