De debilidad, fortaleza. Así se puede resumir la nueva estrategia que se ha trazado seguir el entorno de Florentino Pérez ante lo que zanja como el efecto de las "amenazas" de la UEFA contra la Juventus. Y ello tras filtrarse, en España, que la Vecchia Signora ha comunicado a Madrid y Barça su intención de abandonar el proyecto de Superliga que lidera el presidente merengue, un extremo que el conjunto italiano ha confirmado matizando que se encuentra sujeto a "evaluación" y "conversación".
Fuentes cercanas al club blanco apuntan a conversaciones entre sus representantes y los del conjunto turinés con la promotora de la Superliga. "A la Juventus le están diciendo que las sanciones por sus procesos judiciales variarán si rompe con la Superliga", reivindican a Vozpópuli fuentes cercanas al grupo de los díscolos.
En un comunicado remitido a la Bolsa italiana, la Juve relativiza las "reconstrucciones" que han trascendido, incluyendo "las supuestas amenazas de UEFA" como "no verdaderas", en contraste con las "pruebas" que advierten que presentarán sus socios, recordando las cautelares obtenidas recientemente en Madrid.
En palabras a este medio de fuentes del entorno de los díscolos, la Juve les advirtió del riesgo de quedarse fuera de competiciones europeas por cuestiones en investigación tanto por la Justicia italiana como por la UEFA. En este sentido, sobresale el llamado caso Prisma, que indaga si los italianos, bajo la dirección de uno de los impulsores de la Superliga, Andrea Agnelli, realizaron plusvalías ficticias y maniobras salariales irregulares. Un caso por el que la Juve se podría quedar sin competir en Europa la próxima temporada, siendo esta circunstancia la supuestamente alegada en privado por la nueva directiva turinesa para plantear a sus socios un divorcio de la Superliga creada en 2021.
La Juventus está expuesta a los socios de Florentino
Una medida que, dependiendo de su profundidad, choca con el actual trasfondo financiero de la Juventus. Y no solo por los 2,6 millones de euros que ha prestado recientemente a la empresa de la Superliga sino porque la misma Juve tiene en los inversores del banco tras el proyecto, el americano JP Morgan, a los principales acreedores de la deuda con la que sorteó 320 millones de pérdidas por la pandemia.
Desde fuentes cercanas a la promotora de la Superliga aseguran que la situación de los turineses abre una nueva arista en el juicio ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea que afronta la iniciativa de Florentino Pérez contra la UEFA por la legalidad de su monopolio. El caso se resolvería entre julio y septiembre.
La Audiencia Provincial de Madrid ha abierto brecha con el abogado general de la UE sobre la Superliga
Desde la Superliga inciden en un fragmento de la resolución de la Audiencia Provincial de Madrid sobre la petición de medidas cautelares contra posibles sanciones del ente encabezado por Ceferin.
"La agresión a la libre competencia se produce desde el momento en que desde la posición de dominio se está tratando de influir de manera determinante, mediante la amenaza de adopción de medidas sancionatorias en su contra, sobre los sujetos que prestan los servicios en el mercado relevante (clubes y futbolistas) para que desistan de ofrecerlos al competidor, lo que puede estrangular la iniciativa competitiva de éste", han advertido desde el Tribunal madrileño, que ha abierto brecha con las recomendaciones que dio el abogado general de la UE al Tribunal en Luxemburgo. Son estas últimas, y la elevada probabilidad de que el TJUE las siga, otro de los grandes argumentos que hacen dudar a la Juve.
Unos delineamientos que podrían también cobrar relevancia en cuanto al Fútbol Club Barcelona. Máxime, tras trascender el planteo que hizo recientemente Ceferin al presidente blaugrana, Joan Laporta, de renunciar a la Superliga a cambio de sortear sanciones por los pagos al exvicepresidente de los árbitros, José María Enríquez Negreira.