'La Razón' no descansa en agosto y da leña a Carmena por coger "la flor prohibida"

España no sería la misma si en ella no viviera Francisco Marhuenda García, barcelonés de nacimiento, madrileño de adopción, licenciado en derecho, profesor de universidad, exjefe de gabinete de Mariano Rajoy, tertuliano televisivo y, cuando tiene tiempo, director de 'La Razón'. A diferencia del 99% de los mortales, Marhuenda, que fue entrevistado el pasado fin de semana por este periódico, no parece necesitar descanso ni siquiera en plena canícula, y su siempre impagable presencia llama más la atención cuando el resto de presentadores y tertulianos titulares sí se han cogido unos días de descanso y él sigue ahí: en La Sexta, en Antena 3, en COPE, en Es Radio, en Telemadrid, desafortunadamente ya no en RAC1, donde tuvo un agrio enfrentamiento con otra experta de las ondas, Pilar Rahola.

Pero el periodista también es director de La Razón, y aunque cuentan que apenas está a media jornada en el periódico (acude al mismo por las tardes), su impronta marca, y mucho, la línea editorial del diario de centroderecha del grupo Planeta. En los últimos días, el marcaje de La Razón a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha sido notable por motivo de sus vacaciones familiares en una urbanización de alto standing en Zahara de los Atunes, Cádiz. Este jueves se rizaba el rizo con el siguiente texto en el que se acusaba con ironía a Carmena de haber cortado una flor en peligro de extinción, la "flor prohibida".

"Habrá que concederle el beneficio de la duda a la alcaldesa de Madrid y suponer que fue el desconocimiento sobre la fauna y flora nacional lo que la llevó a recoger un hermoso ejemplar de Pancratium Maritimum, planta incluida en la lista roja de especies en peligro de extinción de la Junta de Andalucía pero que, también, se haya protegida en otras comunidades autónoma, como Baleares". Y terminaba el párrafo aludiendo a que "los defensores de la naturaleza" habían notado que Carmena llevaba esa flor en la mano, aunque sin citar qué defensores. El huecograbado buscaba la sátira casi riéndose de uno mismo más que la crítica con algo de veracidad. Formaba parte de una doble página ciertamente ingeniosa.

Además de la lamentable confusión entre los verbos 'haber' y 'hallar', el texto incluía otra incorrección, como el hecho de que esa planta esté protegida, algo que ha negado la Junta de Andalucía tras ser consultada por el 'Huffington Post'. Aunque habría que ser muy cuidadoso con hacer responsable a Marhuenda de lo que se publica en su diario, muchos en las redes sociales han tirado rápidamente del personaje en sus argumentaciones contra el medio impreso del grupo Planeta. No sabemos si este texto ha pasado por la revisión del periodista catalán, aunque debido a sus múltiples obligaciones es más que probable que no.