Quantcast

España

Ciudadanos sofoca un motín en Baleares para que no afecte a la campaña del 4-M

La 'número dos' de la formación naranja viajó a Palma después de que tres de los cinco diputados autonómicos pidiesen quitar a Patricia Guasp de la portavocía

Ciudadanos ha apagado un incendio en las Islas Baleares después de que tres de los cinco diputados autonómicos pidiesen en una reunión interna la sustitución de la coordinadora regional, Patricia Guasp, como portavoz en el Parlamento balear, según han explicado fuentes naranjas a Vozpópuli.

El grupo parlamentario de Cs Baleares se reunió el 17 de marzo, una semana después del terremoto político que provocó la moción de censura en Murcia y la convocatoria de elecciones anticipadas en Madrid. En aquel momento ya se sabía que la moción murciana no iba a triunfar por la negativa de varios diputados naranjas a secundarla de la mano del PSOE.

Tres de los cinco diputados baleares votaron ese día a favor de que la portavocía del grupo recayese de nuevo en Marc Pérez-Ribas, el cabeza de cartel naranja en las autonómicas de 2019 y que cedió dicho cargo a Guasp en noviembre del año pasado, después de que esta última fuese colocada al frente de Cs Baleares a principios de octubre.

La iniciativa de relevar a Guasp no salió adelante tras la mediación de la secretaria general de Ciudadanos, Marina Bravo, quien se desplazó a Palma una semana después para tratar este asunto con los miembros del grupo parlamentario.

En realidad, Bravo mantuvo dos reuniones por separado, subrayan las citadas fuentes. La primera con Guasp y el parlamentario que la apoya, Juan Manuel Gómez, según desveló el diario balear 'Última Hora'. Y luego la segunda con Pérez-Ribas y los dos diputados que votaron junto a él -Maxo Benalal y Jesús Méndez- el 17 de marzo.

En dicha reunión, la 'número dos' de la formación naranja convenció a estos últimos de que no era el momento de un cambio de este calado ante el fiasco de Murcia, la cercanía de las elecciones madrileñas del 4-M y cuando el partido acababa de elegir a Edmundo Bal como candidato por Madrid. Un portavoz de la dirección nacional admitió a este diario el viaje de Bravo, pero evitó confirmar la reunión con el grupo de Ciudadanos en el Parlamento balear y enmarcó la presencia de la secretaria general en el archipiélago dentro de unas "visitas rutinarias por distintos territorios".

Ciudadanos teme un efecto contagio

Guasp es la coordinadora autonómica en Baleares desde octubre del año pasado, así que es una apuesta personal de Inés Arrimadas. De haber salido adelante la iniciativa para dejarla dentro del grupo parlamentario como portavoz adjunta -el puesto que desempeñó mientras Pérez-Ribas fue portavoz-, habría perdido el principal altavoz de Cs en el archipiélago y su liderazgo hubiera quedado seriamente comprometido.

Para la dirección nacional de Ciudadanos habría sido también un serio revés, después de la salida de un centenar de dirigentes nacionales, autonómicos y locales en las últimas semanas, ya que sería el primer Parlamento en el que pierde el control de su grupo.

De ahí el temor a un efecto contagio en otras cámaras regionales. En Murcia, por ejemplo, el grupo parlamentario quedó reducido a la mitad en marzo con la expulsión de los diputados que apoyaron a Fernando López-Miras. En Extremadura no hay portavoz naranja en la Asamblea desde hace medio año porque 4 de los 7 diputados se oponen a que sea David Salazar sin que la dirección nacional acepte el reingreso de Fernando Rodríguez como afiliado. De ahí la presencia de Bravo en Palma para sofocar la rebelión.

Fuga de afiliados en Baleares

Cs Baleares vive, además, una sangría de militantes desde hace meses. En la actualidad, sólo quedan 9 de las 30 agrupaciones locales que hubo en su momento de mayor expansión territorial en el archipiélago con Joan Mesquida en vida. En Sóller, el cuarto teniente de alcalde, Sebastià Aguiló, se ha dado de baja con toda la agrupación siguiéndole los pasos. Sólo ha quedado un afiliado, el citado Pérez-Ribas.

En Llubí ha ocurrido una desbandada parecida. Los dos concejales que estaban en la oposición, Toni Vallespir y Rafael Ramis, han abandonado Cs con toda la afiliación del municipio. En la isla de Menorca ya solo quedan militantes en Ciudadela después de que rompiese el carné naranja el concejal de San Lluís, Jorge de Diego. Y en Manacor, el que se ha dado de baja ha sido el coordinador local, Pep Català, junto al resto de miembros de la agrupación.

En medio de estas salidas, ha sorprendido en algunas afiliados que la secretaria de Organización de Cs Baleares, Lidia Sabater, haya eliminado dicho cargo orgánico de su perfil de Twitter, si bien desde la formación regional que dirige Guasp se subraya a Vozpópuli que ella sigue al frente de este área.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.