Las futbolistas de la selección española femenina podrán apartar de forma inmediata a todos los trabajadores de la RFEF que ellas decidan. Así se lo ha comunicado el máximo organismo del fútbol nacional a las jugadoras, que se han plantado tras considerar que la marcha de Luis Rubiales y Jorge Vilda no es suficiente.
La RFEF se compromete, según la información publicada en exclusiva por Onda Cero, a despedir a las personas elegidas por las futbolistas en un plazo máximo de un mes. Eso sí, la Federación da un margen máximo para comunicar los nombres: las campeonas del mundo tendrán hasta hoy a las 00.00 horas para trasladar su decisión a la RFEF.
De esta forma, la RFEF asegura haber cumplido con las exigencias de las jugadoras para volver a ser convocadas y ponerse a las órdenes de Montse Tomé, nueva seleccionadora nacional.
Desde la RFEF han trasladado a las jugadoras que en caso de no dar una respuesta, María Dolores Martínez Madrona, la mediadora en este conflicto, entenderá su silencio como una negativa definitiva a ser convocadas para los dos próximos encuentros de la selección, ambos clasificatorios para los Juegos Olímpicos de París 2024.
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¿¿Ahora resulta que son las trabajadoras (las futbolistas) las que deciden quiénes son sus mandos? Es cómo si los trabajadores contratasen al empresario y no al revés. En fin, para mear y no echar gota. Yo, si fuese la federación de futbol, no convocaba a ninguna de las que han firmado el manifiesto y7 daba paso a la selección nacional a las canteranas que se destacasen por su desempeño en cada club individual.