Orange aparca el fútbol a la espera de lo que hagan Amazon y LaLiga con los derechos

Orange ha manifestado que se da mus en la puja de los derechos del fútbol que organizará próximamente LaLiga. La teleco estudiará, eso sí, qué estrategia seguir cuando los compradores y LaLiga destapen sus cartas. Desde la asociación de clubes se busca la entrada de nuevos actores al mercado de los derechos. El formato de la subasta -que analiza la CNMC- gira en torno a eso.

Uno de los actores para los que se prepara con mimo esta puja es Amazon. El flirteo no viene de ahora. Ya ha habido beso. Tuvo lugar en Reino Unido el pasado mes de febrero. Entonces la compañía norteamericana se hacía con los derechos de emisión del fútbol español (LaLiga) en la región hasta el final de la temporada 2021-2022. Quienes estén interesados en acceder a este contenido tendrán que abonar 6,99 libras al mes.

Javier Tebas, presidente de LaLiga, pretende así incentivar que la subasta de los derechos sea al alza, introduciendo un nuevo jugador como es la firma fundada por Jeff Bezos. Orange observa el tablero desde la distancia. No moverá ficha hasta saber qué hacen LaLiga y Amazon. LaLiga porque en su mano está configurar los paquetes de partidos y su exclusividad, y Amazon porque de momento no ha dicho esta boca es mía pero su entrada en el negocio de los derechos del fútbol español ya es un hecho. De producirse se daría la circunstancia, por primera vez, de que Orange tenga que recomprar partidos a Amazon -hasta ahora siempre lo hizo con Telefónica-. Algo extrapolable a Vodafone, recomprador habitual de la teleco española cuando ofrecía el fútbol en su plataforma.

Derechos del fútbol e inflación

El consejero delegado de Orange, Jean François Fallacher, aseguró ayer en la presentación de resultados que no acudirían a la puja para no provocar una mayor "inflación" en los derechos del fútbol. Sin embargo, a nadie escapa que la reacción de la francesa respecto a la compra de derechos tendrá mucho que ver con lo que hagan aquellos que decidan pujar por los mismos.

"Orange España ha registrado unos ingresos de 3.544 millones de euros en los primeros nueve meses de 2021, un 4,9% menos que en el mismo periodo del año anterior, debido a la elevada competitividad del mercado y por el impacto de actividades de bajo margen, como la desaceleración en la venta de equipos y el tráfico mayorista. Durante el tercer trimestre del año, los ingresos alcanzaron la cifra de 1.176 millones de euros, con un retroceso del 4,4% respecto al mismo periodo de 2020", anunciaba ayer el operador.

El roaming internacional ha impactado en las cuentas de la compañía. Los turistas que acuden a España utilizan como norma general sus teléfonos móviles en nuestro país -sobre todo los europeos, con condiciones especiales-. Los operadores españoles son los que cursan esas comunicaciones -datos y llamadas- y luego refacturan el coste a las compañías de origen con las cuales el turista tiene contratado el servicio en su país.

A tenor de las comunicaciones móviles cursadas, la afluencia de turistas a nuestro país está a niveles cercanos a la mitad de lo registrado antes de la pandemia del coronavirus

Por este motivo el descenso del turismo ha impactado directamente en las cuentas del operador. Fallacher ha asegurado que, a tenor de las comunicaciones móviles cursadas, la afluencia de turistas a nuestro país está a niveles cercanos a la mitad de lo registrado antes de la pandemia del coronavirus.

Orange también anunció en el mismo acto de presentación de resultados el cierre de sus tiendas menos rentables. La compañía cuenta con un parque de 800 establecimientos. De momento no ha facilitado el número de tiendas que podría verse afectado. La afluencia a sus establecimientos ha caído con la llegada del coronavirus. Según datos de la propia compañía, el descenso ha sido de un 25% respecto a los nueve primeros meses de 2019.