Los cuatro nuevos magistrados del Tribunal Constitucional han jurado o prometido este sábado su cargo ante el rey Felipe VI en una ceremonia celebrada en el Palacio de la Zarzuela, a la que también ha asistido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Justicia, Pilar Llop, como notaria mayor.
Los cuatro magistrados son el exministro de Justicia Juan Carlos Campo y la catedrática y ex alto cargo de Moncloa Laura Díez, ambos propuestos por el Ejecutivo; y los jueces César Tolosa y María Luisa Segoviano, elegidos por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Además de Sánchez, a la ceremonia que ha tenido lugar en el Salón de Audiencias del Palacio de la Zarzuela han acudido el presidente del Tribunal Constitucional, Pedro González Trevijano, y el del Tribunal Supremo, Rafael Mozo. La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, y del Senado, Ander Gil, respectivamente, también han estado presentes en Zarzuela.
"Prometo cumplir fielmente las obligaciones del cargo de magistrado del Tribunal Constitucional con lealtad al rey y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado", han afirmado los magistrados Campo, Diez y Segoviano, en tanto que Tolosa ha empleado la misma fórmula pero como juramento. Ante los magistrados, la Constitución estaba abierta por el título IX en su artículo 159 sobre el Tribunal Constitucional.
Tras prestar juramento o promesa, cada uno de los nuevos magistrados ha recibido la felicitación de don Felipe, con quienes se han fotografiado para después hacerlo también con el resto de asistentes.
El pleno del Tribunal Constitucional confirmó este jueves por unanimidad la idoneidad de los cuatro, lo que supone el último trámite para su renovación, que desembocará en una corte de garantías de mayoría progresista.
Recibido el aval de pleno y tras el acto de este sábado, se abrirá el debate sobre quién será el nuevo presidente del Tribunal Constitucional.
