Máxima expectativa. Eso es lo que ha logrado el dirigente de Junts en Waterloo, Carles Puigdemont, que ahora resurge de sus cenizas para volver a primera línea política si la amnistía se lo permite y culminar lo que empezó en 2017: hacer efectiva la independencia de Cataluña y poner la guinda al 'procés'. En una sala abarrotada, ha pronunciado lo que todos esperaban: "No me puesto explicar que después de estar 6 años en el exilio ahora con la oportunidad de recuperar la Generalitat no tome esa decisión por un interés personal. Es por eso que he decidido presentarme a las próximas elecciones a la Generalitat de Cataluña".
Finalmente ha hecho el anuncio estrella este jueves a las 19 horas desde el Ayuntamiento de Elna, el simbólico municipio donde se gestó el 1-O y retuvo las urnas del procés, acompañado y aplaudido por toda la comitiva de Junts. Hasta ahora, el único anuncio oficial que había hecho era que estaría presencialmente para el debate de investidura después de las elecciones. Horas antes de su intervención, centenares de personas hacían cola en el Consistorio con esteladas y señeras para seguir el anuncio de su Molt Honorable President. A su entrada en el Ayuntamiento, decenas de personas a los lados del corredor le esperaban al grito de 'president'.
El arranque del acto ha sido emotivo. Con música conmovedora y tras unas palabras de agradecimiento al alcalde de Elna y especialmente a su equipo y a Xavier Trias, ha justificado su gestión en el exilio, unos seis años y medio fuera de Cataluña que, ha dicho, ha podido asumir por haber tenido presente la "imposición" y el apoyo de "las familias y miles y miles de catalanes", al calor de los aplausos. Se ha presentado, como mártir de la causa, en que este tiempo las fuerzas del "Estado español han fracasado" en intentar que renunciara al impulso secesionista, "y han estado a punto". "Han fracasado y todos los intentos de seducirnos han fracasado, con indultos que solo tenían propósito que desactivarnos a cambio de la tranquilidad personal", ha espetado.
Consciente de la coyuntura que se presenta, con un margen de apenas dos meses para los comicios catalanes y europeos, Puigdemont ha criticado el adelanto electoral de Aragonés en Cataluña 'sorpresivo' en un marco en el que las urnas van a decidir el futuro transcendental de la autonomía. Aún así, tras anunciar que será el candidato de Junts y que renuncia a las europeas para "culminar con éxito" lo que se empezó en 2017, el de Waterloo ha hecho un llamamiento abocado al fracaso para una candidatura única secesionista rememorando los tiempos de 'Junts pel si', en la que ha pedido a ERC que también sume.
"La mayoría creemos que la mejor propuesta para batallar con la máxima fortaleza es una candidatura unitaria, lo creo firmemente, pero lo creo. Ni yendo por separado lo hemos conseguido, habría que sumar para conseguirlo", ha declarado, pidiendo disculpas de antemano por las declaraciones a su equipo.
Como daban ya por hecho los posconvergentes, el expresidente de la Generalitat será el candidato a las elecciones catalanes del 12 de mayo para buscar un duelo a tres con el PSC de Salvador Illa y los republicanos de Pere Aragonés. Junts saca así su caballo ganador para sobrepasar a ERC, al que el CEO le daba este jueves un escaso margen de mejora respecto a Junts, que quedaba tercero. Puigdemont vuelve de esta forma a primera línea política para volver a liderar el secesionismo, a pesar de que la amnistía y los pactos de cesión de Pedro Sánchez iban a ser herramientas de normalización política, y espera sumar en su lista a perfiles de "otros sectores" que también se mantienen firmes en esa convicción.
¿Se puede presentar a las elecciones?
Puigdemont se puede presentar a las elecciones catalanas toda vez que no cumple con los requisitos de inelegibilidad que recoge la Ley Orgánica de Régimen Electoral General (LOREG). Ni se encuentra cumpliendo pena de prisión o de inhabilitación por condena alguna, ni ha sido condenado nunca por delitos de terrorismo o rebelión. Cabe recordar que el dirigente de Junts ya se presentó sin inconvenientes a los comicios de 2017 y de 2021, cuando también estaba procesado en rebeldía por la causa del 'procés
En el supuesto en el que Puigdemont reúna los votos necesarios para volver a presidir la Generalitat de Cataluña su investidura dependerá de la orden nacional activada por el magistrado Pablo Llarena por la causa del 'procés', que a su vez depende de los plazos de tramitación de la ley de amnistía, ahora mismo en manos del Senado y de su posterior aplicación por parte de los jueces. Tras su anuncio, se abren una serie de escenarios y sus respectivas dudas jurídicas. En concreto, porque el expresidente catalán y eurodiputado tiene pendiente comparecer ante la Justicia española desde 2017 -cuando el Tribunal Supremo le procesó en rebeldía en el procedimiento relativo al 'procés'- y aún no se ha aprobado la ley que pretende perdonar más de una década del proceso independentista catalán.