El célebre inmueble y las 29 hectáreas de cultivo que la rodean fueron adjudicadas a la empresa Adega Condes de Albarei S.A. en junio de 2008 por 15 millones de euros. En el acuerdo de cesión se incluía el compromiso de los nuevos propietarios de contratar ex drogodependientes para la recolección de la uva y dedicar el 5% del dinero obtenido con la venta de las botellas de vino a proyectos de lucha contra la droga.