La AIReF denuncia que la reforma de las pensiones de Escrivá es insostenible

La AIReF señala que la nueva regla de gasto en pensiones introducida por el Real Decreto-ley 2/2023 presenta "debilidades de diseño como falta de justificación de los límites cuantitativos escogidos, ausencia de coherencia con el marco fiscal y las restricciones que se imponen" a su "supervisión independiente". Así lo advierte en su Opinión sobre la sostenibilidad de las finanzas públicas en la que analiza la reforma de las pensiones de su expresidente José Luis Escrivá, que considera que no contribuye a la sostenibilidad y que disparará el gasto, el déficit y la deuda en las próximas décadas. La norma prevé que la Autoridad Fiscal supervise el gasto en pensiones cada tres años, pero como ha advertido su presidenta, Cristina Herrero, no le permite evaluar previsiones de gasto y restringe la valoración de las medidas de ingresos.

Herrero ha reclamado al Gobierno que modifique esta regla y que "transparente las cifras" sobre las que ha basado la reforma. "2023 puede considerarse un año perdido por los procesos electorales, pero es también una oportunidad para el inicio de la legislatura lleva a una estrategia a medio y largo plazo", ha planteado, en alusión a que espera que el próximo Ejecutivo ajuste la reforma.

"La regla de gasto dice que la AIReF tiene que evaluar el impacto de las medidas de ingresos, pero tiene que dar como dados supuestos de acordados por la Comisión Europea y el Gobierno en el informe de envejecimiento y sólo se nos pide que analicemos los ingresos, dejando fuera el gasto en pensiones y la valoración de las medidas de gasto, lo que no tiene mucha consistencia", ha planteado Herrero.

"La regla de gasto se plantea en términos netos. Pase lo que pase en el gasto e ingreso neto, ésta no puede superar el 13,3%, con un gasto promedio del 15%, y las medidas de ingresos con un impacto de al menos el 1,7%. Sí permiten desviaciones en el 15% y 1,7% mientras se mantenga el 13,3. No tiene sentido que sólo evaluemos los ingresos, y que cuando el 13,3 se rompa y sea superior, las previsiones vuelvan a la AIReF y ahí si veríamos el gasto, que inicialmente no hemos valorado", ha detallado.

A todo este se añade que el resultado de la regla de gasto es altamente sensible a los supuestos y metodología que se empleen para su cálculo.

Herrero ha remachado: "Hay que dar una vuelta a la aplicación de la regla de gasto, formulamos propuestas". La AIReF va a acompañar el informe previsto en el Real Decreto-ley con la actualización de esta Opinión para poner en disposición de las instituciones y la sociedad un análisis independiente y detallado de la situación de las finanzas públicas como elemento objetivo para la toma de decisiones.

En un escenario sin medidas de política económica ni reglas fiscales, el envejecimiento podría llevar la deuda al 186% del PIB en 2070 y del déficit al 7%, avisa la Opinión, que señala que el gasto en pensiones empezaría a acelerarse especialmente a partir de 2035 con la jubilación de los baby boomers, con un máximo del 16,3% del PIB en 2049, partiendo del 12,7% del PIB en que se situaría en la actualidad.

Precisamente hasta 2050, el envejecimiento y la subida de las pensiones con el IPC aumentarán el gasto en pensiones total en 2,6 puntos de PIB, cuando las medidas de ingresos de la reforma sólo aportarán 1,3 puntos del PIB. Las reformas de las pensiones de 2021 y 2023 que ha realizado Escrivá suponen un incremento del déficit de 1,1 puntos de PIB en 2050 y de un punto en 2070, concluye el informe.

La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha presentado este viernes su Opinión sobre la reforma de las pensiones de su hasta ahora único expresidente, José Luis Escrivá. Se trata de un trámite al que la ley no le obliga, pero que resulta de vital importancia y que en esta ocasión supone un trago para la Autoridad Fiscal, que ha tenido que evaluar una reforma que no garantiza la sostenibilidad del sistema ni siquiera con la importante subida de cotizaciones sociales que realiza, justo lo contrario de lo que defendía el propio Escrivá en 2019, cuando publicó su anterior análisis.

Sí que debe presentar su análisis al Ejecutivo con 10 días de antelación, proceso que se ha producido, además de un intercambio de información con el Ministerio de Inclusión a nivel técnico, pero que tuvo lugar en diciembre, sobre la propuesta que hizo el Gobierno a los agentes sociales el 30 de noviembre. Sobre los numerosos cambios que se han introducido en marzo en el cierre de la negociación, han preparado estimaciones de lo que se venía conociendo, ha explicado Herrero.

Lo que sostenía Escrivá en la AIReF

Justo antes de ser ministro, Escrivá sostenía que las cotizaciones sociales en España superan "en seis puntos la media de la OCDE" y que no había que subirlas en ningún caso. Los análisis de la AIReF que presidía Escrivá en 2019 insistían en el impacto de subir las cotizaciones en el empleo. Este viernes la Autoridad no ha querido dar detalles definitivos sobre el impacto que calcula en el empleo porque cree que falta realizar un análisis exhaustivo por sectores a nivel micro. Han admitido que la literatura económica constata el impacto de una subida de cotizaciones en el empleo pero han considerado que en este caso será limitado y han aludido a la pérdida de 30.000 empleos. BBVA Research planteó que serían unos 240.000.

Pero es que, además, en 2019, la AIReF de Escrivá abogaba sin ambages por la polémica propuesta que se ha comprometido con Bruselas en el Plan de Recuperación para 2022 y que ha retrasado el acuerdo más de dos meses de la fecha límite de 31 de diciembre: aumentar la carrera de cotización considerada para el cómputo de la pensión "desde los 25 años del escenario central hasta los 35 años en 2027, que supondría un ahorro de 0,5 puntos de PIB en 2050 sin apenas afectar a la suficiencia".

Asimismo, entonces Escrivá se mostraba favorable a la reforma del PP de 2013 que ahora critica duramente y planteaba que las reformas paramétricas de 2011 y el Factor de Sostenibilidad que creó el PP y que ahora ha derogado contendrían adicionalmente el gasto en 3,5 puntos. Este viernes Herrero ha subrayado que "hay dos medidas fundamentales que incrementan de manera significativa el gasto, la eliminación del Factor de Sostenibilidad y del IRP. La supresión de este último supone 2,7 puntos en 2050".