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Adriana Abenia responde a la noche que acabó con un párroco y la polémica berenjena

Adriana Abenia responde a la noche que acabó con un párroco y la polémica berenjena

“Yo acabé la noche con el párroco!! Curas modernos que se ríen de cualquier cosa. Así debería ser la iglesia.” Con estas palabras, Adriana Abenia acompañaba la imagen de ella acompañada por un cura y la controvertida berenjena.

Una foto que ha sido muy alabada pero también muy criticada por otros muchos en su Instagram. De hecho, Adriana respondió a una usuaria que poco después borró sus comentarios. Lo hizo así:No te voy a permitir que me insultes, sólo una persona con tanta imaginación como tú puede pensar tal cosa", "él me pidió la foto a mí, con mucha educación por cierto, la que te falta a ti. Yo accedí y me hice otra. Fin.", a lo que continuaba diciendo "deberías tratar este asunto de otra manera más sana, gente como tú frenan la normalización de estas cosas. Una pena que esta sea la única defensa que seas capaz de hacer de tu primo. Flaco favor”.

Tal ha sido la controversia, que la zaragozana ha aprovechado su blog en  ’20 minutos’ para “explicar cómo fueron los hechos.

"Ya es mala suerte que el Padre Juan apareciera justo en el momento álgido en el que una descomunal berenjena me servía de micrófono para cantar a viva voz la canción de Dorian A cualquier otra parte (lugar al que habría querido dirigirse de saber lo que iba a ocurrir después) para pedirme, con mucho respeto, una foto tal y como había hecho hacía unos segundos con otros invitados, como Carmen Alcayde”, relata.

Y ha querido añadir: “La foto me pareció muy simpática y decidí colgarla en mis redes sociales, acompañada de un texto en el que precisamente alababa y reivindicaba ese atisbo de modernidad que había descubierto en este cura que reía y opinaba como uno de nosotros”.

Abenia termina contando que el arzobispado de Valencia le pidió la retirada de la foto porque podría confundir, pero ella se negó, se puso directamente en contacto con el arzobispado para explicarlo, y ruega “no arder en el infierno” por su acción.

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