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Ford Almussafes cerrará el año con récord a la baja de producción: un 40% menos que en 2019

Con sólo dos modelos en la actualidad, la planta valenciana de Ford acabará este 2023 con una producción de apenas 218.000 unidades, casi un 40% menos que antes de la pandemia.

La planta de Ford Almussafes cerrará el año con un 10% menos de producción que en 2022.

A la espera de conocer el futuro en lo que a la producción de los nuevos modelos eléctricos a partir de 2026 se refiere y sin datos aun ni de inversiones ni de volúmenes, la planta de Ford Almussafes mantiene la tendencia de los últimos años de bajar la producción en medio de regulaciones de empleo, tanto temporales como definitivas.

Así, la planta valenciana de Ford fabricará este año alrededor de un 10% menos de vehículos respecto a 2022, con una producción final estimada al finalizar el ejercicio de 218.855 unidades, que supone cerca de 23.300 vehículos menos.

Desde la vuelta de las vacaciones de verano, la producción se ha paralizado varias jornadas utilizando días de vacaciones colectivas para ajustarla a la menor demanda de los modelos que fabrica la planta valenciana de Ford, ahora tan solo el Kuga y el Transit.

El último expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) acordado para la factoría por problemas en el suministro o falta de componentes se cerró en junio, mientras a finales de año concluirá los despidos acogidos al ERE, que dejarán la planta de Almussafes en 4.800 trabajadores.

Además, el modelo Transit dejará de producirse en la planta en marzo de 2024 y únicamente se fabricará entonces el Kuga hasta la llegada de los primeros eléctricos, que se retrasará sobre la fecha prevista de 2026 inicialmente anunciada para construir la nueva plataforma eléctrica de Ford para Europa.

En 2019 el modelo Kuga ya era el de mayor producción de la planta valenciana con 161.900 unidades fabricadas en el conjunto del año. Junto con la Transit Connect, el Mondeo, el S-Max y el Galaxy sumaron un total acumulado ese año de 345.612 unidades.

Pero tras la pandemia y con ella los ERTE a la factoría de Almussafes, comenzó un retroceso en la producción por el descenso de la demanda y las dificultades de suministro de componentes, y ya en 2022 se quedó en 245.500 vehículos.

Este año, en septiembre y octubre la producción se ha situado en 20.000 vehículos mensuales, lo mismo que se prevé para noviembre, pero en diciembre las previsiones apuntan a una bajada a sólo 12.000 vehículos.

Las estimaciones de cierre de año indican que Ford Almussafes fabricará en total 218.855 vehículos de la Transit Connect y el Kuga este año, que supone 23.294 menos que en 2022, según los datos que maneja UGT consultados por Efe.

La cúpula europes de Ford, en Almussafes

Y en medio de este complicado cierre del año con mínimos de producción, miembros de la cúpula directiva de Ford visitan hoy viernes la planta de Almussafes, pendiente del anuncio de inversiones y de modelos de la plataforma de electrificación que acogerá en sus instalaciones.

El nuevo director mundial de fabricación de Ford, Kumar Galhotra, y el director de la división Ford Pro, Ted Cannis, junto al vicepresidente de Ford Europa, Kieran Cahill, visitan la factoría y mantendrán una reunión con el comité de empresa, según han informado fuentes del sindicato UGT en la planta.

A mediados de 2022 el grupo automovilístico estadounidense Ford confirmó que producirá en la planta de Almussafes sus dos nuevos vehículos eléctricos, basados en la plataforma de eléctricos GE2, pero hasta este momento no ha concretado ni el volumen de inversiones previstos que destinará a la planta para acometer el cambio al eléctrico ni tampoco los modelos que ensamblará.

El sindicato que preside el comité de empresa, UGT, ha demandado a la compañía en varias ocasiones en los últimos meses que tome decisiones al respecto "para no perder el tren del futuro de la nueva movilidad", y ha alertado de un nuevo excedente de personal en la planta ya que actualmente solo produce dos modelos.

Según indica en un comunicado a sus trabajadores, se debería estar a las puertas de la negociación de un cuarto ERE -en los últimos tres años- o en su defecto "de un enésimo ERTE", a la vez que "tendrían que estar produciéndose" inversiones y modificaciones en las líneas de producción para lanzar un nuevo vehículo eléctrico en 2025.

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