Tragedia en Collado Villalba: las menores perdieron el autobús y llamaron a la hermana para que las buscara

Poco a poco se van conociendo más detalles en torno al trágico accidente de tráfico de Collado Villalba en el que cuatro jóvenes perdieron la vida. Erika, la menor de 13 años, ocultó a sus padres que iba a ir a las fiestas y al perder el autobús llamaron a la hermana mayor de una de ellas, según informan a Vozpópuli fuentes de su entorno. El drama fue aún mayor. Precisamente, ese domingo era el cumpleaños de su padre, habían quedado para comer, y se enteraron de la muerte de la niña al dar el pésame a la familia de la conductora.

El dolor que ha experimentado en los últimos días el pueblo de Moralzarzal es comparable con la tragedia que se ha vivido tras la muerte de Polina (25 años), su hermana Leonor (15) y sus amigas Lila (16) y Erika (13). Todo arrancó la noche anterior cuando la menor de ellas ocultó a sus padres que iba a acudir a las fiestas de Collado Villalba.

Esta adolescente, de familia búlgara, dijo a su familia que se quedaba a dormir en casa de Lila. Con esta "chiquillada", según es calificado por fuentes de su entorno, intentaba ocultar que iba a estar una noche de fiesta en el pueblo cercano con sus amigas.

Perdieron el bus de vuelta a casa

El principal problema es que las menores se quedaron en Collado Villalba hasta las cinco de la mañana y perdieron el autobús. Por ello, Leo decidió ponerse en contacto con su hermana Polina para que las fuera a buscar ya que sabía que era su hora de salir del pub 'Arya' del cual era copropietaria junto a su novio.

Las circunstancias provocaron que Pio bajara en un coche y su hermano en otro vehículo. Las tres menores subieron en el Toyota de la joven y se encaminaron a volver a casa. Minutos después una distracción al volante fue el detonante del accidente de tráfico en el que murieron estas cuatro chicas. El hermano vio todo el suceso y casi fue atropellado por los coches después del siniestro.

"¿No sabes que tu hija iba en el coche?"

La Guardia Civil de Tráfico que se encarga de la investigación del suceso pudo identificar rápidamente a las dos hermanas. Fue precisamente el hermano el que comunicó a su familia el fatal desenlace. Cuando la noticia corrió por Moralzarzal la madre de Erika se puso en contacto con la de Polina y Leo. Pensaba que su hija estaba durmiendo en casa de Lila y por eso no respondía a sus llamadas. "Pero tú no sabes que tu hija iba en el coche", fue la contestación de Tania.

Todas las víctimas eran "archiconocidas" en Moralzarzal. Formaban un grupo de amigas que eran "alegres" y nunca ocasionaron problemas. "Polina era muy responsable", recuerda una de estas chicas. De ahí que fuera a buscar a su hermana menor a las fiestas de Collado Villalba.

Este martes Piolina cumplía años

El trágico suceso dejó otros daños colaterales. El día del accidente era el cumpleaños del padre de Érika. Había quedado toda la familia, que es búlgara, para comer. Este martes era el cumpleaños de Piolina, la conductora de 25 años. La familia tiene previsto enterrar ese día su cuerpo con el de su hermana. También se celebrará una misa por Erika en Moralzarzal. En cambio los allegados de Lila, que era de origen francés, la enterrarán en Extremadura.

La Guardia Civil investiga si las cuatro víctimas mortales tenían puesto el cinturón de seguridad en el momento del accidente. Todo parece indicar que así era pero realizan las pesquisas para confirmarlo con pruebas.

El trabajo de los investigadores ahora consiste en reconstruir qué sucedió en el lugar e incluir las pruebas forenses. En esas analíticas también se podrá saber si Polina, la joven que conducía, había ingerido alcohol, aunque esa hipótesis pierde fuerza. Los agentes de Tráfico también tendrán que concretar en sus pesquisas a qué velocidad circulaba el vehículo implicado abandonando Collado Villalba. Una de las vías de investigación que se contempla es que se iniciara una discusión antes del siniestro.

La guardia tiene una vértebra rota

El lugar donde ocurrió el siniestro a las cinco y media de la mañana del domingo es el kilómetro 38 de la M-608. Es una pequeña curva con una rasante. Según informaron fuentes de la investigación a EFE, el turismo se salió de la calzada por el margen derecho. Tras perder el control del coche realizó dos o tres maniobras bruscas y ha terminado por invadir el sentido contrario e impactar contra el otro vehículo donde viajaba la agente de la Guardia Civil de Collado Villalba.

Las cuatro jóvenes murieron prácticamente en el acto. La agente de Seguridad Ciudadana, de 30 años, tiene fractura de cadera, y fue trasladada con pronóstico grave al Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda. En el momento del suceso se dirigía a su trabajo ya que entraba a las seis de la mañana en el Puesto de Collado Villalba. Por el momento, los médicos no pueden operar a la agente porque tiene una vértebra inflamada. Mientras, este martes Moralzarzal rendirá tributo a tres de las víctimas de este accidente que ha conmocionado a toda la población de este municipio de más de 12.000 habitantes.