Objetivo Ayuso: Multiplicar el 4-M por todo Madrid

Visto con la distancia que da el transcurso de un año, los resultados de las elecciones del 4 de mayo de 2021 en Madrid fueron más que una hazaña. Sólo dos años antes, en 2019, el mapa de los resultados autonómicos en los 179 municipios madrileños estaba teñido mayoritariamente de rojo, con algunos puntos anaranjados y unos cuantos más azules. Es decir, el partido más votado en las autonómicas de 2019 en Madrid fue -también territorialmente- el PSOE, seguido a distancia por el PP, con un pujante tercer lugar para Ciudadanos; todo ello trufado con Más Madrid como partido emergente.

El vuelco de 2019 al 4-M, en números, es bien conocido. Isabel Díaz Ayuso pasó de 719.852 votos (un 22,23%) y 30 diputados, en 2019, a 1.631.608 votos (un 44,76%) y 65 escaños, en mayo pasado: quedó a solo cuatro escaños de los 69 que marcan la mayoría absoluta en la Asamblea de Madrid. La distancia con el segundo partido, que no fue el PSOE sino Más Madrid, fue de más de un millón de votos de diferencia.

Esa impresionante subida de Ayuso -más de 900.000 votos en solo dos años, con más del doble de votos, porcentaje y escaños- tiñó por entero el mapa de Madrid de azul. El PP fue el partido más votado en 176 de los 179 municipios madrileños. Solo tres excepciones en tres pequeños pueblos. De los tres, uno (Navarredonda y San Mamés, con 141 habitantes, tradicionalmente muy de izquierdas) empató en 31 votos el PP con el PSOE, y en los otros dos ganaron los socialistas: El Atazar (109 habitantes) y Fuentidueña del Tajo (2.228 habitantes). En los dos primeros, uno a cada lado de la N-1 en la sierra-norte, hay más gente los fines de semana y en vacaciones. Fuentidueña, a poco más de 60 kilómetros de la Puerta del Sol, es el último pueblo madrileño camino de Tarancón por la N-3. Los tres, con el máximo respeto a sus vecinos, solo suman el 0,03% de la población de la Comunidad de Madrid.

Por fijar el foco solo en las diez más grandes, en las elecciones autonómicas de mayo de 2019 sólo en una el PP fue el partido más votado: en Torrejón de Ardoz. ¿Y eso? Pues ‘eso’ es clave

Más datos. Los accidentados, y escasamente fértiles, 8.022 kilómetros cuadrados de la Comunidad de Madrid albergan una decena de ciudades de más de 100.000 habitantes: Madrid, Móstoles, Alcalá de Henares, Fuenlabrada, Leganés, Getafe, Alcorcón, Parla, Torrejón de Ardoz y Alcobendas, de mayor a menor. Luego hay una docena de ciudades con entre 50.000 y 100.000 habitantes, algunas con una Historia tan relevante como Aranjuez. Por fijar el foco solo en las diez más grandes, en las elecciones autonómicas de mayo de 2019 sólo en una el PP fue el partido más votado: en Torrejón de Ardoz. ¿Y eso? Pues ‘eso’ es clave.

Torrejón de Ardoz es un municipio de algo más de 130.000 habitantes en el Corredor del Henares, es decir, en una zona industrial madrileña con tradicional preponderancia de la izquierda. El PSOE gobernó allí sin problemas hasta 2007. En ese año, en unas elecciones que (para la Comunidad de Madrid) tuvieron bastantes similitudes con el 4-M de Ayuso, en Torrejón ganó la alcaldía para el PP un joven Pedro Rollán; entonces tenía 38 años. Su primera victoria fue por los pelos, en un entorno de éxito rotundo de Esperanza Aguirre para toda la región: una amplia mayoría absoluta aguirrista con el mapa de Madrid pintado de azul y casi tantos votos como Ayuso el 4-M: 1,59 millones de papeletas para Aguirre. Pero Rollán debió de hacerlo muy bien, porque en las siguientes elecciones (en 2011) sacó un 68,5% de los votos y 21 de los 27 concejales para el PP. Como el poder desgasta -también al que lo tiene-, cuatro años después, en mayo de 2015, obtuvo un resultado menos holgado: una justa mayoría absoluta de los concejales con el 48,86% de los votos. Y en julio de ese año cedió el testigo a un joven edil de su equipo, el actual alcalde, Ignacio Vázquez, que en ese momento tenía su misma edad de inicio: 38 años. Vázquez también debe de estar haciéndolo muy bien porque en las elecciones de mayo de 2019, cuando pintaron bastos para el PP, parcialmente solventados con coaliciones de gobierno, el alcalde de Torrejón logró una holgada mayoría absoluta (de 19 de 27 concejales) con el 57,5% de los votos.

Y aquí llega ‘la clave’: un candidato municipal con tirón no solo llena su propia urna de votos sino que ayuda a llenar la del candidato autonómico. Así, la urna autonómica en Torrejón de Ardoz fue en mayo de 2019 la única, de las diez ciudades con más de 100.000 habitantes de la Comunidad de Madrid, en las que el PP quedó en primera posición. Quedó segundo en la ciudad de Madrid, en Móstoles, Alcorcón y Alcobendas. Tercero, en Alcalá de Henares. Y cuarto en Fuenlabrada, Leganés, Getafe y Parla.

No es imposible que, si hubiera algún candidato a alcalde poco querido, la urna municipal acabe por ser un lastre para la urna autonómica, además de para su pueblo

El 4 de mayo de 2021 sólo hubo elecciones autonómicas, al ser repetición electoral, pero en mayo de 2023, esa ‘clave’ vista en Torrejón (y en tantos otros sitios) podrá comprobarse en todas sus dimensiones. La más obvia, que Ayuso ayude a llenar las urnas de los candidatos municipales. Y también, que aquellos que -como alcaldes o como concejales- se hayan ganado el afecto de sus vecinos colaboren para replicar en su ciudad el éxito del 4-M. Pero no es imposible que, si hubiera algún candidato a alcalde poco querido, la urna municipal acabe por ser un lastre para la urna autonómica, además de para su pueblo.

Esta obviedad explica que Ayuso hubiera preferido celebrar el Congreso del PP de Madrid hace bastantes meses, y que haya explicitado su voluntad de presentarse como candidata para presidirlo: un buen entendimiento entre los ayuntamientos y la comunidad amplifica las expectativas de voto para ambos. El objetivo declarado de Ayuso es multiplicar el 4-M por todo Madrid, consolidarlo para su Gobierno y trasladarlo al mayor número de municipios posible. Para lograrlo, hace falta buscar e impulsar a los potenciales alcaldes con más respaldo entre sus vecinos. Esa tarea lleva su tiempo y solo queda un año.

El Congreso del PP madrileño ya tiene fecha: los próximos 20 y 21 de mayo. Con una reunión este miércoles de la Junta Directiva regional para poner en marcha el cónclave. Solo queda una decena de meses para engrasar las mejores candidaturas en los 179 municipios madrileños y, en especial, en aquellos que, por su tamaño y por los servicios que ofrecen, pueden incluso compararse con bastantes capitales de provincia.