La reforma de sedición coge impulso tras tumbar el Congreso todos los vetos

La reforma para derogar el delito de sedición, impulsada por el Gobierno, da un nuevo paso adelante y allana el camino hacia su aprobación antes de fin de año. El Congreso ha tumbado, con los votos de PSOE, Unidas Podemos y sus socios parlamentarios, las enmiendas a la totalidad del texto propuestas por PP, Vox, Ciudadanos, Junts y la CUP.

La propuesta de cambio legal del PSOE y Unidas Podemos busca convertir el delito de sedición en uno de desórdenes públicos agravados con una rebaja de 15 a 5 años de la pena máxima de sedición, y que contempla 8 de inhabilitación.

Tramitación 'express'

El debate se ha producido en sesión extraordinaria. El proceso en sí mismo está siguiendo un camino 'express' con tal de lograr la aprobación de la medida antes de que termine 2022: la Mesa del Congreso aprobó su tramitación tan solo 24 horas después de recibir la proposición de ley -a pesar de contar con un plazo de 30 días-, y esta sesión extraordinaria llega apenas una semana después de dar la Cámara Baja luz verde al proyecto.

El texto de la reforma, denuncia el PP, se ha hecho "al dictado" de los políticos condenados por el "procés", ya que la medida es un trámite clave entre el Gobierno y ERC para aprobar los Presupuestos. Grupos como la CUP, o Junts sin embargo también se han mostrado reacios al texto, del que critican que amenaza la protesta pacífica, un riesgo advertido por sindicatos y Amnistía Internacional.

Cruce de acusaciones en el hemiciclo

En un hemiciclo casi vacío y con la bancada azul del Gobierno vacía durante el debate, narra EFE, el diputado popular Carlos Rojas ha llegado a pedir sin éxito a los diputados socialistas que rompiesen la disciplina de voto para apoyar su enmienda a la totalidad, que aboga por mantener el delito de sedición y castigar los referéndum ilegales. Rojas ha considerado que la reforma es una "enmienda a la totalidad" a la sentencia del Tribunal Supremo que condenó a los líderes del "procés", y ha garantizado que, cuando el PP gobierne, "el delito de sedición volverá al Código Penal, igual que la dignidad a la política".

Desde la bancada socialista, por su parte, Felipe Sicilia ha acusado de nuevo a los populares de "enfrentar a unos catalanes contra otros" y de no haber entendido "que España es un país plural y diverso", y ha defendido la propuesta del PSOE como la defensora del "diálogo y el acuerdo". También Jaume Asens, presidente del grupo parlamentario Unidas Podemos, ha criticado cómo el PP respondió al "movimiento pacífico que pedía respeto" con "autoritarismos", "cárcel" y "golpes de porra".

Por su parte, el portavoz de Vox, Javier Ortega Smith, ha sugerido a los independentistas que "renuncien a la nacionalidad española" y pidan la de "Corea del Norte, Cuba o Venezuela". El diputado del partido verde ha alertado también del "efecto llamada" que, en su opinión, supone la reforma para el soberanismo catalán. Opinión que ha compartido con él la líder de Ciudadanos Inés Arrimadas, quien ha asegurado que "el separatismo lo volverá a intentar".

ERC trata de mediar con los catalanes

Ante la alarma generada entre la CUP o Junts ante la posible puesta en riesgo de la movilización pacífica, ERC ha tratado de llamar a la calma, estableciendo que "aún queda toda la tramitación legislativa" para mejorar la iniciativa, que tildan de logro para el independentismo. Su portavoz, Carolina Telechea, ha dejado claro no obstante que su objetivo sigue siendo la amnistía y la autodeterminación, frente a los reproches que le han llegado de Junts, que le ha acusado de "aceptar todo lo que (Pedro) Sánchez les pone encima de la mesa".

La próxima fase: enmiendas parciales

Superados los vetos a la totalidad, la proposición de ley pasará ahora al trámite de las enmiendas parciales. Esta es la ventana de oportunidad para que Esquerra reavive el debate sobre modificar el delito de malversación, que se suma a las condenas de los líderes del 'procés', y que pone en guardia a los socios de Gobierno.

La idea de los grupos mayoritarios es que todo esto se sustancie rápidamente y pueda pasar a su debate y aprobación por el pleno del Congreso en la semana del 19 de diciembre para su remisión al Senado, donde es posible que se culmine la tramitación exprés de este cambio del Código Penal antes de que termine 2022.