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COMUNIDAD DE MADRID

La izquierda se moviliza por la sanidad con Ayuso como objetivo político

Miles de personas han participado en la marcha para reclamar mejoras en la Atención Primaria madrileña y para criticar la gestión del Ejecutivo regional. Rita Maestre, Íñigo Errejón, Mónica García y Pablo Iglesias, entre los políticos que han secundado la movilización

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Miles de personas marchan durante una manifestación contra el desmantelamiento de la Atención Primaria. EFE.

Miles de personas han protestado este domingo en Madrid contra la gestión de la sanidad pública por parte del Gobierno regional de Isabel Díaz Ayuso en una manifestación multitudinaria impulsada por asociaciones vecinales y azuzada por la izquierda política madrileña y sindicatos. El objetivo inicial de la convocatoria era clamar contra la "destrucción de la Atención Primaria madrileña" en la Comunidad, pero los apoyos políticos, sindicales y sociales recibidos han convertido la marcha en una 'macroprotesta' contra la política sanitaria general de la presidenta popular.

La marcha ha arrancado a las 12 horas en las calles de la capital. A esa hora, cuatro columnas de ciudadanos han avanzado desde diferentes puntos de la ciudad hasta Cibeles, donde han formado una gran movilización. En concreto, los participantes han partido desde Nuevos Ministerios (zona norte), Hospital de la Princesa (zona este), Atocha (zona sur) y Ópera (zona oeste). Bajo el lema 'Madrid se levanta por la sanidad pública', los manifestantes han recorrido las calles coreando consignas y portando pancartas o carteles contra la gestión sanitaria del Ejecutivo regional. Figuras como el cineasta Pedro Almodóvar o el actor Dani Rovira también han secundado la marcha. Según la Delegación del Gobierno en Madrid, a la manifestación han asistido cerca de 200.000 personas, aunque los organizadores han elevado esta cifra hasta las 670.000 personas.

Los manifestantes han acusado a la Comunidad de Madrid de implantar una "caótica desorganización de las urgencias de Atención Primaria", el primer nivel asistencial de la sanidad madrileña. Según han argumentado, los "recortes en la financiación y disminución de profesionales, muy especialmente en la Atención Primaria y Salud Pública", han engrosado las listas de espera en consultas, pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas.

La marcha, impulsada por la izquierda

En los últimos años, la Mesa en Defensa de la Sanidad Pública de Madrid, la conocida como Marea Blanca, ha estado detrás de una multitud de movilizaciones en defensa de la sanidad pública y contra la externalización de la gestión sanitaria de varios hospitales. Este tipo de marchas se popularizaron, sobre todo, en 2011 en Cataluña y cobraron fuerza en la Comunidad de Madrid en 2012. Sin embargo, la marcha multitudinaria de este domingo fue convocada inicialmente por la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) y con el paso de los días se fueron sumando sindicatos y partidos políticos, como Más Madrid y Unidas Podemos.

De izquierda a derecha: José Julio Rodríguez (exJEMAD), Ione Belarra (secretaria general de Podemos), el consejero estatal del partido, Roberto Sotomayor o Pablo Iglesias protagonizaron la delegación morada. Podemos

Los portavoces de Más Madrid en la Asamblea, Mónica García, y en el Ayuntamiento, Rita Maestre, han sido algunas de las figuras políticas que se han sumado a la marcha para protestar contra el "desmantelamiento" de la Atención Primaria y las Urgencias. También ha acudido el líder nacional de este partido, Íñigo Errejón. Del lado de Podemos, han asistido la secretaria general y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra; el diputado de Podemos en la Asamblea de Madrid, Serigne Mbaye Diouf, y el consejero estatal del partido, Roberto Sotomayor. El exlíder de Podemos Pablo Iglesias también se ha sumado a la protesta.

Huelga convocada para la Atención Primaria

Esta manifestación se ha celebrado en un contexto marcado por la huelga para los servicios de Atención Primaria, que comenzará el día 21 y que atañe a más de 4.200 médicos de Familia y 720 pediatras de atención primaria. Otro frente abierto de la atención primaria es el ruido mediático que está generando la reapertura de los Servicios de Urgencias SUAP, que habían permanecido cerrados desde la pandemia.

El pasado 20 octubre, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid anunció la apertura de 80 Puntos de Atención Continuada (PAC), los centros que sustituyen y engloban a los SUAP y a los Servicios de Atención Rural (SARS) bajo una misma denominación. De este modo, se reabrían los 78 puntos de urgencias extrahospitalarias que había antes del inicio de la pandemia y se mantienen otros dos que ya están operativos, en El Molar y Alcalá de Henares, con el objetivo de ofrecer un servicio para los pacientes que funcionará durante todo el día con personal médico y de enfermería, tal y como exigían desde los sindicatos médicos.

Los sindicatos denunciaron desorganización en el nuevo modelo de urgencias de la Atención Primaria. La fecha fijada para la reapertura de estos centros fue el 27 de octubre y solo un día antes se empezó a reorganizar los equipos, algo que enfadó a las organizaciones sindicales, que solicitan ahora el cierre de los PAC "hasta que haya personal suficiente". La situación se complicó todavía más cuando el pasado 4 de noviembre la presión asistencial en la Comunidad de Madrid provocó una renuncia de varios profesionales de la Atención Primaria.

Más allá de Madrid: faltan médicos en toda España

Ante estos frentes, Isabel Díaz Ayuso defiende que, al igual que "faltan médicos" en Madrid, también faltan en "otras partes de España". Según se desprende de un estudio del Sindicato Médico Andaluz, titulado "Jubilación de médicos de Familia y MIR en SNS y CCAA", España pierde anualmente de media 812 médicos de Familia, la especialidad más afectada por la falta de profesionales. El motivo, según este análisis, es "el gran número de médicos que se están jubilando" y que "los que terminan el MIR no son suficientes para reponer tanta jubilación".

Por su parte, el portavoz de la Asamblea de Madrid, Pedro Muñoz Abrines, ha considerado la convocatoria como un "fracaso de asistencia" justificado por los convocantes mediante "un boicot de RENFE, para acudir a la manifestación desde pueblos" para después remarcar que "RENFE la gestiona Sánchez, el PSOE y Podemos, pero la culpa de Ayuso".

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