Quantcast

España

La ausencia en las municipales del proyecto de Díaz aboca a Podemos e IU a la guerra total

Las relaciones entre ambas fuerzas están rotas tras el lío del frente amplio andaluz y los morados, que se preparan por su cuenta, se quedarán sin el respaldo de la 'dama roja'

La portavoz de Por Andalucía, Inmaculada Nieto, (2d) junto al coordinador federal de IU, Alberto Garzón, (d) la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, (2i) y la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, (i) durante la campaña andaluza en una imagen de archivo.
La portavoz de Por Andalucía, Inmaculada Nieto, (2d) junto al coordinador federal de IU, Alberto Garzón, (d) la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, (2i) y la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, (i) durante la campaña andaluza en una imagen de archivo. EUROPA PRESS

Las elecciones municipales de mayo del año que viene decidirán el vencedor de la gran guerra que asola a la izquierda. Podemos e Izquierda Unida (IU), sumidos en una cruenta batalla tras el lío del frente amplio andaluz, acudirán a los comicios con el fin de lograr el mayor poder territorial posible por su cuenta. Precisamente los morados, con menor implantación fuera de las grandes urbes, intentarán superar a sus enemigos íntimos una vez confirmado que Sumar, el proyecto de la líder, Yolanda Díaz, -que de momento es una asociación, no una fuerza política-, estará fuera de combate cuando se abran las urnas.

No obstante, Podemos enfrentará un problema añadido porque la vicepresidenta segunda se mantendrá al margen de lo que hagan los partidos de izquierda a la izquierda del PSOE en esas elecciones, que prometen determinar el rumbo del país hasta el puerto de las elecciones generales. Díaz no apoyará a candidatos ajenos, ni se volcará con ellos, según precisan fuentes cercanas a la ministra de Trabajo.

La 'dama roja' tiene aprendida la lección de las últimas elecciones en Castilla y León y, sobre todo, en Andalucía, donde la fusión de IU y Podemos no dio los resultados esperados pese a que las primeras fueron coordinadas por los morados y las segundas por los de Alberto Garzón. Las campañas en un sitio y en otro fueron una sucesión de navajazos entre Podemos y Yolanda Díaz.

De los botellines a los botellazos

En verdad, el castañazo en Andalucía, donde la primera entente unitaria de Podemos, IU y Más País se hizo con cinco escaños -ocho por debajo de su objetivo-, fue precedido de una pelea por la falta de liderazgos compartidos y por las listas que prometen repetirse por los pueblos de España con mucha más fuerza. Solo hay una cosa que explica el inicio de las hostilidades entre dos partidos que sellaron su alianza en 2016 en el pacto de los botellines.

La salida de Pablo Iglesias, creador de Podemos, del Gobierno y del partido rompió el status quo dentro de la alianza entre los morados e IU. Los de Alberto Garzón, cuyas bases detestan lo que queda de Podemos, están cuestionando el reparto de poder dentro de la coalición. El tiempo en el que el éxito de la izquierda estaba subordinado al empuje del exvicepresidente segundo se acabó. Y la histórica fuerza está revisando la relación, especialmente ahora que el nuevo faro, Yolanda Díaz, tiene carné del PCE, integrado en IU.

En plata, Izquierda Unida ha puesto en cuestión quién ha de encabezar futuras listas electorales, así como quién debe cocinar la estrategia política. Pero el relato de las fuentes consultadas arroja un palpitar inquietante para el electorado dispuesto a optar por la vieja izquierda. La situación es tan tensa que fuentes de IU reconocen a este diario que las relaciones con Podemos se están revisando tras las elecciones del 19-J. Lo más curioso es que Izquierda Unida ha conseguido enemistarse no solo con Podemos por cómo se formó la coalición en Andalucía, sino ahora también con el Partido Comunista de Andalucía que se ha quedado sin diputados por primera vez en el Parlamento sevillano.

Yolanda, de entrada no

Podemos ya está carburando para las elecciones de 2023 con un proceso de primarias que está a punto de poner en marcha. Los morados no quieren dejar de ser la fuerza hegemónica y no quieren ceder ni un ápice de su poder municipal pese a las acometidas de IU y de Más País, dos fuerzas que en el frente amplio de Andalucía trabajaron, según Podemos, por dejarles fuera de juego. En verdad, el partido de Ione Belarra salió electoralmente bien parado dentro del fiasco de Por Andalucía, ya que se hicieron con tres de los cinco diputados que cosechó la coalición. Y se agarran a ello para ir por su cuenta.

Y es que pese a que todos dentro de la sopa de siglas sabe que pegarse solo les perjudica a ellos y a la Yolanda Díaz, las cabezas pensantes y los rostros protagonistas están dispuestos a echarse el pulso delante de toda España. Y ojo, porque en el reparto de cartas que arrojen las urnas, tanto el PSOE como la izquierda independentista pueden aprovecharse de una buena baza gracias a la pelea.

Los morados han decidido no integrarse formalmente en la futura plataforma de Yolanda Díaz. Pero la 'dama roja' no va a perder ni un segundo en juegos con Podemos, a quienes desdeña por su intención de no diluir sus siglas. En la sede de Francisco Villaespesa van a jugar fuerte y reclamarán a la titular de Trabajo una relación de igual a igual entre Podemos y todo lo que surja del proceso de escucha para ser "aliados electorales". Un lío. Todo un gran lío que promete más capítulos.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.

  • S
    Sin_Perdon

    Desde el principio el "pacto" fue un apaño entre una fuerza demagógica ascendente pero que carecía de estructura territorial y otra descendente pero con una gran estructura producto de décadas de trabajo militante.
    El plan de Iglesias era absorver a IU y al PCE para suplir sus propias deficiencias, pero encontró las suficientes resistencias de los "históricos" militantes de la izquierda que sabían que el bluff de Podemos caería tan rápido como subió en cuanto sus propias incongruencias fueran mostradas.
    Así que parece que, con un Podemos a la baja, en IU han decidido "resucitar" el proyecto, librarse de las imposiciones moradas y volver a construir un frente de extrema izquierda que se ocupe de los asuntos realmente relevantes para la clase trabajadora ahora que vienen mal dadas no, lo siguiente.
    Veremos si lo consigue.

  • F
    Felix14

    Y, por cierto, que Yolanda Díaz sea "el gran activo de la izquierda" demuestra su estado calamitoso, a un nivel entre peruano y chileno.

    • S
      Sin_Perdon

      Yolanda no es más que un producto de marketing propagandístico. Detrás de ella solo hay humo y mucha propanda mediática. Si se presentara a unas primarias, en IU o en Podemos, las perdería de calle porque no tiene detrás aparato alguno.

    • W
      Wik-1

      Un poco "gordas" las hermanas camaradas? Hay q exhibir un estilo "franciscano" en sentido literal

  • F
    Felix14

    Por favor, el verbo del titular es ABOCAR con B (desembocar, ir a parar). "Avocar" es un término jurídico que en el contexto del artículo no tiene sentido.