El ministro principal de Escocia, Humza Yousaf, ha anunciado este lunes por sorpresa su dimisión tras la ruptura del acuerdo de coalición entre el Partido Nacional Escocés (SNP) y el Partido Verde, después de asumir que le sería imposible seguir en el cargo y gobernar en minoría de una manera mínimamente estable, como llegó a plantear en un inicio, según ha recogido EP.
El frágil equilibrio político escocés terminó de romperse el jueves, cuando los verdes anunciaron que no seguirían como socios minoritarios del Gobierno. A las diferencias por las políticas en materia de autodeterminación de género se sumó la revisión por parte del Gobierno de los objetivos para reducir la emisión de gases contaminantes. El SNP se veía abocado a gobernar en minoría, un reto que el propio Yousaf se mostró dispuesto a asumir el viernes, cuando aseguró que no dimitiría y se enfrentaría a una moción de censura impulsada por los conservadores y que ya había logrado el respaldo de otros partidos, entre ellos el de los verdes. Tres días más tarde, ha argumentado ante los medios que quiso seguir porque entendía que era "lo correcto", con la esperanza de encontrar "un acuerdo menos formal" con sus antiguos socios que ha resultado ser imposible. En este sentido, ha explicado que no estaba dispuesto a renunciar a sus principios para seguir en el poder y que, después de un fin de semana de reflexión, ha cambiado de idea. Entiende que, para "reparar" las relaciones políticas, es necesario que otra persona tome las riendas, si bien la dimisión no será inmediata. Así, ha explicado que ya ha informado a la cúpula del SNP de su deseo de abandonar el cargo para que se inicie un proceso de primarias, pero que seguirá como ministro principal hasta que se complete el proceso "para garantizar una transición ordenada".
"He tenido el honor de formar parte del Gobierno durante casi 12 años, en distintos cargos", ha recalcado Yousaf, "orgulloso" de las políticas impulsadas y visiblemente emocionado cuando ha agradecido el respaldo a su propia familia. "No puedo decir el honor que ha sido ser el ministro principal del país al que amo, el país en el que he criado a mi familia y el único país al que llamo hogar", ha añadido el dirigente independentista, cuya familia es de origen asiático.
Independencia
La dimisión deja ahora en el aire el futuro de una Escocia que no debía tener elecciones hasta el año 2026. De hecho, Yousaf, que asumió el cargo hace algo más de un año tras la abrupta dimisión de Nicola Sturgeon, dijo el viernes que quería encabezar al SNP en los próximos comicios. El partido secesionista llegó a plantear la posibilidad de que esa próxima cita con las urnas se convierta 'de facto' en unas elecciones plebiscitarias sobre la independencia, habida cuenta de que Londres rechaza la convocatoria de un segundo referéndum independentista como el que ya tuvo lugar en 2014.
Según Yousaf, la independencia está ahora "cerca", tan cerca que puede llegar a ser "frustrante". "Creedme, nadie siente tanto esta frustración como el líder del SNP", ha admitido en su comparecencia, en la que ha apelado a la paciencia y a la confianza de la ciudadanía. "Los últimos kilómetros del maratón son siempre los más duros. Hemos corrido esta carrera como un equipo y ahora pasaré el bastón de mando a un sucesor que estoy absolutamente seguro de que nos llevará a la línea de meta", ha añadido.