Kiko Matamoros muestra su lado más sentimental y llora al hablar de su padre

Tras la polémica entrevista de Coto Matamoros, en la que aseguró que en 'Sálvame' "se drogan todos" y dio nombres y apellidos de muchos de ellos, y habló de lo dura que fue su vida, en gran parte por las drogas, ahora ha sido Kiko Matamoros, de 64 años, el que desvelado el infierno que padeció en su casa, por la violencia ejercida de manos de su padre, y en el colegio, donde sufrió acoso sexual siendo muy pequeño.

Unas duras confesiones que ha hecho en el canal de podcast 'Lo que tú digas' en el que Kiko fue entrevistado por el periodista Álex Fidalgo.

"Con 7 años viví acoso sexual en el colegio. Pero muchos de mis compañeros sufrieron abusos sexuales por parte de los religiosos", señaló el colaborador de 'Sálvame' y 'Viva la vida', recordando que al menos diez de sus compañeros lo padecieron. "En aquella época los abusos sexuales estaban a la orden del día", señaló en la entrevista.

En el programa 'Viva la vida' también ha hablado de las palizas que le daba su progenitor. Lejos de guardarle rencor, le ha perdonado e incluso ha justificado. Kiko no ha podido evitar emocionarse, con lágrimas en los ojos, al hablar de su padre.

Kiko Matamoros confiesa que la violencia y palizas "rozaban el salvajismo"

En el programa de Mediaset le pusieron algunos de los extractos de la entrevista de 'Lo que tú digas' y después habló de ello, recordando lo mucho que sufrió en su niñez por las palizas que le daba su padre y las que también le propinaban en el colegio. "En mi casa y en el colegio nos daban una somanta de hostias que no podía sin creer y algunas rozaban el salvajismo".

"Yo recuerdo un puñetazo que medio mi padre que empecé a sangrar por la nariz y lo que hacía cuando no me veía, yo me daba en la nariz otra vez para que no se cortara la hemorragia porque decía: 'A ver si me muero y te hago culpable'. A ese nivel de hijaputez llegaba yo", ha confesado.

A pesar de ser víctima de malos tratos, lo justifica por las costumbres de la época. "Lo que se entendía era que a base de ostias… La letra, con sangre entra".

A mi padre no le responsabilizo de nada. Era el franquismo puro y duro. Las agresiones y abusos estaban a la orden del día

"Yo soy nieto de militares y verdaderamente, supongo que la formación que recibió mi padre fue casi castrense y eso es lo que nos transmitió pensando que era lo mejor para nosotros", manifestó, mostrando no guardar ningún tipo de rencor.

"A mi padre no le responsabilizo de nada pero lo que no voy a ocultar era la situación que mucha gente de mi época le toco vivir. Era el franquismo puro y duro, en el momento mas álgido antes de los años 60, del desarrollismo y de que los americanos compraran el país y verdaderamente la formación que se recibía en los colegios era esa, las agresiones estaban a la orden del día y también determinados tipos de abusos".

A mis hijos no les he puesto una mano encima en la vida por el rechazo a esa educación

La presentadora Emma García se mostró conmovida por su testimonio y le preguntó cuándo llegó a perdonar a su padre. "Pues creo que con el tiempo, la madurez".

"Cuando me fui de mi casa, creo que hui pero verdaderamente. Tenía 19 años pero ya había hecho mis escarceos una temporada. Me había ido a vivir a un apartamento y la verdad es que no le guardo ningún rencor a mi padre porque verdaderamente yo creo que con el tiempo todos los padres les llegamos a resultar ridículos  a nuestros hijos o por lo menos desfasados en formación, educación".

Este infierno que vivió le ha llevado a no ser así con sus cinco hijos. "Yo a mis hijos no les he puesto una mano encima en la vida precisamente por ese rechazo que me produjo ese tipo de educación, a lo mejor tenia que haber sido más estricto, no lo sé, pero no lo digo en el sentido de la violencia, sino más exigente. Sin embargo, no le daba importancia a las calificaciones escolares, a todo eso... precisamente por rechazo a esa educación que sufrí de pequeño", señaló.

Kiko asegura con lágrimas en los ojos: "Yo a mi padre le quiero mucho. La mitad de mi vida se la debo a él"

Después Matamoros habló de su padre y se le saltaron las lágrimas. "Pero yo a mi padre le quiero mucho y le agradezco estar aquí... la mitad de mi vida se la debo a él, mejor o peor", dijo visiblemente emocionado.

Emma destacó que lo que estaba haciendo era "un acto de generosidad que no todo el mundo consigue", el haber pasado "una infancia complicada que era fruto de la situación y que tú hayas conseguido sanar eso y sobre todo, entender por qué lo hacía él".

Si ves la Torre Eiffel y te gusta, es porque tu padre un día decidió que viniera a este mundo

"Todos nos equivocamos mucho pero es bonito pensar que la mitad de tu felicidad te la ha dado tu padre y la otra mitad tu madre, y ha habido personas que han sabido perdonar a sus padres en situaciones infinitamente peores a las que yo pude vivir, que fue algo absolutamente normal en la época".

"Y si ves la Torre Eiffel y te gusta, es porque tu padre un día decidió que vinieras a este mundo, te vayas a África o donde vayas a disfrutar, de la compañía vuestra en este caso, [dijo refiriéndose a sus compañeros de programa], de todo...".

"Si es que cuando le debes la vida a una persona, creo que tienes que ser muy generoso y tenerlo en muy cuenta siempre, a parte de otros sacrificios que evidentemente hizo mi padre por nosotros", declaró.

Emma García y los colaboradores alaban a Kiko y lo mucho que ha cambiado

La presentadora de 'Viva la vida' alabó la figura de Kiko diciendo que "ha ganado mucho con los años interiormente". Algo con lo que otros compañeros de programa estuvieron de acuerdo.

Diego Arrabal señaló que "ha cambiado muchísimo en los dos últimos años" por las cosas que le habían pasado en su vida.

Emma añadió que "se ha serenado", mientras que Marisa Martín Blázquez destacó de él que es "el gran desconocido" para la mayor parte de la gente. "Soy una persona un poco intuitiva y yo a Kiko le tengo calado desde hace muchos años. Frente a esa apariencia de tipo duro y a veces hasta irreverente y maleducado, que muchas veces también lo es, detrás de eso hay una persona con una sensibilidad muy especial".

Matamoros reconoció entonces: "Soy un personaje poliédrico y puedo dar distintas caras o imágenes. Hay muchas cosas en mi vida que son contradictorias pero ahí está, cada uno somos como somos".

Matamoros asegura que su cambio se produce cuando se separa de Makoke: "Me liberé"

Kiko explicó que su cambio se produce hace tres años, una fecha que coincide con la separación de Makoke, que se produjo en agosto de 2018. Tras 20 años juntos, dos de casados y una hija en común, Ana Matamoros.

Matamoros relató cómo se sintió entonces. "Me liberé. Llegó un momento en mi vida que estaba asfixiado, que vivía en una casa que no sentía mía, que si había cosas que pasaban en esa casa y decía: 'esto no me gusta', me decían: 'ahí tienes la puerta que la casa no es tuya'. En fin, que he conocido también a una persona que me da mucha tranquilidad, serenidad y felicidad", dijo refiriéndose a su novia Marta, 40 años menor que él.

Enrique del Pozo alabó también la persona de Kiko: "Me ha gustado siempre de él, que equivocándose o no, siempre ha dicho lo que pensaba y si se ha equivocado, lo ha reconocido pero lo que pasaste, lo que estás contando ahora, es difícil de asimilar con el tiempo y te honra lo que estás diciendo de tu padre porque cuesta tiempo asimilarlo, es un acto de generosidad no solo hacia tu padre sino también hacia ti mismo".

Si quieres pasar un buen rato, sigue en Twitter a Irene Montero, no puede ser más ignorante

En el canal de podcast de Álex Fidalgo también habló de su hermano Coto Matamoros, sobre el que dijo: "He aprendido a vivir sin mi hermano y estoy muy a gusto. El que le metió en la tele fui yo, el que le explicaba todo, él no tenía ni puta idea".

También arremetió contra algunos personajes del mundo de la política y de la monarquía: "Si quieres pasar un buen rato tienes que seguir en Twitter a Irene Montero, que es ministra y no se puede ser más ignorante. Jesús Gil era lo que era, pero no dejaba de ser un tipo agradecido con su gente. Hubo un tiempo que la Casa Real si imponía determinadas mordazas, pero eso ya no pasa. Se abrió la veda. Si Felipe VI hubiese mantenido una conducta como la del padre, la institución se habría acabado".