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El vuelco a la operación Abertis atrapa a fondos que apostaron 2.300 M. por la guerra de OPA

Sede de la empresa Abertis

El pasado 1 de marzo, Florentino Pérez, presidente de ACS, presentaba ante un grupo de analistas los resultados anuales de la compañía. Preguntado por la operación de Abertis y el comportamiento netamente alcista de las acciones de la concesionaria en Bolsa, Pérez dio una respuesta un tanto enigmática, apuntando al carácter especulativo de estos movimientos. Para terminar de entender la contestación ha habido que esperar unos días, cuando ha llegado al mercado la información que ya aquel día manejaba el también presidente del Real Madrid: ACS y Atlantia se han sentado en una mesa para repartirse Abertis y evitar la guerra de ofertas que había motivado, precisamente, la notable subida de las acciones de la compañía que preside Salvador Alemany.

Numerosos inversores institucionales habían aterrizado en el capital de Abertis o redoblado su apuesta por la compañía en las últimas semanas, seguros de que su recorrido alcista aún no había concluido. Desde mediados de enero, Abertis cotizaba notablemente por encima de los 18,76 euros, la contraprestación en metálico contemplada en la OPA de Hochtief (filial de ACS).

El mercado daba por hecho que la compañía alemana y, sobre todo, Atlantia (cuya propuesta de 16,5 euros por título se había quedado muy desfasada) elevarían el precio de sus ofertas por la concesionaria española, en una dura competencia para hacerse con su control. Una apuesta conjunta superior a los 2.300 millones de euros que hizo que las acciones de Abertis se fueran hasta los 19,75 euros.

Todo se vino abajo en apenas unos minutos, los primeros de la jornada bursátil del jueves. Los hechos relevantes remitidos por Atlantia y ACS antes del toque de campana confirmaban la información publicada por el diario Expansión: ambas negocian una salida pactada que evite, precisamente, aquello que los inversores estaban esperando: una subasta al alza por Abertis. La reacción del mercado no se hizo esperar. Los títulos de Abertis perdieron un 4% este jueves y el viernes consolidaron la caída con un cierre plano, en el entorno de los 18,60 euros.

Salida masiva

Las informaciones que maneja el mercado apuntan a que las posibilidades de que ACS y Atlantia alcancen un acuerdo van en aumento conforme pasan las horas. De confirmarse, se vendrá definitivamente abajo el castillo de naipes construido por los inversores, que tratan ahora de salir de Abertis con la menor pérdida posible. Los que más arriesgaron se han apuntado minusvalías superiores al euro por acción. Desde que Abertis se instaló en el mercado por encima de los 19 euros por título, a mediados de enero, se han intercambiado en Bolsa títulos de la compañía equivalentes a algo más del 12% de su capital.

Algunos de los institucionales que ya tenían una participación significativa en Abertis la han incrementado en estas semanas. Ha sido el caso de Blackrock, una de las principales gestoras de fondos del mundo, que ostenta una participación del 4% en el capital. Mientras, la entidad Burlington Loan, que comenzó aflorando algo más de un 1% de Abertis a finales del pasado año, cuando Hochtief ya había registrado su OPA competidora con la de Atlantia, ya cuenta con algo más del 4% de la compañía.

El aterrizaje más reciente en Abertis ha sido el protagonizado por Société Générale, paradójicamente uno de los bancos que financia la oferta de Hochtief. La entidad financiera francesa ha comprado algo más de un 2% de la concesionaria en los últimos días, tanto de forma directa como a través de Lyxor International, su filial especializada en ETF.

Por el momento, Abertis ha visto cómo más de 1.000 millones de euros de su capitalización se han esfumado en la nefasta sesión del jueves. No obstante, aun contando con esta caída, la concesionaria vale casi 3.400 millones de euros más que a mediados de abril del pasado año, justo antes de que Atlantia confirmara los rumores de que estudiaba una operación corporativa con Abertis.