Destinos

España busca petróleo en todos lados

Mapa de posición de permisos de investigación y concesiones de explotación y almacenamiento subterráneo.

Un negocio de 1.500 millones de euros en el cual el desequilibrio productivo es tan evidente obliga a buscar petróleo donde sea. Durante el último año, hemos observado mucha polémica con el fracking y con las posibles exploraciones frente a las costas canarias. Pero hay mucho más.

Pese a la idea generalizada de que España no es un país petrolero, existen dispersos por nuestra geografía alrededor de 900 sondeos petrolíferos, de los cuales, la zona más productiva se encuentra frente al delta del Ebro, A 45 kilómetros del parque natural, en el interior del Mediterráneo, se produjeron 360.000 toneladas de crudo sólo el pasado año. Los nombres de los yacimientos, muy castizos, se llaman Rodaballo, Boquerón, Lubina, Dorada, Salmonete y el mayor de ellos: Casablanca. Curiosos nombres naturales para el petróleo.

Existen permisos de investigación en numerosos lugares de nuestras costas. Además de las costas de Fuerteventura y Lanzarote, las costas de Valencia, Granada, Málaga, Tarragona y San Sebastián se encuentran en marcha numerosas investigaciones en busca del producto que mueve nuestro mundo desarrollado.

También en Doñana

Pero aún hay más. En la costa de Gerona existe también una amplia zona de prospecciones que ha solicitado los permisos necesarios para estudiar el fondo marino. También lugares tan emblemáticos como el parque nacional de Doñana se encuentran rodeados por almacenes de petróleo como el de las marismas, siendo el valle bajo del Guadalquivir, alrededor de Sevilla, otro punto caliente para el petróleo patrio.

Nuestro récord de producción se produjo en el año 1998, cuando se extrajeron 531.000 toneladas de crudo, mientras que el récord para un solo yacimiento lo ostenta Casablanca, en la costa de Tarragona. Otros más modestos son los de Burgos, que tienen su record en las 14.000 toneladas de Ayoluengo en 1.996, o el ya clausurado Albatros, que cesó su producción en el golfo de Vizcaya en 1.997.

Claro que no todos los sondeos demuestran buenas potencialidades, como por ejemplo los sondeos realizados en  el golfo de Vizcaya, los llamados Cachalote, que tras disponer del permiso de prospección han desaparecido del censo de sondeos nacional.