Comprar un piso es un 8% más caro que hace un año, pero el mercado ya empieza a desacelerar

Comprar un piso sigue siendo una odisea, aunque ya no tanto. La subida del precio de la vivienda se moderó al 8% entre abril y junio, en relación con el mismo periodo de 2021, medio punto menos que en el primer trimestre, cuando se encareció un 8,5% en tasa interanual, el mayor aumento registrado desde el pico de la burbuja inmobiliaria en septiembre de 2007. La vivienda nueva subió un 8,8% en el segundo trimestre y la de segunda mano, un 7,9%, según los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que reflejan 33 trimestres consecutivos con precios al alza.

En el caso de la vivienda usada, los precios encadenaron ocho años de subida. El aumento de precios se suavizó en todas las comunidades autónomas, excepto en La Rioja y el País Vasco, donde la tasa anual subió seis y dos décimas, respectivamente. Los menores aumentos, de 1,6 y 1,5 puntos, se dieron en Extremadura y Canarias, respectivamente, mientras que en la Comunidad de Madrid la vivienda se encareció por debajo de la media (7,3%), al igual que en Cataluña (7,2%).

Entre el primer trimestre del año y el segundo, el precio subió un 1,9%, más el de la vivienda usada (2,3%), que el de la nueva (0,1%). Esta tasa trimestral lleva seis trimestres seguidos al alza. Baleares fue la comunidad donde la vivienda se encareció más entre abril y junio respecto al mismo periodo de 2021 (10,9%), seguida de Andalucía (10,2 %), Cantabria (9,9%), Ceuta (9,5%), Canarias (9,4%), Murcia (9,3%), Melilla (8,7 %) y la Comunidad Valenciana (8 %).

Por debajo de la media nacional, los precios de las casas subieron en La Rioja (7,9 %), Galicia (7,7%), Aragón (7,5%), Navarra (7,3%), Asturias (6,6%), País Vasco (6,5%), Castilla y León (6,4%), Castilla-la Mancha (6%) y Extremadura (5,6%).