Publicado: 26/11/2021 04:45
Endesa estima que ganará 7.400 millones de euros hasta 2024. La mitad de este beneficio, exactamente 3.745 millones de euros, se transferirán a la sede de Enel en Roma. La energética italiana, que controla el 70% del accionariado de la eléctrica que dirige José Bogas, es de nuevo el gran beneficiado de que Endesa dedique gran parte de su beneficio a retribuir a los accionistas.
El nuevo plan de retribución al accionista que ha planteado la eléctrica española refleja que el 80% de sus ganancias de 2021 se dedicarán al pago del dividendo. Endesa espera que su beneficio neto para este ejercicio, a falta de un mes para que cierre el año, se eleve hasta los 1.700 millones de euros. Un ejercicio, marcado por los altos precios de la electricidad, del que Enel y los 200.000 accionistas restantes de la eléctrica (minoritarios e institucionales) se repartirán 1.360 millones.
Sólo de este dividendo el gigante energético Enel, del que controla el Estado italiano un 23% a través del Ministerio de Economía, recibirá de este ejercicio un total de 952 millones de euros por el dividendo de Endesa. Los tres años siguientes se situará en 882, 931 y 980 millones de euros, según sus estimaciones de beneficio neto para los años 2022, 2023 y 2024. En total, 3.745 millones de euros de retribución para el gran accionista de la eléctrica durante los próximos años de su proceso de transformación.
Endesa modera su dividendo
"Endesa confirma la política de pay out (porcentaje de los beneficios que una empresa dedica al pago de dividendos) del 80% en 2021 y el 70% para el periodo 2022-2023, extendiendo ese mismo pay out un año más hasta 2024", explicaba este jueves la eléctrica al mercado. "La empresa mantiene así su política de dividendo adaptada al perfil de crecimiento derivado de este plan estratégico", comunicaba en su plan estratégico de este jueves.
Endesa dedicaba el 100% de su beneficio a retribuir a sus accionistas hasta este año. En 2019, antes de desatarse la pandemia, decidió reducir este pay out. José Bogas anunciaba a sus acciones que se retribución desde 2021 se reduciría al 80% y al 70% a partir de 2022.
"A medio y largo plazo, será nuestra política de dividendos; la consideramos razonable y, además, está en línea con la media de nuestros comparables", declaraba Bogas. Un política de retribución al accionista que va en línea con competidores como Iberdrola (65-75%) o Naturgy (85%).
Más de 30.000 millones
Desde que Enel tomó la mayoría del capital de la eléctrica española, hace catorce años, el grupo italiano se ha apuntado algo más de 30.000 millones de euros en concepto de dividendos de Endesa, contando con el extraordinario de más de 9.000 millones que la española repartió cuando vendió su negocio en Latinoamérica a la propia Enel que, de este modo, costeó la mayor parte de esta operación.
Enel recuperó con esos 9.000 millones, de forma casi inmediata, más del 92% de la inversión, lo que le correspondía por la participación en el capital de la española. Un dividendo que pasó a la historia por ser el mayor de la historia empresarial en España.
Aquel ejercicio 2014, Enel ingresó algo más de 14.000 millones de euros en concepto de dividendos provenientes de Endesa. La empresa italiana, por lo menos hasta 2024, seguirá recibiendo esta retribución por parte de su filial española.
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