Quantcast

España

El Gobierno gasta 336 millones de euros en vacunas en 2023 pese a administrar solo 1,5 millones

El gasto equivale al triple de lo que costaría haber puesto en marcha la Ley ELA, bloqueada por el PSOE en el Congreso de los Diputados. Cada dosis administrada sale a más de 200 euros

José Miñones, ministro de Sanidad / Europa Press.

El Gobierno de Pedro Sánchez sigue gastando dinero en vacunas que no se pone nadie. En lo que llevamos de año, el Ministerio de Sanidad ha gastado más de 336 millones de euros en dosis contra la covid-19 pese a haber administrado solo 1,5 millones. Así se reflejan en los últimos datos de ejecución presupuestaria de los que dispone el Ministerio de Hacienda consultados por Vozpópuli. Se trata de una importante suma que triplica lo que habría costado poner en marcha la Ley ELA, bloqueada por el PSOE en el Congreso de los Diputados pese a que la esperanza de vida de estos pacientes es de cuatro años.

De acuerdo a los registros de que dispone la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), el Gobierno español ha gastado hasta la fecha 336.522.858 euros en vacunas para la covid-19. Esta importante suma no se corresponde con el número de dosis administradas. Según el Ministerio de Sanidad, en enero de 2023 la cifra de vacunas inyectadas era de 104,3 millones de dosis. A día de hoy, según datos del Ministerio de José Miñones, se han puesto un total de 105,8 millones. Por tanto, en todo 2023 se han inyectado 1,5 millones de vacunas pese a haber gastado 336 millones de euros.

Con estas cifras en la mano, el Gobierno ha pagado 224 euros por cada dosis administrada. Una inversión a todas luces poco rentable. Y es que la gran mayoría de vacunas compradas con este dinero duermen el sueño de los justos en los almacenes de Sanidad. Como adelantó este periódico, el Gobierno reconoció en junio que guarda en su almacén cerca de 30 millones de vacunas para la covid-19. Estas vacunas sin utilizar costaron 634 millones de euros al erario público, según estimaciones de este diario con los precios de cada fabricante.

Moncloa ya reconoció a principios de año que había destruido millones de vacunas covid caducadas a las que no habían conseguido dar salida. Como ya adelantó este periódico, el Ministerio de Sanidad ha destruido más de 6 millones de vacunas: más de 2 millones de Pfizer, otro tanto de Moderna, más de un millón de AstraZeneca y más de medio millón de Janssen, la vacuna fallida. En total, 93 millones de euros tirados a la basura, una cifra que será irrisoria cuando llegue el turno de las 30 millones de dosis que guarda en su stock el Gobierno de Pedro Sánchez y las que sigue comprando a día de hoy para que nadie se las ponga.

Más de 1.000 millones de presupuesto para vacunas en 2023

El Ministerio de Sanidad cuenta todavía con un remanente de 778 millones de euros para comprar vacunas según lo presupuestado para 2023. El Gobierno no ha gastado ni un 50% del presupuesto para vacunas, y no es de extrañar dada la marcha de la covid-19. Llama la atención que el dinero público para vacunas covid este año supere el de 2021, cuando la pandemia causaba estragos. Entonces se presupuestaron 1.000 millones de euros para la compra de dosis.

No podemos olvidar que este año el Ministerio de Sanidad ha dotado del doble de recursos a la compra de vacunas covid que a financiar la Atención Primaria, a la que se destinaron 607 millones de euros: 434 millones para infraestructuras y equipamientos en Atención Primaria y Comunitaria y 173 millones en concepto de desarrollo del Marco Estratégico. Los centros de Salud son el pilar que sostiene todo nuestro Sistema Nacional de Salud (SNS). Una buena Medicina de Familia impide que el paciente llegue al hospital, con el consiguiente gasto que supone para las arcas públicas además de las potenciales secuelas sanitarias.

Mientras que los centros de salud y ambulatorios se encuentran cada vez más saturados ante la falta de personal y el aumento de la demanda sanitaria por el envejecimiento de la población, el Ejecutivo sigue comprando dosis con un destino incierto.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.

  • Y
    Yomismo

    ¿No son las vacunas de HIPRA?

  • P
    PijoListo

    Rite Aid, un producto básico estadounidense, acaba de declararse en quiebra. Era la tercera cadena de farmacias más grande de Estados Unidos detrás de Walgreens y CVS. Citó demandas sobre opioides como la razón principal. Pero las circunstancias son prácticamente irrelevantes.
    En España, algunos farmacéuticos de quejan, otros compran y , después,no venden siguiendo los asustaviejas políticos. Otras se reconvierten en farmacias-parafarmacias. En EEUU las medicinas se venden en los supermercados y la pregunta es
    ¿ tienen las farmacias futuro?