Puigdemont implica a la Corona en sus planes de secesión

El presidente de la Generalitat se ha referido de forma excepcional al papel que debe de jugar la Corona en el proceso de independencia en el que ha sumido a Cataluña. Carles Puigdemont ha explicado este lunes, en una entrevista radiofónica, que el papel que viene desarrollando el Rey es, en cierta forma, positivo, puesto que "si se mantiene al margen, puede ayudar más a preservar un rol futuro si el gobierno rectificara o quiere negociar". 

El presidente de la Generalitat ha evitado hasta ahora cualquier mención a cuál ha de ser la actitud del jefe del Estado en el 'proceso' que promueven los separatistas en Cataluña. Preguntado por esta cuestión, sin embargo, ha optado por valorar de forma positiva la conducta de Zarzuela, con la confianza de que no haya cambios en el futuro. 

La imagen de Soraya y Junqueras

Don Felipe se ha pronunciado en cuantas oportunidades ha sido necesario, de forma clara y firme en defensa de la Ley y la Constitución. En una reciente visita a Barcelona, el pasado febrero, con motivo del Congreso Mundial de Móviles, el monarca se refirió a la necesaria "colaboración leal y generosa entre las instituciones", y añadió que "es la que mejor impulsa el crecimiento económico, así como un mayor conocimiento e interconexión entre las personas así como el bienestar social".

Estaban presentes, en esa ocasión, tanto el presidente de la Generalitat y su vicepresidente, Oriol Junqueras, como la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. Un encuentro que dio lugar a una fotografía luego ampliamente comentada por la mano que Junqueras posó en el hombro de la vicepresidenta. Eran los tiempos de la 'Operación diálogo', ahora fenecidos.

El papel de la Corona está claramente establecido en la Carta Magna, que le atribuye la función de 'arbitraje y moderación', así como el de garantía de la unidad de la nación. Don Felipe se ha prodigado en desplazamientos a Cataluña en los últimos tiempos aunque es cierto que su presencia en la región se ha ralentizado en las últimas semanas por estrictos motivos de su agenda, con un mayor compromiso con los desplazamientos al exterior, después de casi un año de inmovilidad forzosa.