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Cultura

La Cultura en los PGE del PP: de la marca España a la marca Blanca

José Ignacio Wer, ex minitro de Educación Cultura y Deporte y su sucesor, Iñigo Méndez Vigo.

Vender ésta como la mayor alza presupuestaria desde 2005 es una manera de ver las cosas; ujum. Que estos proyectos supongan la cara más amistosa de una legislatura que hizo los peores recortes, es, también, otra forma de ver el asunto. Y sin embargo una cosa amarga –acaso una sensación de tiempo perdido- se desprende de las asignaciones que el Estado ha diseñado de cara a 2016 para un sector que vio desplomarse no sólo sus presupuestos -un 40% en menos de cuatro años- sino sus proyectos esenciales e incluso su amor propio. En tiempo de elecciones, todo son zanahorias.

Los PGE para 2016 lo que la Cultura supone para los 'populares': una zona gris e informe, una frontera en la que se confunde turismo y espectáculo con creación y conocimiento

Bastante más educado y cordial con la prensa que su antecesor José Ignacio Wert, el actual ministro de Educación, Cultura y Deporte, Iñigo Méndez de Vigo, pareció confirmar este martes durante su presentación de las partidas del proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2016 lo que la Cultura supone para los 'populares': una zona gris e informe, una frontera en la que se confunde turismo y espectáculo con creación y conocimiento –no sería la primera vez que esto se evidencia- y en el que la obsesión por la llamada Marca España –fomento del castellano, la gastronomía, las rutas turísticas, la industria- devino en marca blanca, ya que de otra manera no se explica por qué hay tal desproporción en unos presupuestos donde el cine –el sector más golpeado por el IVA cultural, es cierto- de pronto se lo lleva todo -cual golpe de efecto o falta de planificación- mientras otros como el sector Bibliotecas sigue sufriendo el desinterés y desafección, la misma que padece desde hace cuatro años. Acaso porque terminará siendo verdad: que la gente lea no atrae el turismo.

De la marca España a la marca Blanca

En líneas generales, Méndez de Vigo ha destacado que el presupuesto que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte destinará al área cultural alcanzará en 2016 los 436 millones de euros frente a los 388 millones de 2015, lo que supone un incremento del 12,3%. Esta cifra acompaña al total de las aportaciones que recibirá el sector de la cultura en los PGE por parte de la Administración General del Estado, que será de 803 millones de euros (un 7,3% más).

Un repaso rápida a las cifras generales descritas, indique que la partida para cine es la que más sube, seguida de cerca por la correspondiente a museos, a los que se adjudica 152,42 millones de euros. El museo del Prado, por ejemplo, recibe 45,40 millones de euros (7,2 millones más que en el ejercicio anterior) y el Centro de Arte Reina Sofía contará con 36,63 millones (un 0,7 por ciento más que en 2015). Eso sin contar instituciones como el Thyssen, el cual tras ser objeto de examen del Tribunal de Cuentas –registra pérdidas continuadas que sobrepasan los 5 millones de euros- recibe un incremento en la dotación de 6,02 millones  en 2016 frente a los 5,33 de 2015. En contraste, la Biblioteca Nacional se estanca en un 29, 86 millones (en 2015 recibió 29,26) o la promoción del Libro recibe 7,46 millones cuando en 2015 recibió 7,36 millones de euros. ¿Por qué unos sí y otros no?

¿Qué cultura es ésta y quién la ha pensado?, se pregunta quien escucha a Méndez de Vigo hablar echa mano de algo de hemeroteca. ¿Por qué no estaba presente en esta presentación del martes el Secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle? ¿Por qué su ausencia si estuvo él a pie de obra durante el traumático proceso en el que las propuestas culturales más importantes pasaron de hacerse a hundirse? Desde la Ley de Mecenazgo hasta la de Propiedad Intelectual, fuerontorciéndose -desapareciendo- una a una.

¿Qué cultura es ésta y quién la ha pensado?, se pregunta quien escucha a Méndez Vigo y echa mano de algo de hemeroteca. ¿Por qué no estaba presente en esta presentación del martes el Secretario de Estado, José María Lassalle?

La Ley de Mecenazgo quedó embutida en el sucedáneo de la Reforma Fiscal, la Propiedad Intelectual se aprobó con reservas y recelos, la Ley de Cine intenta abrirse paso con forzada esperanza. Eso sin hablar del IVA Cultural, que a día de hoy ni se reconsidera ni vuelve a su sitio, a pesar de las buenas intenciones del nuevo ministro. Pues aunque él se ha "batido" -ha dicho- por lograr una rebaja del IVA cultural del 21% al 10% en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2016, si bien "no ha podido ser", seguirá "luchando por ello". Pero, volviendo a los proyectos,  a los números,a la marca España,  esa expresión que blandían los portavoces 'populares' como un conjuro. ¿Dónde está hoy? Si la lectura o las bibliotecas fuera un barómetro de tan importante franquicia, ésta sería poco menos que un sucedáneo, una marca blanca.

Según el Observatorio de la lectura de 2014, el servicio de préstamo en las bibliotecas públicas sigue siendo el más utilizado, y sus índices se mantienen ligeramente al alza. El total de visitas a las bibliotecas asciende a 216,4 millones, con un incremento del 20,5% entre 2008 y 2012. También el número de usuarios inscritos aumenta, con un 43, 2% de la población registrada en una biblioteca. En los PGE de 2015, el grupo de programas de Bibliotecas y archivos alcanzó 67,90 millones de euros. Este año, apenas alcanza el grupo de programas de Bibliotecas y Archivos está dotado con 70,49 millones de euros, un 8,8 por ciento del total de la política. El asunto es que esa cifra ni se asoma a los 78,42 millones de 2013. ¿Por qué el cine -una industria que legítimamente tiene el derecho a crecer como todas- aumenta más de un 40% y no un servicio del que depende a formación de muchos ciudadanos?

Quedan muchos temas en el aire en las cifras de estos presupuestos. En su comparecencia de este martes, Méndez de Vigo, al ser preguntado también por la Ley de Mecenazgo, ha descartado presentarla en lo que queda de legislatura, debido "al poco espacio" con el que cuenta. "Yo no voy a presentar la ley en lo que queda de legislatura porque no hay tiempo, pero en el mandato hay un plazo de un año para desarrollar la ley y si los ciudadanos nos vuelven a elegir, eso haremos", ha apuntado. El ministro ha aseverado que, desde su acceso al cargo, las relaciones con el mundo de la cultura han sido "buenas y cordiales" y que ha tenido "una buena acogida". Asimismo, ha reiterado que no cuenta con "una visión mercantilista" de la cultura. Sin duda, la pregunta que queda -acaso- es si existe, al menos- algo parecido a una visión. Sea la que sea.

Méndez de Vigo dice no tener "una visión mercantilista" de la cultura. La pregunta es si existe, al menos, algo parecido a una visión. Sea la que sea

Libros de texto

Méndez de Vigo anunció también que su departamento va a destinar una partida de 24 millones de euros, que "rebañará" de los presupuestos de 2015, para ayudas para la adquisición de libros de texto y materiales de enseñanza el próximo curso escolar 2015-2016, que comienza este septiembre. Esto se suma a los 24 millones del proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2016.

"Se recupera un programa terriblemente demandado por los consejeros de Educación de las comunidades autónomas", ha asegurado el titular de Educación durante la rueda de prensa. "24 millones ya y 24 millones el año que viene, que serán repartidos entre las familias con menos recursos". Esta partida para libros pasó de cien millones en 2012 a 20 en 2013 y 1,4 en 2014 (sólo para Ceuta y Melilla, que son competencia del Ministerio), explicó.

Méndez de Vigo explicó que este crédito entrará en vigor "inmediatamente", después de presentarlo a los consejeros del ramo en la Conferencia Sectorial de Educación del próximo 13 de agosto. "Los hemos rebañado de los presupuestos de 2015. He querido que no sea una buena noticia para el futuro sino para ya", ha apostillado. El asunto no debería dirimirse en restregar el pan en el plato escaso, sino en alimentar con criterio y calendario.

Las propuestas bandera de la campaña electoral de 2011 se han esfumado. Las peticiones del sector -la bajada del Iva Cultural la más fuerte- permanecen sin ser atendidas

Para apostillas, las que se reparten como maíz o sal. Las propuestas bandera de la campaña electoral de 2011 se han esfumado, pero los comentarios al respecto no aparecen. Las peticiones del sector -la bajada del Iva Cultural la más fuerte- permanecen sin ser atendidas. La Ley de Cine y su modelo de financiación están por comenzar una andadura que tiene en los presupuestos de 2016 su experimento. A partir de entonces, se implementará un nuevo sistema de ayudas a la producción de largometrajes, de acuerdo con los términos de la nueva legislación.

Entretanto, el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA) varía su dotación en 23,78 millones de euros hasta llegar a los 76,91 millones, en virtud de las citadas ayudas del Fondo de Protección a la Cinematografía. Se asignan 94,20 millones para Música y danza y se destinan 53,56 millones para Teatro. En esa área, los cambios no son sustantivos, dos millones más que en 2015 y en teatro un ligero incremento. La larga sombra del IVA y la desaparición de la Ley del Mecenazgo siguen rondando un sector que no consigue otra cosa que la atomización y el micromecenazgo como reacomodo. ¿Potenciar la marca España? ¿Convertir los huesos de Cervantes en souvenir en lugar de difundir el Quijote?  ¿Vender impresiones bajo demanda en el Thyssen o programar exposiciones realmente con sentido? ¿Hacer cultura o producirla en serie y a bajo coste? ¿Inaugurar centros Cervantes para luego cerrarlos? ¿Marca España o marca blanca? ¿Dónde estaba este martes José María Lassalle, dónde?

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