Aunque la noticia en los prolegómenos del estreno de España en la Copa Confederaciones fue la titularidad de Casillas y, en mucha menor medida, la de Soldado, La Roja le dio tal repaso a Uruguay que casi habría dado lo mismo que jugara sin portero. Al menos, hasta el minuto 88, cuando Luis Suárez batió a Casillas de un saque de falta directo y puso el 2-1, un marcador muy corto para los méritos que hicieron unos y otros.