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Política

ERC propugna más control de TV3 y de la enseñanza en la acción del futuro Govern

Parlament de Cataluña

La ponencia política elaborada por ERC para su congreso de junio reconoce abiertamente que un 50 por ciento de respaldo social es insuficiente para alcanzar la república. Todos lo sabían y nadie lo reconocía. La autocrítica nunca ha sido moneda corriente en el bloque separatista. Los líderes del 'procés' tan sólo asumieron la imposibilidad de la independencia en sus declaraciones ante los tribunales. Todo era 'simbólico', y todo era imposibe. 

Mientras Carles Puigdemont se afana, en su escondrijo de Berlín, en buscar la forma para eternizarse en el poder, ERC prepara una estrategia con los pies en el suelo. El independentismo huye de la realidad, la deforma, la retuerce. Oriol Junqueras, en la cárcel desde hace seis meses, ha abandonado su ensoñación de la patria catalana y ha aterrizado en el espacio de la sensatez. 

"Fortalecer los espacio de soberania", se subraya especialmente en los 52 folios de esta ponencia, susceptible de ulteriores correcciones. Un texto en el que se  resumen algunos aspectos del fracaso del fracaso del 'procés',se reconoce que no hay masa social suficiente para llevarlo a efecto, se evita señalar los plazos para abordar la creación de  república y, en la línea de las directrices de Junqueras, miran más hacia los Comunes y hasta el PSC como futuros interlocutores que hacia las filas de JxCat, donde se arraciman los talibanes de Puigdemont.

Los tres puntales de la acción

La lengua, la educación y los medios son clave para ampliar este apoyo social al proyecto. Tres puntales que necesitan más impulso. Habla el texto de crear la marca "made in Catalonia" para todos los productos audiovisuales que se produzcan en la región, y recuerda la necesidad de 'medios de comunicación públicos potentes'.

Sin TV3, reconocen los republicanos, poco se podrá hacer. También sugieren la necesidad de llegar a un 'pacto nacional audiovisual' entre todas las formaciones secesionistas. De momento, en el reparto de los medios de cara al futuro Govern, Puigdemont se ha quedado con la tele catalana e incluso aseguran que mantendrá a Vicens Sanchís al frente del conglomerado. Andrea Levy, vicesecretaria del PP y diputada en el Parlament, afirmaba este lunes que "tendremos que controlar la programación de TV3 si se convocan nuevas elecciones". Lo que haga el PSC, es cosa suya, declaraba en esRadio.

La educación es el otro arbotante de la estructura de la futura república. Está en cuestión el adoctrinamiento en las aulas, evidenciado en los episodios del 1O, ahora investigados por los tribunales. ERC considera clave seguir en esta línea, ampliarla y robustecerla. También se señala en el documento lo imprescindible de impulsar una acción exterior más eficaz. El flanco de la denominada internacionalización del conflicto fue desastroso, nadie reibía al entonces presidente en sus viajes por el mundo. Tan sólo las ímágenes de las tensiones vividas en la jornada del referéndum han servido de altavoz, manipulado y sesgado, a las teorías de los secesionistas. 

ERC nada quiere saber de elecciones. Su portavoz Marta Vilalta lo aseguraba hace unas horas. "Cada día que pasa sin Govern estamos más en riesgo", señalaba. Hay que ponerlo en marcha cuanto antes, añadía. Puigdemont, desde Berlín, quizás tenga otros planes que pasan por las urnas. 

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