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Economía

Un gestor inmobiliario prevé que el teletrabajo permanente se cuadruplicará en España

Imagen de una persona teletrabajando.

La gestora de inversiones inmobiliarias MVGM estima que la crisis del coronavirus derivará en que la proporción de españoles que teletrabaja de manera permanente se cuadruplique tras el confinamiento sobrevenido por la pandemia, hasta representar alrededor del 30% de la población ocupada en nuestro país. La consultora ahonda así en una tendencia ya delineada por otros agentes del propio sector inmobiliario.

"España es uno de los países que contaba con los índices más bajos de teletrabajo (antes de la pandemia), alrededor del 7%, mientras que en otros países como Suecia o Dinamarca este porcentaje superaba el 30%", señalan a Vozpópuli desde la gestora inmobiliaria de origen holandés que en 2019 fusionó su negocio en España con el de la estadounidense JLL.

"Actualmente, y desde hace 6 semanas, un alto porcentaje de las compañías están trabajando desde casa con 'cierta normalidad', y posiblemente veremos en los próximos meses una adaptación en el retorno a las oficinas, en las que se mantendrá un alto porcentaje de los empleados trabajando desde casa. Es una tendencia que, como otras, se ha visto acelerada con motivo del coronavirus, y nos acercará indiscutiblemente a los ratios más altos de teletrabajo europeos, lo cual tendrá una repercusión evidente en el sector inmobiliario (oficinas)", dicen sobre España desde MVGM.

Estimación

Surgida hace 70 años en los Países Bajos, MVGM tiene hoy 1.500 empleados en Europa, 100 de ellos en Madrid y Barcelona, y 18 millones de metros cuadrados (centros comerciales, hoteles, oficinas, etc.) bajo gestión en toda Europa.

Desde su seno dan por hecho que en España "las grandes compañías se darán cuenta de que pueden tener hasta el 30% de sus empleados trabajando desde casa sin problemas", y que eso ayudaría a soliviantar al conjunto del mercado, aunque, inciden, la suya es una "estimación". En nuestro país, 5,6 millones de personas trabajan en "grandes empresas" y 10,5 millones, en pymes, atendiendo a los últimos datos del Ministerio de Industria.

"Según un estudio realizado por Randstad, se indica que de las comunidades autónomas, las que cuentan con mayor número de trabajadores con opción a teletrabajo y están por encima de la media nacional son la Comunidad de Madrid, con el 28% del total de trabajadores de toda España con opción a teletrabajar, seguida de Cataluña (25,1%), País Vasco (24,5%), Navarra (23%) y Asturias (22,4%)", añaden desde la consultora. "Lo que significa que aproximadamente el 30% de todos los trabajos pueden realizarse desde casa, por lo que es innegable que el teletrabajo podría convertirse en la 'nueva normalidad' dadas las circunstancias", estiman desde MVGM.

Los últimos datos públicos sobre teletrabajo habitual a nivel nacional, de Eurostat, corresponden a 2018. Entonces, los países que lideraban el teletrabajo eran los propios Países Bajos (14%), Finlandia (13%), Luxemburgo (11%), Austria (10%) y Dinamarca (7,8%). En España, la cifra era del 4,3%, por debajo de la media europea del 5,2%. 

Perspectivas en oficinas

Paralelamente, de acuerdo a los últimos datos de la consultora inmobiliaria Savills Aguirre Newman, la demanda de oficinas en Madrid y Barcelona se resintió en el primer trimestre de 2020.

La contratación de oficinas en la capital de España se redujo a casi la mitad en el primer trimestre de 2020 (110.000 metros cuadrados frente a los 200.000 metros cuadrados del primer trimestre de 2019, si bien la cifra de este último corresponde en un 23% a una misma operación, de Acciona), mientras que la inversión cayó un 12% (de 695 millones a 620 millones).

Los expertos de la consultora prevén que buena parte de las operaciones previstas para el segundo trimestre en Madrid se posterguen y se retomen después del verano. Estiman que podrían producirse bajadas del precio de salida de las oficinas de entre el 5% y el 15% a lo largo del 2020 en función de cómo progrese la 'desescalada'.

La demanda de oficinas sufrió un freno en el primer trimestre de 2020, pero se confía en que la actividad inversora retome intensidad tras el verano

En el caso de Barcelona, en el primer trimestre se demandaron nuevas oficinas por un volumen de 45.000 metros cuadrados (frente a los 150.000 del primer trimestre de 2019), "si bien hay varias operaciones de volumen importante que se debían de haber firmado en el primer trimestre y se han retrasado debido al impacto de la covid-19", dicen desde Savills.

Para Barcelona, la consultora no prevé un impacto en el corto plazo en las rentas de la caída de la demanda "ya que debería darse la variable de sobreoferta, y no es el caso". De hecho, la inversión en oficinas en Barcelona acabó siendo de 175 millones, un 14% superior al mismo período de 2019. 

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