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Asociaciones feministas cargan contra la RAE por aceptar el "palabro" 'cisgénero'

La Alianza Contra el Borrado de las Mujeres, integrada por diversas organizaciones, considera que los académicos de la RAE "se han dejado engatusar por la doctrina misógina" que quiere eliminar el término 'mujer'

Asociaciones feministas cargan contra la RAE por aceptar el "palabro" 'cisgénero'

Las feministas críticas con los postulados de las nuevas leyes y normativas de género tienen un nuevo frente: la RAE. Los académicos de la Real Academia Española han decidido incorporar el término 'cisgénero' al Diccionario de la Lengua y la noticia ha sentado como un jarro de agua fría a algunas de las asociaciones de mujeres que consideran que leyes como la 'ley Trans' impulsada por el Ministerio de Igualdad, así como determinada terminología, darán pie a la eliminación del "sexo" como categoría jurídica. Y, por ende, a tumbar los derechos conseguidos por las mujeres en las últimas décadas.

Es el caso de la Alianza Contra el Borrado de las Mujeres (ACBM), una plataforma que nació "para eliminar todas las formas de discriminación contra mujeres y niñas que resultan de la sustitución de la categoría sexo por la de 'identidad de género'".

Según la última actualización de la RAE, cisgénero es una persona "que se siente identificada con su sexo anatómico". Sin embargo, la alianza CBM matiza que "se usa para definir a las mujeres que, pretendidamente, están conformes con su género". "Es decir, a mujeres que, supuestamente, están conformes con los mandatos y los estereotipos sobre cómo debe ser una mujer. Se usa por oposición al término 'trans': quienes no están conformes con su género. O en otras palabras, los varones que dicen que se sienten mujeres", señalan desde la asociación.

"La RAE ha ignorado que las mujeres no admiten ser llamadas 'cis' y ha incorporado el palabro cisgénero en su última actualización del diccionario. Señores y señoras académicas: se han dejado engatusar por la doctrina misógina que nos quiere devolver a la 'otredad'", lanza la misma entidad a través de las redes sociales. "Al incorporar el término en el diccionario, ¿han tenido ustedes en cuenta que es un palabro rechazado por las mujeres porque lo consideran una definición misógina equivalente a decir 'las que no son trans'?", cuestionan.

Al incorporar el término en el diccionario, ¿han tenido ustedes en cuenta que es un palabro rechazado por las mujeres?

En declaraciones a Vozpópuli, fuentes de ACBM aseguran que la inclusión del citado término en el diccionario por parte de la RAE es de "sorpresa". "La RAE se ha resistido y se resiste a que el masculino genérico, es decir, el uso del masculino para incluir a mujeres y hombres deje de ser predominante. Pero acepta, acríticamente cisgénero, un término procedente de la neolengua transgenerista y que rechazan las mujeres. No somos 'las no trans' y no admitimos que nos definan por lo que no somos. No somos 'lo otro'. No admitimos ser un subgrupo. Somos el 51% del mundo", zanjan.

Cisgénero, obispa, eurofán...

La RAE, rauda a la hora de responder a las dudas lexicológicas que se le plantean en Twitter, no ha respondido a la alianza feminista por ahora. Al menos en la esfera pública. Además de cisgénero, la academia ha incorporado otras nuevas acepciones como nueva normalidad, obispa, eurofán, poliamor y burbuja social.

La encargada de hacer el anuncio fue la directora del DLE, Paz Battaner y destacó que en esta nueva edición se incluyen un total de 3.836 modificaciones frente a las 2.500 novedades de la edición anterior. "El diccionario responde a muchas peticiones cuando son razonadas", defiende. "Durante el momento de la pandemia, la academia hizo un esfuerzo especial para incorporar palabras que aparecían en boca de todos. Pero luego hay muchas palabras que llevamos usando hace tiempo y no hay inmediatez en su reflejo en el diccionario porque no sabemos si se van a consolidar: tiene que pasar un tiempo y ver que sea una palabra necesaria", explicó.

Batalla terminológica

Precisamente, la Alianza Contra el Borrado de las Mujeres, una de las más críticas con las políticas impulsadas por el Ministerio de Igualdad, fijó entre sus metas dar la batalla terminológica. Esta plataforma recuerda que el lenguaje es la gran herramienta a través de la cual construimos la representación del mundo que nos rodea. "Tiene un gran poder en la representación social, pudiendo tanto invisibilizar como empoderar, en función de cómo sea su uso", advierte.

"Una de las asignaturas pendientes de la agenda feminista es precisamente la de un lenguaje que visibilice a la mujer, la gran desaparecida no solo del mundo social, sino del mundo de las ideas", sostienen. Por ello, añaden, en un mundo masculino, la representación de lo masculino en el lenguaje perpetúa la percepción sesgada androcentrista. "Debe modificarse su uso para así modificar la representación de las mujeres en el mundo. Por supuesto, es un sistema de influencia bidireccional, pero eso no exime de su gran importancia", señala en su portal web la asociación que ahora carga contra la RAE.

Una de las asignaturas pendientes de la agenda feminista es precisamente la de un lenguaje que visibilice a la mujer

En la actualidad, continúan las feministas de ACBM, se suma a lo anterior el neolenguaje queer, que, a su juicio, construye un sistema de términos para tratar de crear un nuevo relato en el que no exista el sexo como categoría biológica. "Esa realidad tangible se sustituiría por el concepto subjetivo de 'identidad de género'", apuntan.

Partiendo de esta base ficticia e intencionadamente confusa de la realidad, apunta la asociación, el postmodernismo lleva varios años intentando redefinir la experiencia vital de las personas mediante la creación de un universo de identidades, y con ellas, nuevos términos que intentan etiquetar la gran diversidad de personalidades y formas de comportarnos que tenemos los seres humanos.

"Como consecuencia, se redefine la palabra 'mujer' y todo lo que tiene que ver con las mujeres, para incluir todas las subjetividades que tengan la más mínima relación con los estereotipos de género femeninos. Cabe señalar, otra vez más, que esto no sucede ni por asomo ni con la palabra hombre, ni con los hombres en general", comparan.

Polémica con Darias y Sanidad

La 'guerra' por las palabras no es nueva y ya ha estallado en varias instituciones. A principios de noviembre, el Ministerio de Sanidad firmó una orden para "devolver" el acceso a las técnicas de reproducción humana asistida (RHA) en el Sistema Nacional de Salud (SNS) mujeres sin pareja, lesbianas y bisexuales en todas las comunidades autónomas. Un derecho que amplió a "las personas transexuales con capacidad de gestar".

La Alianza contra el Borrado de las Mujeres (ACBM) puso en la diana a la titular de la cartera, Carolina Darias, por "consagrar" la terminología empleada por el equipo de Montero y que, a su juicio, supone el "borrado" de las mujeres y es "acientífica". La entidad advirtió entonces que "solo las mujeres pueden gestar" y acusó a la ministra y al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de montar un "aquelarre contra el feminismo, la verdad y la ciencia".

El 40 Congreso Federal del PSOE tampoco estuvo exento de lío. El partido rechazó las enmiendas presentadas por las militantes feministas clásicas del seno socialista -algunas de ellas integradas en CBM- que pedían sustituir el término 'trans' por transexual y LGTBI+ o LGTBIQ (lesbianas, gays, transexuales, bisexuales, intersexuales y queer) por personas LGTBI, lo que derivó en un acalorado debate y un enorme malestar.

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