Publicado: 29/11/2023 10:46
Actualizado: 29/11/2023 10:46
La mujer de 54 años cuya madre logró suspender su eutanasia a principios de noviembre, ha solicitado posponer de forma indefinida este procedimiento, según ha confirmado a 'Vozpópuli' la fundación Abogados Cristianos. Eso significa, según la asociación de juristas, que ha cambiado de opinión y ya no desea morir con asistencia médica, al menos de momento y mientras no reactive el proceso.
La paciente, residente en Santiago de Compostela junto a su madre, ha presentado un acta notarial ante la Consellería de Sanidad para suspender el procedimiento que le había sido concedido. Aunque la madre y Abogados Cristianos requirieron en el juzgado de guardia la adopción de medidas cautelarísimas para frenar la eutanasia, finalmente la Fiscalía dio su visto bueno definitivo a la solicitud de la enferma, que padece esclerosis múltiple, y el protocolo de muerte asistida volvió a activarse a favor de la peticionaria.
"Estamos abocando a personas con problemas a quitarse la vida sin ofrecerles alternativa", han declarado fuentes de la fundación jurídica en torno a este caso. Reclaman, además, una revisión de los protocolos para que los enfermos que solicitan la muerte asistida tengan que pasar de forma obligatoria un tratamiento psicológico para determinar si una depresión o cualquier enfermedad mental empuja a determinados pacientes a tomar decisiones irreversibles que podrían remediarse con una terapia adecuada.
Con el acta notarial presentado por la afectada, el proceso queda suspendido de forma indefinida.
La decisión de la vecina de Santiago llega semanas después de que el pasado 2 de noviembre su madre se negase a abrir la puerta de su casa a los sanitarios que fueron a buscar a su hija para trasladarla al hospital y practicarle la eutanasia.
Proceso de eutanasia suspendido
Posteriormente, el Juzgado de Instrucción número 2 de Santiago archivó la denuncia que interpuso Abogados Cristianos y las autoridades sanitarias dieron de nuevo luz verde al proceso al estimar que la petición de la enferma cumplía todos los requisitos contemplados en la ley que regula el derecho de los ciudadanos a poner fin a sus vidas sin sufrimiento.
Ahora, con el acta notarial presentado por la afectada, el proceso queda suspendido de forma indefinida.
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Esta señora ha renunciado (frenado le llaman los politicastros) a la eutanasia, como harían el 95% de aspirantes a la "ejecución", si tuvieran una madre con los redaños de la de esta señora y si los políticos se ocupasen más de estas personas con problemas reales, que de los preadolescentes a los que castrar, que viste mucho y , de paso, crea futuros aspirantes a la eutanasia.