Tomás Olivo se atasca en su desembarco al consejo de Unicaja por problemas para elegir a su representante

Tomás Olivo se atasca en su irrupción en el consejo de Unicaja. El empresario murciano, segundo máximo accionista de la entidad con un 9%, ya tenía como candidato preferido al histórico juez Augusto Méndez de Lugo. Pero en las últimas semanas han surgido problemas personales en torno a la figura de Olivo que dificultan la elección de un representante de su confianza, según trasladan a Vozpópuli fuentes financieras.

Olivo lleva tiempo queriendo entrar en el consejo del sexto banco por activos en España, sobre todo desde finales de octubre, cuando rebasó el 9% al aprovechar la salida del inversor mexicano Ernesto Tinajero, afín al exconsejero delegado procedente de Liberbank, Manuel Menéndez.

El candidato en el consejo tiene que pasar el filtro del Banco Central Europeo (BCE), conocido como 'fit and proper', el proceso para evaluar su idoneidad para ejercer el cargo y que tendría muy difícil cumplir el propio Tomás Olivo.

"El rey de los centros comerciales planeaba aprovechar la junta de accionistas del 5 de abril para pedir su entrada en el consejo, pero este plan está en cuestión por los problemas personales surgidos en torno a su figura

Augusto Méndez de Lugo, que fue presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) durante 15 años, goza de la plena confianza del empresario murciano. De hecho, es su asesor legal. Pero no está claro que finalmente vaya a aceptar ser el representante en Unicaja a raíz de problemas personales en el entorno de Olivo, según fuentes conocedoras.

Reactiva la búsqueda de nuevos candidatos

El entorno del empresario, que lleva un tiempo fuera de España, ha reactivado la búsqueda de un candidato y está sondeando a empresarios y directivos de la órbita de Unicaja, que están rechazando sistemáticamente estos ofrecimientos, según las fuentes consultadas.

El empresario ya inició con el Banco de España el trámite oficial para registrar su participación. Se trata del paso previo a solicitar un sillón en el máximo órgano de gobierno, que algunas fuentes apuntan a que tenía previsto reclamarlo aprovechando la junta de accionista del 5 de abril. Un plan que ahora tiene difícil cumplir tras los problemas personales ligados al empresario.   

Los dueños de Mayoral, con menos capital que Olivo, se sientan con un representante en el consejo desde marzo de 2022

El consejo de Unicaja está formado en la actualidad por 14 miembros tras la vacante que provocó en verano la salida del fondo Oceanwood, que se sentaba en el máximo órgano de gobierno con un representante como herencia de la fusión con Liberbank. La intención del banco es reestablecer los 15 consejeros, lo que abriría la puerta al representante del empresario murciano.

Reconfiguración incompleta

En caso de que Olivo no encuentre un candidato afín y en condiciones de pasar el examen del BCE, la reconfiguración del máximo órgano de gobierno de Unicaja no sería completa tras la junta de después de Semana Santa, en la que se ratificará a José Sevilla, exconsejero delegado de Bankia, como nuevo presidente no ejecutivo.

Sólo la Fundación Unicaja, con el 30,2% del capital, controla más acciones que Olivo en el banco. Indumenta Pueri (la familia propietaria del grupo textil malagueño Mayoral), tiene un 8% y se sienta en el consejo desde hace dos años, al igual que la Fundación Bancaria Caja de Ahorros de Asturias (7%).

También destacan como accionistas significativos, con más del 3% del capital, el fondo soberano de Noruega (7,4%) y la aseguradora Santa Lucía (5,17%). Esta última compañía irrumpió en el accionariado tras la batalla de poder entre el bloque malagueño y asturiano que acabó con el nombramiento como consejero delegado de Isidro Rubiales, mano derecha del expresidente Manuel Azuaga.