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España

El Gobierno gastó 1.350 millones menos de lo presupuestado en Sanidad y Educación

Los datos de ejecución presupuestaria muestran que el Gobierno de Pedro Sánchez dejó sin utilizar 420 millones para Sanidad y 900 millones para Educación en 2022

El Gobierno gasta 1.350 millones menos de lo presupuestado en Sanidad y Educación / Europa Press.

El Gobierno gasta menos de lo que promete en Sanidad y Educación. En 2022, 1.350 millones de euros presupuestados para estas dos materias se quedaron en el negro sobre blanco. La Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) señala con claridad en sus informes que más del 10% del presupuesto del que disponían los dos pilares de nuestro Estado del bienestar nunca llegaron a utilizarse. Es decir, una vez más queda demostrado que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) son una vaga promesa.

El pasado año, la Sanidad tenía presupuestados 4.037 millones de euros, de los que el Gobierno dejó de utilizar el 10,5%. Estamos hablando de un total de 423.511.000 euros. Con una cuarta parte (100 millones de euros) podrían pagarse los servicios para los pacientes de ELA (esclerosis lateral amiotrófica) que regula la ley para esta patología bloqueada por el PSOE en el Congreso por más de 400 días. Buena parte de esta infrautilización de recursos sanitarios se debe a la no movilización de cerca de 200 millones de euros de los Fondos REACT-UE.

De los 1.450 millones de euros que los fondos europeos habilitaban para gastar en productos farmacéuticos y material sanitario, se han terminado gastando 1.276 millones. Por tanto, prácticamente 200 millones de euros no se han utilizado en la compra de medicamentos y material para hospitales y centros de salud. El Plan Nacional sobre Drogas es otro de los grandes damnificados de la ejecución de gasto de Sánchez, pues ha utilizado 20 millones de euros menos de lo presupuestado el pasado año.

Donde el Gobierno tampoco ha gastado todo lo que prometió es en Salud Digital; 70 millones para transformación digital de los que no se ha gastado nada; 50 millones menos de lo presupuestado en proyectos tractores para la salud digital; y 4 millones de euros menos de lo prometido en digitalización de la salud según los informes del IGAE (casi un 20% menos de lo presupuestado en este último caso). Mientras tanto, España sigue sin contar con un historial clínico interoperable entre comunidades autónomas, y la receta electrónica interoperable entre la sanidad pública y privada sigue siendo una quimera pese a contar con el respaldo de buena parte del sector sanitario.

Casi 40 millones de euros destinados a Salud Pública, que resultó fundamental en la lucha contra la pandemia de coronavirus y para la que ahora se está trabajando en una Agencia de carácter estatal, se han quedado en el tintero. El Gobierno de Sánchez tampoco ha prestado demasiada atención a la partida destinada a mejorar las capacidades de respuesta frente a crisis sanitarias, ya que apenas se ha ejecutado el 5% de la misma (la que menos de todo el presupuesto sanitario): Esto significa que más de 11,5 millones de euros fijados para este fin se han quedado sin utilizar.

La lista continúa con partidas sanitarias en las que el Gobierno no ha invertido todo lo prometido como el plan de racionalización del consumo de fármacos (2 millones menos); acciones de prevención y promoción de la salud (4 millones menos); y políticas en Salud y Ordenación Profesional (2 millones menos).

Educación: casi 1.000 millones menos de lo prometido

Pero la guinda se la lleva Educación, donde la cifra de incumplimiento de gasto comprometido es de casi 1.000 millones de euros. Más concretamente, son 933 millones de euros los que ha dejado sin ejecutar el Ministerio de Pilar Alegría. De los 607 millones que el Gobierno prometió conceder a la Educación Secundaria, la Formación Profesional y las Escuelas Oficiales de Idomas (EOI), solo se han ejecutado 168 millones, apenas el 27 por ciento. Esto significa que el Gobierno solo concede a esta materia uno de cada cuatro euros prometido.

Otra de las áreas damnificadas económicamente por la gestión de Alegría es el llamado reskilling upskilling (formación extra para personas ya formadas) que cuenta con el apoyo financiero de la UE. En este caso, el Gobierno se ha dejado en el bolsillo cerca de 200 millones de euros.

En la transformación digital de la educación y de la formación profesional, el Ministerio de Pilar Alegría ha dejado sin utilizar 80 millones de euros. En la formación profesional para el empleo se han quedado sin invertir 120 millones que el Gobierno prometió. Y así hasta una larga lista de incumplimientos presupuestarios.

En el ámbito científico tienen incluso más motivos para estar cabreados, pues ha sido casi la mitad de presupuesto el que no se ha ejecutado. De los 2.000 millones prometidos para el fomento de la investigación científica, solo se han destinado 400 millones, o sea, el 20%. En investigación industrial se han gastado 700 millones, la mitad de lo prometido.

Pese a estos incumplimientos presupuestarios, el Gobierno de Pedro Sánchez sigue siendo el que más dinero ha gastado en la historia de España: 178.000 millones de euros. Una cifra que puede verse superada este año al encontrarnos en campaña electoral por partida triple (municipales, autonómicas y generales).

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  • Y
    Yomismo

    Es lógico: nos quieren muertos y analfabetos.