Quantcast

España

Acusan a otro agente infiltrado de mantener relaciones con una joven en círculos radicales de Madrid

El llamado Movimiento Antirrepresivo de Madrid anuncia protestas ante la Delegación del Gobierno tras conocer la verdadera de Sergio, policía infiltrado

Disturbios por la detención de Pablo Hasel y comunicado contra el policía infiltrado
Disturbios por la detención de Pablo Hasel y comunicado contra el policía infiltrado

La infiltración de Dani, agente de la Policía Nacional, en movimientos okupas y anticapitalistas de Cataluña generó la indignación en colectivos y partidos independentistas a principios de año. El caso llegó hasta la Justicia, después de que varias jóvenes presentasen una querella contra el policía al entender que los contactos "sexoafectivos" no fueron consentidos por no conocer su verdadera identidad.

Su caso no es el único. El llamado Movimiento Antirrepresivo de Madrid denuncia ahora otro caso de infiltración de un agente de la Policía Nacional en círculos radicales de la capital. Y, al igual que ocurrió con su compañero Dani, le acusan de haber mantenido relaciones con otra joven de este ámbito.

"Hace unas semanas supimos que Sergio, antiguo compañero nuestro, era en realidad S. [...], agente infiltrado de la Policía Nacional", denuncia el colectivo a través de un comunicado al que ha tenido acceso Vozpópuli.

Según el relato de este grupo, Sergio se infiltró en el año 2015 desde el Banco de Alimentos de Moratalaz, dando después el paso al "colectivo antifascista juvenil Distrito 14", en el mismo barrio. "Allí se mantuvo durante varios años, ganándose la confianza y legitimidad con la que se nos presentó al Movimiento Antirrepresivo de Madrid, donde colaboró esporádicamente desde nuestro inicio, pasando a formar parte plenamente parte en 2020 y 2021", afirman.

En dicho comunicado se detalla que Sergio formó parte de las movilizaciones contra el encarcelamiento del rapero Pablo Hásel, para luego "desaparecer del mapa": "Ahora, tras dos años sin saber de él, militantes antifascistas de Madrid han logrado destaparle tras un gran trabajo de investigación", afirma el colectivo.

Es en este punto donde el grupo relata las relaciones que Sergio mantuvo con una joven de estos círculos durante su infiltración: "Cabe destacar que siguiendo el mismo método que en los últimos casos de infiltración destapados recientemente estableció una relación sentimental con una compañera que duró 4 años para asegurarse un mayor acceso a la información y confianza". El agente llegó a convivir con ella y con otras personas del entorno, asegura el colectivo, al mismo tiempo que denuncia la "falta total de escrúpulos" del agente.

Convocan una protesta

La revelación de este suceso ha generado un gran revuelo entre los movimientos de extrema izquierda. "Hoy ha sido Sergio. Ayer fueron Mavi, Marta y tantos más. Las infiltraciones policiales son una herramienta de guerra psicológica contra nuestro derecho de organización", afirman desde el Movimiento Antirrepresivo de Madrid, que reúne a colectivos, organizaciones y activistas "frente a la represión".

Esta plataforma ha convocado una concentración "por el derecho de organización y en contra de las infiltraciones populares". La cita será este viernes 8 de septiembre a las 19 horas frente a la sede de la Delegación del Gobierno en Madrid. "Pasan por encima de lo que sea para controlarnos, violando nuestro derecho de organización política. Respondemos con lucha y unidad. No más infiltraciones", han exigido en los últimos días en nuevos comunicados.

'Dani', el otro policía

El primer policía infiltrado descubierto en este tipo de organizaciones fue Dani, calificado como el 'Poli Cupido'. Su revelación supuso un verdadero terremoto político y mediático que incluso en un tiempo llegará a los tribunales. Esta historia de infiltración se remonta al año 2020. El agente se instaló en el barrio de Sant Andreu de Barcelona con el objetivo de recoger información sobre el movimiento sindical antisistema, según reveló el semanario La Directa. Contactó con unas mujeres 'in situ' pero también hizo uso de la aplicación de contactos OkCupid, una plataforma de citas que une a los usuarios según su ideología política. De ahí el sobrenombre que se le ha puesto en algunos ámbitos: Cupido o Poli Cupido.

El caso saltó a los medios de comunicación a principios del mes de febrero de este año. Cinco mujeres del entorno okupa y anticapitalista, que aseguran haber tenido relaciones con el agente, le denunciaron por los delitos de abusos sexuales continuados, tortura o contra la integridad moral, descubrimiento de secretos e impedimento del ejercicio de los derechos civiles. Por el momento se desconoce en que situación se encuentra este proceso.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.

  • I
    Ibero

    Además de...pusieron la cama...a apechugar con lo hecho, toca.
    Escuchar a esta tribu sectaria sobre "integridad moral"...es patético - vomitivo.

  • A
    Auraz

    Manda narices que anticapitalistas y okupas hablen de integridad moral. Es aluncinante.

  • T
    Torquemada

    ¡Devuélveme el orgasmo! Supongo que cuando una de ellos se tira a un policía por razones similares, podrá ser denunciada. No recuerdo que la fiscalía pidiera más pena a la "tigresa" de ETA, Idoia López Riaño porque llegó a intimidar con un guardia civil para obtener información.

  • S
    stoicus

    Lo único que de verdad demuestra esta denuncia es el denodado esfuerzo, entrega sin límites a la defensa de los valores constitucionales y del bien común del policía, cuyo heroísmo queda contrastado y elevado al máximo nivel al haber penetrado los secretos más profundos de la podemancia.
    Ni el papá de Tarzán, oiga.

  • P
    Pepepelotas

    Lo que hay que exigir al policía infiltrado es que tampoco tiene que mojarse tanto y que mejore sus gustos y preferencias. Habitualmente, las de los círculos radicales huelen mal y sabido es que su fuerte no es la ducha, por lo menos que le pase un agua primero, que con lo fácil que se abren, es posible que le dejen restos de algo.