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España

Operación en Cataluña contra independentistas radicales acusados de planear actos violentos

Incidentes registrados durante la pasada Diada en Cataluña

La Guardia Civil ha iniciado este lunes en Cataluña una operación policial contra un grupo de independentistas catalanes radicales a los que acusan de planear acciones violentas, según informan a Vozpópuli fuentes conocedoras del operativo.

Se prevén en torno una decena de detenciones y registros a lo largo de la jornada. Los trabajos de investigación han corrido a cargo del Servicio de Información de la Zona de Cataluña con apoyo de agentes de las unidades centrales especializadas con sede en Madrid UCE-1 y UCE-3, según las mismas fuentes.

Las sospechas de la Guardia Civil es que este grupo ya había planeado pasar a la acción y se había hecho acopio de material para realizar acciones de violencia callejera. Esta operación se produce apenas dos semanas antes del segundo aniversario del referéndum ilegal del 1-O. 

Pendientes de la sentencia del procés

Las fuerzas de seguridad trabajan con la perspectiva de que el próximo otoño en Cataluña puede estar cargado de protestas en la calle, especialmente después de la sentencia del Tribunal Supremo contra los líderes del procés y la posibilidad de que sean condenados. Esta resolución coincidirá previsiblemente con la campaña de las elecciones generales. 

Ya el pasado 11 de septiembre, coincidiendo con la celebración de la Diada en Cataluña, se registraron incidentes entre las fuerzas de seguridad y manifestantes radicales en los alrededores del Parlamento autonómico. 

No es la primera vez que la Guardia Civil pone el foco en elementos radicales dentro del independentismo catalán. Ya en abril del año pasado, la Guardia Civil arrestó a una integrante de los Comités de Defensa de la República (CDR) llamada Tamara Carrasco. Se le acusaba de hacer un llamamiento a hacer actos de sabotaje

Fue detenida y posteriormente quedó en libertad provisional por decisión del juez de la Audiencia Nacional, Diego de Egea, quien discrepó de la tesis de la Fiscalía, que acusaba a la arrestada por rebelión y terrorismo. El magistrado rebajó los hechos a una cuestión de desórdenes públicos, siendo competencia de un juzgado catalán. 

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