Publicado: 07/05/2022 04:45
El PP no solo ha cambiado de líder, sino de discurso respecto a Cataluña. Si hace un año Pablo Casado acudió al Cercle d'Economia para criticar los indultos y protagonizar un cruce de declaraciones con Antonio Garamendi, Alberto Núñez Feijóo aprovechó el mismo foro para defender la "nacionalidad catalana". Un discurso, muy aplaudido por los presentes y criticado después por Vox, que supone un giro de 180 grados en la estrategia del Partido Popular respecto a Cataluña.
"La nacionalidad catalana debe recuperar su liderazgo". Esa afirmación, realizada por Feijóo en Barcelona frente al empresariado catalán, fue objeto de titulares en diversos medios y también provocó la reacción airada del partido de Santiago Abascal, que utilizó la cuenta oficial del partido en Twitter para responder en estos términos: "La nación española debe recuperar su autoestima. Y dejar de utilizar el lenguaje al que se agarran los que quieren destruirla".
En Génova eran conscientes de esas posibles reacciones, pero confirman que las palabras de Alberto Núñez Feijóo estaban totalmente medidas y buscaban un doble objetivo: reivindicar la Constitución Española en Cataluña y, además, reeditar a nivel nacional la misma estrategia que ya empleó el líder popular en Galicia para dejar sin argumentos a los nacionalistas del BNG.
Fraga y las nacionalidades
El entorno más próximo a Feijóo recuerda a Vozpópuli que "el concepto de nacionalidad está en una Carta Magna que debatió, elaboró y refrendó el fundador de nuestro partido, Manuel Fraga, y a nadie debería extrañarle que un presidente del PP lo utilice".
Efectivamente, el artículo 2 de la Constitución "reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas", por lo que el líder del Partido Popular, defienden desde Génova, se ha "ajustado" al propio contenido de la Carta Magna.
Fraga, en todo caso, defendió en su día que "nación y nacionalidad es lo mismo", dejando claras sus reticencias a la redacción de ese artículo 2 que, sin embargo, finalmente apoyó. Ahora, desde Génova consideran que si el propio fundador del partido aceptó ese término de "nacionalidad", y éste está recogido en la Constitución, "lo normal es que podamos usarlo".
Exporta el "galleguismo integrador"
Más allá del reconocimiento de la "nacionalidad catalana", Alberto Nuñez Feijóo protagonizó un discurso en el Cercle d'Economía en el que reivindicó la "identidad" territorial" frente a las "mentalidades centralistas", y que recordó a intervenciones pasadas en Galicia.
Desde el equipo del presidente popular explican que el partido quiere potenciar ese "perfil autonomista" de Feijóo, y que él mismo ha explotado como presidente de la Xunta: "Va a seguir defendiendo la laguna cooficial, la identidad propia, las nacionalidades históricas... Y ese tipo de discurso es compartido por catalanes, gallegos, vascos, navarros, andaluces... que se sienten también españoles.
En ese sentido, las mismas fuentes afirman que Feijóo quiere exportar el llamado "galleguismo integrador" a nivel nacional: "Él siempre defendió la identidad propia de Galicia, pero dentro de España. Y ahora va a hacer lo propio en Cataluña y en otros territorios".
Ese discurso, recuerdan, dejó "sin argumentos" a los nacionalistas del BNG en Galicia y el objetivo es emplearlo también frente a ERC y Junts: "En Galicia frenamos de esta forma al nacionalismo y el independentismo y el objetivo es hacer lo propio en el resto de España".
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No estoy muy seguro de que sea una buena decisión. En Cataluña estamos cansados de escuchar la cantinela nacionalidad, nación, etc. Aquí esos términos chirrían.
Hubo una Constitucion en 1978 que todos abrazamos, pensando en la reconciliación. García Trevijano nos avisó de sus fallos, y se le hizo el”vacío”. El resultado ha sido: Desigualdad entre españoles, partitocracia, falta de representatividad de los votantes, abuso de poder con exclusión y prebendas por parte de los nacionalismos. Y no contentos con eso, resulta que ese pacto tan desigual, solo ha servido como “camino” para ganar en el siglo XXI, la guerra que se perdió en 1939. Fuimos unos ilusos pensando que la Antiespaña iba a cumplir el pacto. Solo nos queda VOX.
Qué esperaban del Galeusko? Asco de PS y PP. España está acabada.
... Vox tiene razón... seguir pasando la mano por el lomo a los secesionistas es alimentarles... en las cuatro provincias gallegas los del BNG medran con el PP, un partido clientelar al estilo del PSOE-A... las autonomías que sufrimos sólo han servido y sirven para acentual desigualdad entre españoles... una cosa es descentralizar la administración del Estado, acercándola a los ciudadanos, y otra el montaje de 17 tinglados con decenas y decenas de políticos acompañados de sus compadres... duplicar y triplicar competencias es caro e ineficaz, y sobre todo, permitir el reparto de las provincias en regiones que a su vez enseñan a sus niños y jóvenes lo que les da la gana, en no pocas ocasiones mintiendo u ocultando la verdad histórica... esto es un desastre, y repito que pasar la mano por el lomo de los secesionistas es simplemente resultar cómplice de ellos...
Menos mal que nos queda Vox
Las autonomías podrían ser razonables si no fueran una fuente de discriminaciones y privilegios totalmente injustificables.
Podrían ser razonables si no nos ocasionaran un gasto superfluo injustificable desde el punto de vista de la eficacia del dinero público.
Podrían ser razonables si no se usaran para "evidenciar" diferencias ficticias, presentando a sus ciudadanos como los mejores, los más guays, en contraposición con los ciudadanos de otras autonomías, muy malos.
Podrían ser razonables si consiguieran que la convivencia entre todos los españoles fuera sana, exenta de odio, si consiguieran hacernos sentir parte ilusionante de un camino común.
Me temo que las autonomías, tal como están funcionando hoy dia, no nos aportan nada de todo esto.
Muy buena táctica por parte de Feijóo, con esto demuestra su inteligencia, lo único que está haciendo es quitar votos al psoe, la moderación en estos momentos en España es fundamental, me gusta Feijóo, le votaré....
Pero que poco conoces feijoo al separatismo catalán. Si lo hace para conseguir votos en Cataluña puede estar bien, pero al final lo engañaran como al cobarde de Rajoy.
Vamos los españoles que aún quedamos en Cataluña seguiremos abandonados y humillados
"Ser o no ser". Confrontar o alinearse.
¿ Que tal Constitución? ¿ Que tal Legislación? ¿ Que tal aplicación, simple y llanamente de de Justicia?
El PP también se rinde ante el independentismo. Paños calientes, silencios y dinero y que sibilinamente, sin mucho ruido, puedan seguir el camino que llevará a la Nación Española a su desmembramiento.
Lo que olvida Feijoo, que cosas, es que Fraga y su partido incluido Vestringe, que tiempos, votaron en contra de la LOAPA, claro que también fue Fraga el creador como presidente de la Xunta del nacionalismo gallego actual de Feijoo, que llevo a Fidel por un viaje por galicia, como Mandela con el asesino que regalaba diamantes juzgado por crímenes de lesa humanidad . Espero que cuando este país se convierta en lo que sucedió en Yugoslavia, Georgia, Moldavia, Ucrania o en la actual EEUU en 1861, a Feijoo se le trate como merecerá si vive.
Cuando este país sufra lo que sucedió en Yugoslavia, Georgia o ahora Ucrania, o en la actual EEUU en 1861 espero que los culpables de tanta comprensión sean tratados como merecerán, del primero en 1977 a hoy mismo. Fraga, en todo caso, defendió en su día que "nación y nacionalidad es lo mismo", dejando claras sus reticencias a la redacción de ese artículo 2 que, sin embargo, finalmente apoyó. Ahora, desde Génova consideran que si el propio fundador del partido aceptó ese término de "nacionalidad", y éste está recogido en la Constitución, "lo normal es que podamos usarlo". Lo